CUATRO

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Bangkok 2009

Gun acababa de cumplir dieciocho años. Él también fue la última persona de su clase en cumplir dieciocho años, justo antes de graduarse.

—Feliz cumpleaños— escuchó que su mejor amigo le gritaba mientras entraba a la sala vacía de la casa. Gun odiaba salir a almorzar porque no soportaba el calor, así que se quedó en la habitación de su casa y aprovechó ese tiempo para leer.

Off, que nunca almuerza con él ya que prefería jugar al fútbol al aire libre, decidió dedicarle algo de su tiempo a su mejor amigo, comprando bocadillos en la cafetería antes de dirigirse hacia donde estaba Gun, sentado junto a la ventana y leyendo un libro.

—¿Qué tienes ahí?— preguntó Gun cuando dejó el libro, recostándose en su silla mientras esperaba que Off mostrara la compra para su cumpleaños. Su mejor amigo no le dio ningún regalo, como siempre, pero siempre se aseguraba de comprarle comida que Gun prefería a un osito de peluche inútil o una tarjeta.

—¡Gelatina!— gritó Off emocionado mientras vertía tazas de gelatina, de diferentes sabores, desde lichi hasta mango. Gun no pudo evitar reírse de él, viéndolo sentarse en el asiento a su lado.

—¡Vamos, compré todos los sabores para que puedas probarlos todos!— dijo Off, dándole una pequeña cuchara de plástico y agarrando su propia gelatina —Tómala como mi regalo de cumpleaños.

—¿Es mi decimoctavo cumpleaños y me das gelatina?— se burló Gun fingiendo estar molesto, haciendo un puchero con los labios mientras inclinaba su cabeza y la presionaba contra los hombros de Off —Eres el peor mejor amigo.

—¿Qué más podría darte, eh?— preguntó Off, tocando juguetonamente la frente de Gun —Ya lo tienes todo.

—Bueno...no todo— Gun se rió entre dientes, hurgando en su gelatina y sorbiendo una cucharada —Nunca antes me habían besado.

—¿Eh?...

—¿Eh?— Gun se sentó lejos de Off —¿Dije eso en voz alta?— preguntó y cuando escuchó a Off reír, se golpeó la cabeza y se golpeó la frente contra el escritorio, enterrando su rostro lejos de Off, quien siguió hablando y riéndose de él.

—Bueno, supongo que no tienes eso— Off asintió, agarrándose el estómago mientras seguía riéndose de él —¿Pero qué tiene eso que ver conmigo?

—Cállate, cállate— Gun pateó sus pies debajo del escritorio —¡No quise decirlo en voz alta!

—Quiero decir que a mí tampoco me han besado— respondió Off, secándose las lágrimas que amenazaban con brotar de sus ojos mientras se abanicaba la cara acalorada.

—Espera... ¿No lo has hecho?

—¿Por qué actúas con sorpresa?, Tú eres mi mejor amigo. Lo sabrías si lo hubiera hecho— Off se encogió de hombros, abrió una taza y mordió la gelatina.

—Pensé que lo hiciste, pero nunca me lo mencionaste...

—Siempre te lo contaría todo. Eres mi mejor amigo— respondió Off, dándole un puñetazo en el hombro en broma. Gun probablemente debería sentirse un privilegiado, pero en cambio se sentía agobiado y un poco decepcionado por tener que llevar la palabra amistad cada vez que se refería a Off.

—Sí, mejor amigo— murmuró mientras miraba su gelatina, tratando de ocultar la expresión triste en su rostro.

—Y supongo que, como mejor amigo, probablemente debería darte un regalo inolvidable, ¿no?— respondió Off cuando una idea surgió en su mente.

—La gelatina no es inolvidable, pero supongo que se acerca bastante— respondió Gun, sin saber que Off tenía algo más planeado.

—No. Estoy hablando de tu primer beso— resopló Off —¿Por qué no ser tu primer beso?

Can We Pretend?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora