𝐍𝐎𝐓𝐈𝐂𝐄 𝐌𝐄- HeeJakeHoon

𝐓𝐑𝐄𝐒 𝐄𝐒 𝐄𝐋 𝐍𝐔𝐌𝐄𝐑𝐎 𝐏𝐄𝐑𝐅𝐄𝐂𝐓𝐎

Dedicado a: LeeBlack00 cute_jaywon heehooncore

A las personitas más pacientes y que siguieeron la historia, con sus idas y venidas, espero y cumpla con sus expectativas ❤️

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   Jake estaba ido, su mente seguía en aquella casa, en esa habitación donde Park Sunghoon y Lee Heeseung le habían hecho la mamada de su vida, seguía ahí a pesar de todo lo que había pasado, a pesar de los días que fueron infernales solo por su pobre intento de escapar de ambos chicos, de lo que habían hecho, de como se sintió y como se desconoció. Sentía sus mejillas arder y como su polla palpitaba solo de recordarlo, apretaba los ojos y negaba con la cabeza, pasaba su mano con frustración por su cara porque simplemente quería espabilarse.

Se sentía mal y bien, era una mezcla extraña de lo que había acontecido, era culpable de cumplir una fantasía aún cuando él no la había iniciado. Por esas largas dos semanas sintió que los había usado aunque claramente no era el caso, quizás se sintió perturbado por haber gozado tanto de aquella experiencia, pervertido, enfermo… pero no de salud, no adolorido. Enfermo de disfrutar cada recuerdo de aquellos roces, de las palabras sucias, de los besos tiernos pero calientes del rojizo, de la lengua experta y expresiones sumisas del rubio. Todo aquello era demasiado, aún siendo la experiencia grata no sabia que hacer, verlos hacia que su respiración se cortara y que un tic nervioso se adueñara de sus piernas. ¿Cuál sería la palabra para describir aquello? ¿incomodidad? ¿Ansiedad?... No lo sabía, tampoco quería sentarse a hablarlo, ni siquiera quería hablarles, bueno… quizás si ¿o no?

Estaba confundido y a pesar de todo, su miedo más grande era simplemente no controlarse del todo si tenía la oportunidad. Había tenido sueños luego de esa interacción tan íntima con los mayores, sueños en los que se volvían uno, donde no sabía dónde empezaba su cuerpo y terminaba el de ellos, y definitivamente sentirse bien al respecto era una locura.

Sabía que masturbarse era algo normal, pero en su caso lo sentía excesivo y luego, al hacerlo, un nudo extraño se formaba en su estómago, no sabía que era y le molestaba no saberlo. Al final solo se duchaba y dormía para tener un sueño más caliente y sucio que el anterior, no lo podía evitar, no como a los chicos atractivos que parecían querer decirle algo que se negaba a escuchar. Resopló aún en su mundo totalmente perdido del exterior y de su mejor amigo que se estaba agotando de ser ignorado.

—¡Oye!... Hola… tierra llamando a… ¿Jake?—el mencionado  parpadeó un par de veces cuando fue consiente del movimiento de la mano frente a él— ¡Jake!— gritó para llamar del todo su atención.

—¡Ah! ¿Qué? ¿Qué sucede?— preguntó fuera de órbita posando su vista por completo en su amigo.

—Es lo que te pregunto a ti, estás semanas has estado bastante extraño— dijo obvio— ¿Qué te pasa?— preguntó viéndole fijamente intentando buscar una respuesta en los ojos delatadores de su amigo el cual desvío la mirada rápidamente, preocupando al mayor.

—Nada, no me pasa nada— dijo en un tono para nada creíble mientras fingía una sonrisa.

—No me digas que no te sucede nada—le regaño el castaño— Es obvio que algo te pasa… ¿Acaso sucedió algo en casa de Park?— preguntó al recordar que desde ese día se comportaba extraño y viendo como Jake se tensaba- “bingo” -pensó.—Entonces es eso ¿Te hicieron algo?— ¿De hacer? mucho -dijo el pelinegro para sus adentros


—No, no me hicieron nada, Hyung — respondió

—Oye, mejor será que me lo digas, si te hicieron algo malo te juro que les daré su merecido— dijo con seriedad, oh! Park Jongseong siempre hablaba enserio cuando se trataba de defender a sus amigos, sobre todo a su mejor amigo.

—Te digo, que no me hicieron nada Seong, al menos no algo… malo, creo— dijo frunciendo su ceño, definitivamente no fue algo malo y eso lo asustaba aún más.


—¿Crees?—preguntó con la ceja alzada—Oye, de verdad, si fue algo que te haya hecho sentir mal dímelo y los pondré en su sitio— Jake rio sintiéndose realmente conmovido.


—Me conmueves, Seongie~— canturreo algo meloso viendo la mueca de asco en el rostro ajeno.

—No hagas eso, por Dios…—Jake rio aún más fuerte ante el tono que uso el sujeto.

—Ya, de verdad no me hicieron nada, solo estoy en otras cosas, mi cabeza está en otro sitio— le aseguro con voz cansada.

—Y entonces… ¿Por qué los ignoras?— preguntó — O de plano parece que les huyes — dijo obvio buscando alguna respuesta automática.

—No los ignoro, claro que no hago eso— respondió nervioso— Menos les huyo— agregó inseguro.

—¿A si? ¿Enserio?— preguntó con la ceja alzada— Pues entonces, háblales… que vienen para acá y parecen que enserio desean hablar contigo— le advirtió.

—¿Qué?— el mayor pareció entrar en pánico y se levantó intentando irse sin saber si era cierto o no, hasta que al voltearse se dio cuenta que Seong le había tomado el pelo haciéndolo soltar un suspiro y volver a tomar asiento.

—Y luego dices que no andas escapando— dijo negando con su cabeza.

—Ok, quizás  si estoy  huyendo, pero no por qué me hayan hecho algo mal ¿Está bien?... Solo… me intimidan de alguna forma ¿De acuerdo?— dijo con un leve tono de desesperación.

—¿Te intimidan?—le cuestionó extrañado.

—Me refiero a que ellos…—mientras intentaba buscar las palabras vio al par con el que estaba reacio a hablar luego de lo ocurrido— Te prometo que te contaré— dijo recogiendo sus cosas— Pero por ahora necesito irme de aquí— se despidió sin esperar una respuesta dejando al mayor aún más confundido que antes.

—Pero…—el castaño lo vio partir rápidamente con el ceño fruncido y resoplando se volteo viendo la causa de la huida del pelinegro— Esos dos… —dijo entre dientes suspirando intranquilo, no tenía nada en contra de ellos, poco le importaban, pero al ver tan nervioso al pelinegro no le sentaba bien y aún así decidió no meterse, Jake era un adulto y ya le había dicho que le contaría así que se dispuso a recoger sus cosas para irse ya que pronto tenía una clase. Dándole una última mirada a los chicos que parecían algo decepcionados por la repentina huida, Jongseong se levantó de la mesa no queriendo que le cuestionaran a él hacía donde había escapado su amigo.