【05๑ Satisfacción y placer】

258 16 5
                                    

El rostro del médium se hundió en el cuello del pelirosa, que impaciente espero a que actuara

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El rostro del médium se hundió en el cuello del pelirosa, que impaciente espero a que actuara. Su pedido fue hecho en segundos, sintiendo la lengua áspera y húmeda pasándose por su cuello, sus labios dejando leves besos, y sus dientes dejaban marcan que con dificultad ocultará.

Pero no le importaba, quería disfrutar lo suficiente, ver todo lo que puede obtener de él, todo lo que le va a hacer y como lo iba a complacer con sus gemidos.

En un momento sintió los pulgares del muchacho encima suyo agarrar sus dos pezones, se quedó quieto, haciendo sentir curiosidad al psíquico sobre lo que hará. Hasta que un fuerte gemido salió de su boca, pellizco sus pezones y mordió suavemente su cuello, pero ante lo inesperado un gemido se escapo de su boca.

No le tomo importancia y gemía sin problemas ni vergüenza alguna, quería deleitarse con las habilidades que Toritsuka tenía para hacerlo sentir bien.

Reita, ante obtener la respuesta que quería, se levanto y lo observo: Su respiración ya se agitó pero no tanto, sus ojos se cristalizaron, la marca en su cuello empezaba a tener un tono morado rápidamente y el pecho del chico ya estaba rojo. Sus ojos brillaron ante verlo y sin dudar bajo sus manos, acariciando su torso y después ir bajando aún más, sin tener ninguna queja del chico que disfrutaba cada uno de sus toques.

Sus manos pasaron a sus caderas y tocaron su pantalón, para después bajarlo hasta quitárselo, Kusuo sólo miraba expectante, esperando lo que va a hacer a continuación con mucha impaciencia.

Reita puso sus manos por debajo de su muslo y levantó sus piernas, después enterró su rostro en el pecho del chico, quedándose quieto un rato, confundiendo al chico que quería seguir sintiendo más nuevas experiencias. No esperaba que se cansará tan rápido.

— ¿Reita? —. Interrogó enseguida, escuchando una pequeña risa del mismo, también notando como empezaba a acariciar sus muslos de arriba a abajo y levantaba un poco su rostro.

No tanto, para después proceder a lamer su pecho, obteniendo un pequeño jadeo del contrario.

Siguió así por un largo rato, retiro una mano de uno de los muslos y empezó a pellizcar otra vez uno de sus pezones. Kusuo le dedicaba suaves gemidos, bajos para evitar que los escuchen, aunque el personal del hotel seguramente ya sabían que era lo que estaban haciendo en esa habitación, pero le gustaría ser precavido.

Sintió la mano que todavía masajeaba su muslo subir y agarrar su trasero, el médium levanto el rostro y lo beso, dejo de pellizarlo, y cambio a apretarle el trasero, a veces masajeando estos, el pelirosa jadeaba por aquel toqueto en sus glúteos, pero sin problemas con aquello, más que nada, adoraba aquel manoseo.

Su mano viajaba de arriba a abajo, causándole escalofríos con el frío de esta, ocasionado jadeos mientras su abrazo al cuello lo acercaba cada vez más.

Ambos tenían el rostro rojizo, sentían sus respiraciones agitadas ante tales acciones que llevaban haciendo, pero querían seguirlas, querían quedarse exhaustos de tanto placer que se podían ofrecer.

❤︎Pᴏʀǫᴜᴇ ᴛᴜ?❤︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora