A través de la venta reforzada del lujoso avión jumbo privado, se dibujaron las infinitas nubes de apariencia esponjosa que viajaban contra el aire.
"¿Todo bien?"
John, que había estado con la mirada jifa de la luz blanca que se reflejaba sobre sus brillantes ojos, movió su cabeza. La persona que lo había llevado hasta allí le hablaba. El hombre, de unos treinta años, se presentó como Carter Simpson y dijo ser el secretario privado del Sr. Ryan Lindberg.
"... ... Sí, todo está bien".
Cuando John respondió tardíamente, Carter sacudió lentamente la muñeca para comprobar la hora en el elegante reloj Rolex.
"Llegaremos pronto a Inglaterra. El aterrizaje está programado dentro de media hora, descansa un poco".
"¿Eh?... ... Ya veo, gracias por decírmelo".
John respondió con sonriendo suavemente mientras Carter lo miraba en silencio.
'¿Realmente tiene solo once años?'
Lo supo en cuanto lo conoció por primera vez, John era un niño inusualmente serio y reservado. Posiblemente, estaba lleno de dudas, incluso la situación por sí misma era bastante extraña para el propio Carter. Aun así, John nunca preguntó nada por iniciativa propia y estaba la mayor parte del tiempo callado como si quisiera ocultar su existencia.
Carter intuyó que esa tranquilidad era muy extraña para un niño de esa edad. John era un niño de solo once años que perdió recientemente a su madre, su único familiar, hace poco menos de un mes. Y por si fuera poco, ahora estaba de camino para encontrarse con su padre, a quien nunca había visto antes.
A pesar de que Carter no era muy afecto a tratar con los niños, era tan agudo que se percató que el modo de comportarse de John era inusual. Entonces, aunque no era el tipo de persona que se interesa mucho en otras personas, Por alguna sensación extraña, se sintió conectado con John.
Carter se sentó en el asiento vacío frente a él, en ese momento, John reaccionó su presencia y giró su rostro. Los ojos verde oscuro miraron fijamente a Carter.
"¿Alguna vez has venido a Inglaterra?"
"¿Eh... ...? No. Solo en Los Ángeles".
"¿Has estado toda tu vida en los Estados Unidos?".
"Sí, mi mamá la pasaba mal con el trabajo, por lo que es la primera vez que viajo en un avión. Aún así... Supongo que este avión no es algo común, ¿cierto?".
John dudó un poco antes de hacer su primera pregunta, frotando el asiento de piel sintética con las yemas de unos pequeños dedos. En lugar de responder, Carter simplemente se encogió de hombros. El avión en el que viajaban actualmente era uno de la serie Gulfstream Jumbo G700, valorado en más de 7 millones de dólares, eso sin contar la remodelación especial que solicitó el Sr. Ryan Lindberg.
"Creo que las personas ordinarias nunca podrían volar en algo así en su vida", respondió Carter, con sinceridad, mientras sus manos entrelazadas colgaran sobre sus muslos.
"El distrito de Richmond* puede ser el mejor lugar para vivir".
*Richmond es un distrito residencial opulento que bordea el río Támesis en la ciudad de Londres.
"¿Ese es nuestro destino?"
"Sí, ese es nuestro destino"
"¿Cómo será?"
"De acuerdo, es un lugar tranquilo, hay parques llenos de flores y arbustos hermosos. Ah, también hay muchas mansiones con mucho valor histórico y está un distrito comercial exclusivo".
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Beso desde el inframundo
RomanceEsta obra es ficticia, cualquier parecido con la realidad o con historias paralelas es mera coincidencia. Todos los personajes con mayores de edad Los nombres de personas y lugares aquí mencionados son ficticios y no tienen relación con personas o...