Maldito seas, Hwang

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Tela suave, seda fresca, lana esponjosa. Vestir las prendas de Versace realmente era otro nivel. Las sesiones eran rápidas, y el staff algo severo, pero todos estaban llevando bastante bien la situación.

TaeHyung, sobre todo. Que manera de lucirse ese chico, por favor. Él, JiMin y SeokJin se desenvolvieron con tanta natural en esto que JungKook sentía más admiración por ellos que la sana envidia de siempre.

Ja, trágate eso, Hwang. ¡Mierda, no! Basta de pensar en él por todo.

Durante las primeras dos sesiones de fotografía en la sede de Versace, JungKook se sintió cada vez más cómodo con el equipo. Aunque debía admitir que tuvo que hacerse el tonto un par de veces para evitar regaños de parte del staff.

En una de las sesiones, mientras ajustaban la iluminación, JungKook tropezó ligeramente con un cable y, en lugar de sentirse avergonzado, hizo un comentario divertido, provocando suaves risas que aligeraron la atmósfera. Los miembros del staff, inicialmente serios, comenzaron a relajarse a su alrededor. Incluso los directores de la sesión no pudieron evitar reírse. Estas interacciones no solo hicieron que JungKook se sintiera más a gusto, sino que también crearon un ambiente de trabajo más relajado y colaborativo para sus compañeros. Cada vez que JungKook cometía un pequeño error, lo convertía en una broma, evitando regaños y provocando sonrisas y risas.

—¡Parece que necesito más café! —bromeó una vez después de confundirse con una indicación.

A medida que avanzaban las sesiones, JungKook se dio cuenta de que había formado vínculos genuinos con el equipo. No solo estaba destacando como modelo, sino que también estaba ganándose el cariño y la admiración de quienes trabajaban con él, convirtiendo cada sesión en una experiencia agradable y memorable para todos.

Ja, trágate eso, Hwang.

Y hablando de lo cuál...

JungKook, con una mezcla de curiosidad y una pizca de nerviosismo, se acercó a una de las chicas del staff que recogía los cables de los reflectores.

—Oye, ¿cómo es HyunJin como modelo? —preguntó en inglés, intentando sonar casual—. Me acordé de repente que él también trabaja con Versace.

La chica, emocionada por la mención, respondió con entusiasmo.

—¡HyunJin es increíble! Tiene una presencia magnética en la pasarela y frente a la cámara. De hecho, vendrá en un día con el resto de Stray Kids porque tienen que modelar algunas prendas en el desfile dentro de cuatro días al que fueron invitados.

JungKook intentó disimular su sorpresa, asintiendo con una sonrisa mientras procesaba la información. Saber que HyunJin estaría allí pronto, participando en el mismo evento, hizo que sus pensamientos se agolparan de nuevo en su cabeza, igual a un torbellino de ideas y emociones.

—Aunque eso no quita que ustedes brillen en la pasarela— apuesta ella, con una sonrisa, antes de darse la vuelta y llevarse consigo los cables que tenía en brazos, dejando a JungKook pensativo.

—¡Ey, Kook! Vamos, tenemos que irnos. J-Hope tiene sueño— advierte NamJoon a lo lejos, sacándo al maknae de su ensoñación.

—¡Ya voy!— responde, dirigiéndose hacia el grupo, que una vez que estuvo completo salió del set de fotografía.

El grupo salió del edificio, la fría brisa de Milán envolviéndolos mientras caminaban hacia la limusina que los esperaba. Las luces de la ciudad comenzaban a encenderse, creando un resplandor cálido en el atardecer. Subieron a la limusina y se acomodaron en los asientos, algunos charlando suavemente y otros mirando por las ventanas, absortos en sus propios pensamientos, como JungKook.

La foto | JungKook x HyunJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora