𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨 𝐞𝐧𝐭𝐫𝐞𝐥𝐚𝐳𝐚𝐝𝐨 [ᴋᴏᴏᴋᴠ]

Veintitrés

"Suéltalo."

Taehyung se estremeció ante la intensidad de esas palabras, sus ojos mirando al alfa que agarra su brazo con tanta fuerza que sabía que dejaría marcas.

En lugar de hacerlo, sintió que Jimin lo acercaba más, apretando su mano sobre la suya.

"¿Que pasa si no quiero?" dijo el mayor, su voz también dura.

Taehyung sintió que su corazón saltaba un par de veces cuando Jungkook lo jaló hacia atrás, su espalda aterrizó con fuerza sobre el tonificado pecho y torso del alfa. No fue capaz de controlar un suave jadeo que salió de sus labios, sintiendo el calor del cuerpo de Jungkook contra el suyo, agitando algo dentro de él, ardiendo y deseando.

"No me importa lo que quieras. Eso no es una solicitud. Es una orden". Dijo Jungkook en tono de advertencia, mirando fijamente a Jimin, quien todavía sostenía la mano de Taehyung.

"No me hagas repetir lo mismo, Park Jimin." Añadió, con voz tan fría como la brisa de la mañana, y Taehyung sabía que las cosas serían sangrientas si esto continúa, así que hizo lo que pensó que era lo mejor.

Apartó su mano de Jimin, lo que este último no esperaba. Él sonrió disculpándose, no queriendo que una pelea comenzara de nuevo entre los dos solo por su culpa.

"Creo que me quedaré dentro de mi habitación, Jiminie". Taehyung forzó una sonrisa.

Vio como Jimin lo miraba con preocupación, antes de volver su mirada hacia el alfa.

Taehyung casi puede saborear la tensión en el aire, sintiéndose asfixiado mientras inconscientemente inclina su espalda aún más hacia el amplio pecho del alfa.

Después de lo que parece ser una eternidad, Jungkook arrastró con dureza a Taehyung de regreso al interior del castillo, dejando atrás a Jimin, todavía con una mirada preocupada por el rubio.

Las zancadas del alfa son largas y rápidas, Taehyung apenas puede seguir el ritmo. Su brazo izquierdo ya le duele por el fuerte agarre mientras se deja arrastrar de regreso al interior de su habitación.

La puerta se abre de golpe, haciendo que Taehyung se estremezca. Sintió que lo arrojaban sobre la cama, su trasero aterrizaba en el colchón con un poco de fuerza, haciéndolo gemir de dolor.

Levantó la cabeza temblorosamente, solo para ver los ojos ardientes del alfa, llenos de ira y algo más. Sea lo que sea, es una combinación mortal.

"¡¿Quién te dijo que salieras de esta habitación ?!" La voz de Jungkook se hizo escuchar y Taehyung se encuentra alejándose de él.

"Lo-lo siento." Susurró, con los ojos fijos en sus manos temblorosas sobre su regazo.

Se sentía como un niño al que le regañaran por hacer algo malo.

"Te lo dije antes y te lo digo otra vez", Jungkook tiró del hombro de Taehyung y le obligó a levantar la cabeza, agarrándolo por la barbilla hasta que sus ojos se encontraron.

El rubio vio los ojos negros carbón del alfa volverse rojos, haciéndolo temblar de miedo y diversión. Inhaló profundamente al notar lo cerca que estaban sus rostros.

Taehyung estaba hipnotizado por esos ojos ardientes. Puede sentir que arde por la intensidad en ellos, enviando una sensación de calor por todo su cuerpo.

"Tú eres mío".

El rubio contuvo la respiración, su corazón latía a un ritmo errático ante esas palabras, el aliento de Jungkook abanicando su rostro no ayuda.

"Soy dueño de ti humano y sólo harás las cosas bajo mi mando". afirmó el alfa, con voz firme y autoritaria mientras mira fijamente los ojos marrones del humano. Notó como esos ojos lo miran con anhelo, removiendo algo dentro de él.