MI ALUMNA FAVORITA

CAPÍTULO 08

 *NOTA DE AUTORA: HAGAN DE CUENTA QUE JINYOUNG ES UN AÑO MENOR QUE EUNWOO* AHORA SI DISFRUTEN DEL CAPITULO 

- ¿Por qué ese imbécil está aquí? - protestó molesta.                             

- Pensé que con el tiempo todo tu enojo hacia mi se iba a esfumar - Jinyoung frunció el entrecejo acercándose a Yugyeom.
                             
- A diferencia de ti, yo no olvido las cosas tan fácilmente - cruzó sus brazos mirándolo.
                             
- Sanha, ¿conoces a Jinyoung? ¿no? bueno, te lo presentaré - Yugyeom inmediatamente comenzó a hablar para disipar la tensión que había entre sus dos mejores amigos - él es Park Jinyoung, nos conocemos hace varios años.           

- Un gusto, mi nombre es Yoon Sanha - este se levantó para tenderle la mano en forma de saludo.                           

- Faltas tú, tienes que saludarme - el recién llegado tomó asiento frente a _____ mientras este estaba concentrada comiendo el poco helado que le quedaba.                           

- No quiero saludarte - negó sin mirarlo.                             

- ¿Por qué razón volviste? - Yugyeom preguntó viéndolo.                        

- Me salí de la carrera - _____ por primera vez se mostró interesada en lo que Jinyoung decía, este solo sonrió cuando se dio cuenta de la atención que ella le estaba prestando.

- Fue a mitad de año que me di cuenta que ya no podía seguir, mis notas eran pésimas - rió - creo que finanzas no era lo mío - se encogió de hombros restándole importancia - Así que vine por unos meses para ver a mi papá, quiero ver si acepta pagarme otra carrera.                

- Si yo hiciera algo así, seguramente mi mamá me desheredaría, y eso que ni siquiera tenemos herencia - miró de reojo a Jinyoung quién le iba a contestar, pero un celular sonando lo interrumpió.        

- Permiso - velozmente se levantó de su lugar para dirigirse a un rincón de la heladería, rodó los ojos al ver el nombre en la pantalla - Espero que sea algo bueno para que me llames justo ahora - dijo apenas llevó su teléfono al oído.                            

- ¿Dónde estás? las clases terminaron hace mucho y todavía no te veo en casa.                             

- Estoy en una heladería con mis amigos, no sé si lo sabes Eunwoo, pero tengo vida fuera de la escuela.
                          
- Es tarde _____, tienes que volver.                            
- Pero no quiero - replicó alargando las palabras.
                            
- No es que quieras o no, tienes que regresar - pudo sentir como la voz de Eunwoo se escuchaba más molesta.
                           
- La estamos pasando bien aquí, ¿por qué tiene que volver ahora? que yo recuerde ____ no vive con su padre - cerré los ojos maldiciendo en voz baja cuando vi a Jinyoung tomar mi celular para hablar con Eunwoo. Ahora si estaba muerta.
                         
- Devuélveme el teléfono - se acercó a él alzando una de sus manos mientras Jinyoung bufaba aburrido entregándole lo que había pedido.
                             
- ¿Quién era él? - iba a responder, pero Eunwoo seguía hablando - ¿acaso estás mintiéndome? ¿estás en una cita? _____, respóndeme ahora -nuevamente fue cortada por la voz de su amigo - No, espera... ven ahora mismo a casa, no quiero que estés ni un minuto más afuera- solté un suspiro cansado cuando sintió los pitidos del celular.                  
- Siempre tienes que arruinar todo, es natural en ti - caminó con pasos apresurados hasta la mesa al tiempo que tomaba su mochila y la ponía en su hombro - Tengo que irme, nos vemos mañana en la escuela - se despidió de sus dos amigos saliendo de la heladería sin siquiera dirigirle la palabra a Jinyoung.
                            
Empezó a caminar rápido, lo que menos quería en este momento era pelear con Eunwoo de nuevo, suficiente tenía con lo que había pasado entre los dos.
                                                                       
- ¿No crees que deberías ir acompañada de un hombre? el cielo ya se está tornando oscuro - blanqueó los ojos al notar que tenía compañía - pero no te preocupes por nada, te llevaré hasta tu casa - notó como estaba sonriendo.