Parte 3

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Esos días se pasaron muy rápido y me sacaron me llevaron a tener un tiempo de meditación mientras los señores leían el Corán yo solo pensé en que ese señor hablaba muy lento y quien me daría las hojas para hacer un esquema de la cabaña pero hay todos eran malvados...excepto la cocinera ella siempre nos miraba con cariño a ella le puedo pedir unas cuantas cosas , bueno el señor dejo de leer el Corán y me llevo a almorzar en el comedor mientras la cocinera servía yo la miraba como si necesitara algo pues creo que ella entendió porque al terminar ella me llamo, y hablamos yo le dije que si tenía papel y lápiz, busco en varios cajones y me dio papel y lápiz, me fui a mi cuarto y le conté el plan a Belén y a Charles, pero le dije que lo mantuvieran en secreto porque no podríamos salir todos al mismo tiempo, solo tres cada 15 días para hacerlo un poco mas inusual, todo iba de acuerdo al plan, empecé por la habitación que estaba al lado le pase una hoja y un lápiz para que hicieran un mapa de la habitación y así con el resto, todo iba muy normal tal como lo pensaba sabía que si lograba escapar al menos uno podríamos salir todos, aun esperaba que Lupita buscara ayuda así sea en el pueblo cercano, sabía que había un pueblo puesto que mientras caminábamos por la espesura del bosque vi una celebración a lo lejos, La libertad estaba tan cerca y tan lejos, Belén se empezó a sentir mal de la nada, creo que mientras Lupe estaba contagio a Belén, tenía mucho miedo de que algo le sucediera y pasaba el tiempo y Belén estaba muy enferma y cada día empeoraba más, charles y yo hacíamos cualquier cosa para que "los señores" no se dieran cuenta pero cada vez era más difícil esconderlo , todos los de los demás cuartos nos miraban con pesar como si supieran que Belén iba a morir, todos los niños veíamos a Belén enferma, pero esos señores no ellos tenían el corazón tan duro como para ver que un niño sufre, daba hasta miedo era tan obvio que estaba sufriendo y aun así seguían como si nada maltratándola, yo la veía tan pálida que cada día más ansiaba poder salir de ese lugar buscando la libertad y la felicidad, así que entre mis compañeros y yo decidimos que apresuráramos el plan de escape y que la primera que saliera fuera Belén, algunos escondíamos comida para darle a Belén porque la verdad nos daban muy poco, solo extrañaba tu sonrisa tus comidas todo lo relacionado a ti, saliendo a jugar al parque, sin tener que pelear entre nosotras o dispararle a animales indefenso que merecen vivir, cada día dormía menos pensando en ti en que te podría pasar en Belén ¿la matarían cuando se enteraran que estaba enferma? , eran seres despreciables con poca moral, no querían a la gente y la despreciaban si sentido alguno, si alguno se enterara que ella estaba enferma sabía que no la iba a volver a ver, ya me hacía falta su risa sus ganas de vivir se estaban agotando, algunas noches decía cosas sin sentido como si estuviese alucinando, cada uno de nosotros estábamos aprisionados pero más que físicamente, estábamos aprisionados por el miedo, el miedo de morir y de no poder escapar, ninguno de nosotros veía el final de esta gran pesadilla, una pesadilla de la cual no podíamos despertar, porque vivíamos en ella día y noche, el deseo de escapar era muy grande, pero ninguno se atrevía, tan solo queríamos vivir estar contentos con la gente que queríamos, con las cosas que no pudimos realizar mientras estábamos en libertad.

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OCHO DE OCTUBREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora