Capítulo 3

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STILES

Ahora mismo Derek y yo nos encontrábamos en mi casa besándonos con pasión.

Acabábamos de llegar de una estupenda cita.

Nosotros llevábamos saliendo desde hace como dos meses y por fin había llegado el momento que había estado esperando durante tanto tiempo.

— ¿Estas seguro de esto, Sti?– preguntó Derek con un tono cariñoso.

— Quiero esto más que nada, Derek– él sonrió.

— Me alegra escuchar eso. Yo también lo quiero muchísimo.

Entonces volvimos a besarnos y comenzamos a desnudar al otro.

— Sabes– dijo él separándose un poco cuando yo solo estaba en bóxer– yo he estado esperando encontrar una persona especial y no lo he hecho con nadie en muchísimo tiempo.

— ¡¿En serio?!– él asintió– ¿Es como una especie de amenaza?– le sonreí y le mire con lujuria.

— Lo digo en serio. Creo que la última vez fue antes de volverme conocido. Esa fue mi última relación y acabo fatal. Me alegro mucho de que tu torpeza hiciera que me tiraras el café, porque eso nos llevó hasta este momento. Gracias a eso pude conocer a un chico genial y al que le gustó por lo que soy, cuando yo pensaba que nunca encontraría a esa persona especial, ya que todos con los que salía solo eran unos interesados buscando acercarse a mi para conseguir un poco de fama, va y apareces tú.

Yo me sonrojé un poco ante sus palabras, pero también me sentí un poco culpable.

— Y por cierto eso no era una amenaza. Era una advertencia– él se acercó más a mi– Voy a hacerte tener tantos orgasmos esta noche, cariño– me susurro al oído mordiendo suavemente el lóbulo de mi oreja a continuación.

Yo gemí y la culpa que sentía quedo olvidada al ver a Derek quitándose completamente la ropa que todavía llevaba puesta y acto seguido quitarme mi bóxer, quedando así los dos completamente desnudos.

A continuación volvimos a besarnos mientras ambos acariciábamos el cuerpo del otro.

Poco después nos separamos y el rostro de Derek muestra pura lujuria.

— Eres tan hermoso. Eres perfecto– yo me sonrojé un poco– Todo en ti es perfecto, pero sobre todo lo es tu culo.

En ese momento Derek me empotró contra la pared mientras vuelve a besarme apasionadamente y poco después se separa de mi y hace que me gire, quedando así yo mirando a la pared y esperando a que él continúe.

Cuando giro mi cabeza para ver el motivo por el cual él no hace nada, lo veo lamiéndose los labios y mirándome con lujuria.

— ¡Te ves delicioso, Stiles!– dijo con una voz ronca– ¡Y voy a devorarte!

Yo gemí y en ese momento apoyé mis manos en la pared mientras que Derek dejó algunos besos sobre mi espalda.

Poco después Derek detiene sus besos sobre mi espalda.

Entonces él se pone de rodillas, separa mis nalgas y le da una gran lamida a mi ano, haciéndome soltar un fuerte gemido.

Tras eso se separó un poco.

— ¿Te gusta eso?– dijo Derek con un tono burlón.

— S... Sí– dije gimiendo.

— ¿Quieres que continúe? ¿Quieres que te coma tú perfecto y delicioso culo?– dijo antes de besar mis nalgas.

— Sí..., por favor..., Der– le conteste asintiendo con un tono suplicante.

Después de escucharme decir eso Derek enterró su perfecto rostro en mi culo y da largas y húmedas lamidas desde mis testiculos hasta casi mi cintura, pasando lentamente su lengua por mi entrada.

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