Obsesión || 𝐉𝐮𝐝𝐞 𝐁𝐞𝐥𝐥𝐢𝐧𝐠𝐡𝐚𝐦

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"Cafetería"

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Narrador Omnisciente !

–¿Y eso que significa? –preguntó atemorizada.

Emma se encontraba en el hospital hablando con el doctor que siempre la atendía, él estaba apunto de darle los resultados de los exámenes que le hicieron hace unos meses atrás.

–Significa que tienes que decidir si quieres parar con tu tratamiento y ver cómo va o si quieres seguir tomando medicamentos, recibiendo tratamientos, en el caso que escojas esto deberás hospitalizarte.

–Oh..

El doctor espero en silencio al rededor de unos cinco minutos para finalmente escuchar su decisión. –¿Y bien?

–Yo no quiero volver aquí. –murmuró Emma cabizbaja.

–¿Eres consiente que tu enfermedad puede empeorar si te vas de aquí?

–Si, ya lo sé.

–Si te quedas aquí podrás tener una de las mejores habitaciones del hospital, podrás vivir cómodamente aquí hasta que te encuentres bien, y lo mejor es que tu vida no correrá peligro. Eres joven Emma, tienes una larga vida por vivir.

–Disculpe, pero no pienso volver a este hospital.

–Emma...

–Pase la mayor parte de mi adolescencia en un estúpido hospital, no he vivido bien mi vida y estoy harta de eso... No pienso volver a pisar un hospital en mi vida.

–Entiendo perfectamente su postura, supongo que ya nos veremos. –finalizó antes de salir de la habitación.

Emma solo dio un largo suspiro antes de bajar de la camilla, ella estaba realmente asustada. No quería morir, le daba mucho miedo, pero tampoco quería seguir viviendo con estas condiciones, para Emma vivir como lo estaba haciendo no era una verdadera vida. Prefería morir antes de volver a este horrible hospital.

(• • •)

Ella no sabía cuánto tiempo le quedaba, lo único que sabía era que lo disfrutaría al máximo. No quiso contarle sobre esto a Jude ya que sabría que jamás la entendería. Las semanas luego de aquella visita al hospital, comenzó a despedirse a través de cartas, que aún no entregaría y dudaba que ella lo hiciera en algún momento, pero estaba segura que alguien las encontraría y las daría a sus seres queridos.

Emma había llenado una caja con cartas, dibujos, juguetes y algunas pertenencias suyas para su hermano menor. También hizo algunas para su madre y hermano mayor. ¿Y para Jude? Bueno, ella ya estaba comenzando a llenar una caja de algunas cartas y otras cosas que Emma tenía para el. Obviamente ella no olvidó al resto de sus amigos, tenía una o dos cartas para el resto.

(• • •)

–¡Emma!¡Si no te apuras nos iremos sin ti! –advirtió Víctor.

–¡Estoy poniéndome mis zapatos! –exclamó la joven mientras bajaba las escaleras con un solo zapato y con el otro en su mano.