En un castillo lejos de la sociedad humana, se encontraba un joven de cabello blanco con mechon rojo en su trono de color negro y rojo, junto a él estaban sus subditos, quienes confiaba con total ceguedad, pues ellos sabrian muy bien cuales serian las consecuencias de su traición.
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Rakan estaba meditanto sobre su siguiente jugada, pues estaba revisando los territorios conquistados por él y su gente, pero él se dio cuenta de un pequeño detalle, el no tenía una reina con quien reinar a su lado, solo satisfacia su gusto por la sangre, más no carnal, pues, a pesar de su anturaleza sangrienta, el queria que todo saliera perfecto.
—Esta demasiado aburrido este ambiente—comento de la nada.
—Lamento que no haya nada para satisfacerlo, mi rey—comento su consejera, Ahri—Aunque hay algo que lo anime mi rey.
—Si piensas que tendremos relaciones, ve olvidando esa idea—comento Rakan—Prefiero morir virgen.
—Oh no, mi rey, que asco—comento Ahri—Yo prefiero dar a conocer la siguiente noticia.
—¿Y eso es?—
—Nuestros territorios se mantienen limpios y estamos manteniendo el control—
—Eso es lo habitual—respondio Rakan—¿No hay nada nuevo?
En ese momento, la puerta se abre mostrando a una chica de cabellos negros con rayos amarillos junto a un chico de cabello corto magenta con puntas azules, eran Kayn y Akali, los guardias reales de sangre del rey Rakan.
Ambos jóvenes vampiros se arodillaron ante el rey Rakan pues ellos traian un mensaje para él.
—Mi rey, traemos un mensaje importante para usted—comento Kayn.
—Es del rey de los vampiros Kamisato Ayato—comento Akali—Parece que encontro algo...interesante.
Rakan sintio curiosidad ante esta noticia ¿Que información tendria Ayato que atraeria al rey Rakan? ¿Acaso seria un nuevo territorio por conquistar? ¿Un nuevo pueblo que masacrar? El queria los detalles y le molestaba que lo dejaran con la curiosidad.
—Quiero detalles—
Ambos jóvenes se miraron y luego Kayn le mostro la carta.
—El rey Ayato pidio que usted leyera la carta—comento Kayn.
—Y nos pidio que no la abrieramos...o sufririamos las consecuencias—
Rakan tomo la carta y la abrio, allí vio el siguiente mensaje especificamente para él.
—Saben, voy a leer esto en voz alta—comento Rakan—Ahri, llama a Sett, Yone, Irelia y Yasuo esto sera divertido.
En unos minutos, llego un hombre de aspecto musculoso con una capucha morada, su cabello rojo con sus orejas y pantalones blancos, era Sett, el caballero de primera fila de Rakan, aquel que guiaba a sus tropas a la victoria.
