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Erika Black.


La mañana era fresca,  mientras corría por todo el territorio me permitió pensar muy bien las cosas una de ellas era que mi mate estaba comprometido, la segunda que era mucho menor que yo, y la tercera que tenía que verlo por el resto de la semana sería fatal  y estoy segura que mi pobre corazón no soportaría el rechazo de nuevo.


Al llegar a los campos de entrenamiento observé a los guerreros entrenar les faltaba mucho por no decir que no sabían nada de combate así que rápidamente intercedi.


- Buenos días, hagan una línea por favor -


Me veian con miedo, esto v a ser muy difícil.


Después de enseñarles lo básico a los guerreros me di una ducha y able con mi madre y hermano que estaban a nada de venir aquí su sobreprotección asfixia, pero los amo aún así.

Llego la hora estaba caminando a la casa de mis pesadillas,  pero regia, incansable y empoderada, para que vea el niñato de lo que se pierde,  a quien quería engañar  quería que me viera y me escogiera a mí, pero nunca hiba a Rogar amor de nadie.


Al llegar a la puerta el olor me volvía loca pero tenía que ser fuerte mi madre no crío á una cobarde,  al llegar al comedor donde todos y digo todos estaban me asombre me estarían esperando?.


- Buenas tardes  creo que llegue en mal momento, puedo venir más  tarde...-

No pude terminar de hablar por qué Sasha se levantó de su asiento.


- Para nada te estábamos esperando, toma asiento por favor solo faltabas tu-


Veo como la maldita garrapata está colgada del brazo de mi mate y me estoy conteniendo mucho por no saltar y arrancarle la cabeza, al ver a mi derecha puedo ver a la idiota de mi futura suegra con una sonrisa burlona, por lo que veo está tonta tiene ganas de que la deje sin pelo.


- Veo que creciste, ya no estás tan joven -  suelta ese comentario la víbora.



- Si bueno..  es parte del proceso de madurar, aunque algunos les va pésimo en eso, creo que tengo unas cremas extra que traje del reino si  quieres te las doy esas arrugas se te ven fatal. -    le suelto a la víbora burlándome internamente de su cara.


- Y cuando se va?-   me pregunta la garrapata.


- Creo que debes de reformular tu pregunta, sería cuando nos vamos?-   quieren jugar pues juguemos.


Nadie vuelve a hablar hasta que llega el menor de los hijos de Sasha, quien me pide que lo cargue y eso hago, los niños nunca tienen la culpa de los errores de los adultos, y tienen un alma pura,  el pequeño es tan bonito tan rubio y posee esos ojos idénticos a su padre, así debería ser nuestro hijo, el pequeño se quedó dormido en mis brazos tan tranquilo que no soy capaz de reaccionar cuando la víbora mayor  llega y me lo arrebata de mis brazos, siento un gran vacío en mi interior y puedo sentir a mi loba refugiarse sollozante en lo más profundo de mi mente,  me recompongo al oír como el pequeño llora por lo sucedido pero nadie se atreve a decir nada hasta que rompo el silencio.




- Tantos años y todavía no eres lo suficientemente madura para actuar de forma adulta y pedirme bien al pequeño, quien no tiene la culpa de nada, pero no te diré como criar a tus hijos creo que ya debes de saber que hacer -     intento no prestar atención al pequeño que me pide los brazos y llora con gran sentimiento, la tipa está ni siquiera puede llevarse al pequeño no se cómo la diosa luna le dió tantos hijos.



- Vallamos al despacho tenemos cosas de que hablar, hoy ví que empezó a entrenar a mis guerreros  y varios camiones llegaron a l manada pero desconozco lo que traen -    Nos levantamos par ir al despacho cuando la voz de mi mate se escucha.



- Estén ustedes solos?-   acaso son celos?



- Tu hermano se unirá a la plática ya no debe de tardar-   avanzamos al lugar muy separados no quiero problemas aquí.



Al llegar al despacho se sirve un trago y me observa,  estamos en un pequeño duelo de miradas hasta que hablá.



- Que sentiste al cargar a mi cachorro -    solté el aire que tenía retenido en mis pulmones y hablé.


- Tu mejor que nadie sabes lo que pensé, así que no vale la pena que lo diga en voz alta por qué eso nunca pasará -    una pequeña sonrisa aparece en nus labios hasta que hablá.


-  Desde que nació el mayor de mis hijos lo pensé, tu siendo la madre de mis cachorros viviendo una vida feliz y tranquila siendo feliz. -  no quiero llorar y no lo voy a hacer ...



- Bueno eso ya no podrá ser, tienes unos cachorros increíbles, una pareja y una manada por qué  ser responsable -   intenté que no se escuche el nudo que tenía en la garganta.




- Te arrepientes? - si me hubiera preguntado antes mi respuesta sería cada maldito día.



- No, tengo una nueva oportunidad y si tú hijo planea rechazarme pues veré qué hacer -




- Siempre tan fría, desde que eras una niña lo fuiste y no creó que cambies ahora -




- Que bueno que lo tienes en cuenta, así que aclarado el punto sigamos a lo que realmente vine.-


Pasamos las siguientes 6 horas hablando de las mejoras en la manada de la ayuda que recibirían del reino y del manejo de las nuevas provisiones, también me comprometí a entrenar a los guerreros, pues están muy verdes y eso no está bien, los guerreros deben ser quien junto al alfa proteja la manada y sin eso la manada está condenada al fracaso.




Mi estadía aquí no fue lo que esperaba, mi pequeño mate no me habla y eso tiene a mi loba muy triste, todos los días lo veo con la garrapata enzima no lo deja para nada cada día que pasa estoy más segura del rechazo creo que esto es karma.

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Hola, hola ...
Aqui la desaparecida 🤭
Bueno esto no es fácil, cuando dije que haría la segunda parte tenia la idea en mente y los primeros capítulos escritos pero esto está difícil chamo... 🥴🥴. Espero UE se lo hayan pasado exelente en compañía de sus seres queridos.
Intentaré ser más puntual con mis queridas lectores 🖤🖤
Y les tengo una sorpresa para el siguiente capítulo 🖤🖤🖤

Segunda oportunidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora