Un vampiro y un dragón.

Capítulo 3

Por la mañana me planteo no ir a desayunar, pero al final me visto y salgo al pasillo.  Porque que Jaxon no me quiera no es razón para morirme de hambre. Cuando llego al gran comedor, lo veo sentado al lado de Mekhi, casi al final de la mesa. Tiene ojeras muy marcadas, y tiene pinta de haber dormido tan mal como yo. La silla que tiene al lado está libre, y cuando me mira sus ojos van de la silla a mí. Pero cómo no quiero que me diga destrozando, me deslizó al lado de Gwen en la otra punta y hago todo lo posible por no mirarlo. A la mierda, Jaxon no define mi existencia.

Desayuno charlando con Gwen y Eden y luego me retiro a mi habitación a ponerme algo más cómodo para volar. A ver, técnicamente cuando vuelvo no llevo ropa, pero es mucho más tranquilizador lanzarse al aire en chándal. Me cambio lo más rápido que puedo y me reúno con Grace y los demás  afuera. Entre Macy y Gwen crean un portal para llevarnos a la mitad de la nada, entre montañas, con un paisaje y clima perfectos para volar. Grace se transforma en gárgola y echa a volar, dejando a Hudson mirándola hipnotizado.

- Eh, tío. Se te cae la baba.

Me gruñe, pero sé que está de broma. Luego salta y alcanza a Grace. Edén pega un grito y se transforma en dragón. Macy, Hudson y Gwen se suben con dificultad, El vampiro a regañadientes, y las tres surcan el cielo, alcanzando  Grace. Yo me encojo de hombros y corro hasta lanzarme al acantilado. Enseguida saco al dragón que llevo dentro y despliego las alas.

No llevo ni tres segundos en el aire cuando Jaxon me alcanza. Está en su forma de dragón morado. Es prácticamente tan grande como yo, pero vuela con un poco de desconfianza, como si no se sintiera muy seguro. Le hago un gesto con la cabeza como diciendo: Muy bien. Sus ojos brillan y mi corazón da un brinco, pero giro la cabeza y tomo velocidad. Lo oigo suspirar, pero enseguida me toma la delantera cierro un poco los ojos y adelanto a Eden (Que lleva encima a Macy, Gwen y Hudson) y Grace en un abrir y cerrar de alas (eso me ha quedado muy bien) y me pongo en la delantera, aunque sé que llevo a cierto dragón morado justo a la retaguardia.

Empiezo a ascender en línea recta, hasta que me paro y simplemente aleteo, quedándome donde estoy. Jaxon pasa a mi lado sin poder parar y me mira con una cara de incredulidad. Bufa y sigue ascendiendo hasta que cambia el rumbo y baja hasta quedar a mi altura. Nos  mirándonos, me pierdo en sus ojos. Y nos quedamos así, observando al otro. No hace ningún ademán de bajar la cabeza, no hace nada por irse. Solo me mira. Bueno, al menos hasta que Edén pasa por medio con las alas plegadas.

- ¡No os quedéis quietos, dragoncitos!- Nos grita Macy.

Pongo los ojos en blanco y luego alcanzo a Eden. Grace se sitúa a mi izquierda.

-¡Eh! ¡A lo mejor podrías llevar a Hudson ahí encima! Para que Eden no cargue tanto peso.

-¡Ni en sueños!- Grita el vampiro. Pero se le nota que se lo está planteando por Eden, así que le guiño un ojo.

- ¡Vamos Hudson, a Flint le parecerá bien! ¿Verdad?

Muevo la cabeza, pero Hudson pone los ojos en blanco.

- Ahora te lo traigo.

Grace va a por él, y la siguiente vez que se acerca Eden, Hudson parece tan extasiado mirando a Grace que se sube sin quejarse tanto como lo haría normalmente. Grace le lanza un beso y se lanza en picado de nuevo. Oigo a Hudson suspirar, embelesado. Lo miro y él pone los ojos en blanco.

- Venga, vámonos...

Volamos un rato más hasta que nos duelen los huesos. Después nos transportamos de nuevo a la Corte Dragontina. Jaxon parece a punto de desmayarse, lo cual parece estar intentando ocultar. Cuando Grace le susurra algo pone una sonrisa de medio lado que hace que el que me vaya a desmayar sea yo. 

- Mmmm....  Si queréis que os lleven algo de picar a vuestra habitación solo tenéis que pedirlo por el teléfono de vuestra habitación.

Eso va un poco por Jaxon, pero espero que les sirva a todos.

Pasamos por recepción para pedir que nos lleven algo a nuestra habitación, estamos hambrientos y cansados, y luego nos despedimos en el pasillo y cada uno se va a ducharse o a descansar un rato.

Yo me quito la camiseta y me siento en la cama. No consigo quitarme de la cabeza a Jaxon en forma de dragón, volando a mi lado. Llaman con fuerza a la puerta, y voy a abrir. No me molesto en ponerme mi camiseta, porque.... Joder, toda esta gente me ha bañado cuando era un bebé, y me conocen desde que nací. Creo que no les importará.

Al abrir la puerta esperaba encontrarme mi comida, esperaba encontrarme a Grace. Esperaba encontrarme antes a Cyrus que a Jaxon Vega. Pero ahí está. Se ha cambiado de ropa, y no tardo en acordarme de que yo no llevo camiseta. Un ligero rubor tiñe su pálida cara, y eso solo hace que yo me ponga aún más rojo.

- Hola.

- Hola.