Belleza perfecta - ONESHOT

Seis

Tn sonrió al reconocer la voz de su explosivo amigo, pero en el exterior, la sinceridad de su sonrisa se expresó como arrogancia.

— ¿Por qué debería?, ¿es tuyo?

La alfa dominante femenina no estaba interesada, pero no dejaría pasar la oportunidad de molestar al alfa masculino.

— Si, mantente diez metros lejos de él.

Decía, mientras tomaba una copa de otro mesero que caminaba cerca de ahí, para dársela a Tn.

Ella se sorprendió por la sinceridad del contrario, normalmente era muy difícil que el super modelo conocido como "el príncipe de hielo", Bakugo Katsuki, dijera algo así.

— ¿Ohh?, ¿qué hago?, ahora tengo más interés, ¿debería ir a probar mi suerte?

Sonrió coquetamente con la intención de irse, pero el rubio cenizo la jalo antes de poder dar siquiera un paso.

— Hazlo si quieres que te parta la cara.

— Uyyy, que miedo~

Fingió tener escalofríos, soltándose del fuerte agarre.

— En fin, ¿qué haces aquí?

— ¿No puedo estar aquí?

— Tsk, tsk, tan agresivo... solo pregunto porque ni siquiera viniste el día de la inauguración, creí que no estabas interesado en el concepto del hotel.

— El concepto fue inspirado en mí, ¿por qué no estaría interesado?

Tn solo pudo rodar los ojos por la arrogancia en el tono de la otra persona.

Era cierto.

— Sabías eso y aun así no viniste, eres cruel.

— Deberías agradecerme, la bruja dijo que mi padre está diseñando varias cosas para ustedes en compensación.

— Ah... pobre de mí tío, tuvo que tener un hijo como este, a pesar de ser buena persona...

— No es mi culpa, invitaste a un montón de gente que ni siquiera puede permitirse una noche aquí, ¿cómo pudiste hacerle eso a mí prestigio?

— Fueron más invitados de mi madre y la tía, si quieres quejarte, ve con ellas.

La platica de viejos amigos continuó hasta que el rol de canela termino con su trabajo.

— ¡Kacchan!, he terminado, podemos irnos ahora.

Se acercó corriendo como un cachorro feliz de ver a su dueño, conmoviendo a Tn.

— ¿Kacchan?

Repitió el lindo apodo que había escuchado, en voz baja.

— Si me llamas así te arranco la lengua.

Amenazo, de igual manera en un susurro.

— Oh... no... note que estabas ocupado, lamento interrumpir su conversación, por favor terminen sin ningún apuro.

Dijo cuando estuvo cerca de la pareja de alfas.

— No te preocupes rol de canela, esta reunión había terminado, tengan una excelente estadía. Me retiro primero.

Bakugo noto que la imbécil de Tn quería hacerle un favor yéndose, pero todavía no mencionaba el asunto que quería discutir con ella, por lo que, de mala gana, tuvo que tragarse su molestia y detenerla.

— Has un espacio para nosotros por la mañana, desayunemos juntos.

— Mmm, mañana es un poco complicado, no creo que-

— Ya sé que estas en una cita... o al menos algo así. No me importa, puede unirse a nosotros.

— No me malinterpretes, estoy tratando de ser considerado con mi cita, no contigo. ¿Qué hago si a él no le gusta la idea?

Mintió, en realidad había planeado negarse, pues sabía que a su amigo no le gustaban los extraños y podía llegar a ser algo hiriente con sus palabras (aún más) cuando estaba de mal humor.

— Voy a comportarme, desayuna con nosotros.

Insistió el rubio cenizo.

¿?

Tn no pudo evitar levantar ambas cejas, en señal de duda.

Algo importante debe haber pasado para que se esté comportando de esa manera.

'Me pregunto si el rol de canela está involucrado...'

— Te confirmo mañana a primera hora.

Fue lo último que dijo antes de irse.

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Al entrar a su suite personal, inmediatamente noto las luces encendidas.

Supuso que el omega estaba despierto y luego de oler la exquisita fragancia del ámbar almizclado rodeado de madera que inundaba la habitación, su corazón se alegró sin saberlo y acelero un poco el proceso de cambiarse los tacones.

Detuvo la urgencia en su paso cuando casi se cae con el pequeño escalón del recibidor, para burlarse de ella misma.

Sabía que estaba pensando con la cabeza de abajo y que sería muy sínico de su parte ser toda sonrisas y cariños cuando hace menos de 10 horas, rechazo al omega tan fríamente después de haberlo visto, sin darle la mínima atención que indicaba el respeto básico, pero no podía (ni quería) hacer nada al respecto, no cuando tenía el fabuloso aroma tan cerca de ella.

'Parezco una maldita virgen.'

Trato de calmar su deseo, antes de encontrarse cara a cara con el causante del mismo.

— Es un alivio-

Decía mientras reanudaba su paso, pero al ver la triste imagen enfrente de ella, se interrumpió a sí misma.

La pequeña carita de Shoto estaba ligeramente hinchada, al igual que sus hermosos ojos, los bordes de estos tenían un rastro de rojo, como para anunciar la próxima llegada del llanto. El indefenso omega, cubierto por un casi inexistente olor a madera, yacía en el piso, al lado de un jarrón roto y pétalos de rosas blancas por todo el piso. Si Tn no hubiera visto el hilo de sangre escarlata escurriendo del dedo ajeno, lo habría confundido con alguna obra de arte viviente.

Se dio una cachetada mental mientras tragaba un poco de saliva, al mismo tiempo que recuperaba el ritmo constante de su respiración.

— ¿Qué... paso aquí?

Fueron las primeras palabras lógicas que su mente fue capaz de formular, las cuales, también ayudaron a la otra persona a regresar al tiempo presente.

'Está aquí.'

Fue el pensamiento de Shoto que hizo brillar sus ojos como dos verdaderas estrellas.

Ambos, alfa y omega, se miraron mutuamente en silencio por un largo rato.