La Responsabilidad y sus Consecuencias

Parte 8

Mi vida durante los últimos días no ha sido más que una serie de cambios repentinos o "180 grados de humor", supongo, un momento inquietante y confuso, sin duda. 

Quizás estoy pensando demasiado en las cosas pero juro que todos los saltos emocionales han dejado daño físico, de hecho justo ahora me siento fatigado lo que a su vez me obligó a deslizarme en mi silla para encontrar una posición más cómoda. 

Sí, estos cambios de humor definitivamente me han agotado.

"Hachiman, por favor deja de encorvarte tanto en tu silla." 

Una voz interrumpe mi relajación justo cuando comenzó.

Dicho esto, un cambio repentino más de humor no sería del todo desagradable, tal vez de estricto y menospreciador a... 

No sé, ¿no tan estricto? 

Hasta ahora, lo único que realmente ha cambiado entre nosotros es la disposición de los asientos, uno al lado del otro en lugar de los extremos opuestos de la mesa. 

Soy un hombre golpeado y problemático, solo déjame descansar un momento, ¿vale?

...Ah, ¿a quién engaño? 

No creo que cambiaría sus tijeras y sus molestias por nada. 

No puedo evitar preguntarme si después de todo el tiempo que pasé con ella ella lentamente me condicionó a tener una parte masoquista... 

no es que alguna vez se lo hubiera hecho saber, por supuesto.

"¿hoooo? ¿Estás diciendo que no puedo descansar y relajarme en absoluto?" 

Estiro más mis extremidades en señal de desafío mientras me hundo más en mi silla. 

"¿Ni siquiera en presencia de mi novia?" 

Un movimiento sucio, sin duda, y probablemente no uno que hubiera podido realizar sin experiencias recientes, pero que seguramente detendrá a la reina de hielo en seco.

Un leve sonrojo colorea su rostro, pero no parece ni mucho menos asombrada mientras habla. 

"Para nada Hachiman, simplemente sentí que como tu amada novia es mi deber cuidar de tu bienestar, encorvarse en esa silla rígida como estás difícilmente puede ser bueno para tu espalda". 

Termina con una cálida sonrisa, aunque también puedo ver un atisbo de satisfacción engreída.

"B-bien...gracias." 

Maldita sea, no es justo, demasiado lindo.

"Agradéceme corrigiendo tu postura".

Seguramente hemos establecido algún tipo de récord al discutir como un viejo matrimonio dentro de los treinta minutos de la relación. 

Sacudo ligeramente la cabeza para eliminar los pensamientos sobre el envejecimiento y el matrimonio para evitar más nerviosismo, y en su lugar opto por pensar en asuntos más urgentes mientras me siento en mi silla. 

Ya sé que los otros dos no tomarán bien las noticias sobre Yukino y yo, si los eventos de hace aproximadamente una hora sirven de algo, pero no sé qué están haciendo a partir de ahora. 

¿Ya los han enviado a casa? 

¿Están planeando alguna forma de regreso? 

¿Cómo avanzamos todos a partir de aquí?

"Pareces sumido en tus pensamientos." 

Noto que Yukino me estaba mirando fijamente, con una mezcla de curiosidad y preocupación en sus rasgos.