𝒻rℯℯdo𝓂

รัก

Antes del caos

Narra Ryuck

Ryuck... Ryuck Chevalier, un adolescente que había sido rechazado por una chica, la cual él había estado enamorado desde kinder, y hasta que cumplió sus 15 años logró encontrar el valor de decirle que realmente la amaba. Sin embargo, ella simplemente veía una amistad en él, y esto lo destrozó bastante.

—Lo siento, Ryuck, pero a mí me gusta Tarak y a ti te veo como un gran amigo
mencionó la chica que se encontraba frente a Ryuck.

Estos se encontraban en un pequeño parque cerca de la playa, que acostumbraban ambos ir a pasar el rato.

—Pero, Ale...
la chica soltó el ramo que este le había dado.

Ryuck sintió una ola de enojo y decepción apoderarse de su cuerpo. Tantos años, y hasta que logró decirle sus sentimientos, ella lo rechazaba de esa manera.

—Nos vemos, Ryuck.
La chica dejó al adolescente en el parque con una gran peso de tristeza encima.

¿Le gustaba Tarak? ¿Es masoquista? Pues Tarak trataba mal a las chicas; incluso cuando llegó a tener una novia, esta le dio una orden de alejamiento ya que él la trataba muy mal.

Me senté en los columpios del parque con la cabeza baja, mirando la arena bajo mis zapatos.

Mi celular sonó, y noté que era un mensaje de Akita que decía: "¿Vienes? Jaziel está por pelearse con otra señora".

Había olvidado que iba a salir con sus amigos esa misma tarde.

Me paré de los columpios y me dirigí a la salida del parque, aprovechando que había un pequeño camino para llegar directo a la playa.

Caminé mirando mi celular hasta que sentí que alguien tropezó conmigo.

—Ay, lo siento.
Dijo una pequeña chica.

—Tranquila, el que se debería disculpar debería ser yo. No debí caminar con el celular en mano.
La ayudé a pararse; la chica parecía ser de baja estatura o tal vez yo era un poco alto.

Al pararse, la chica cambió su expresión a una de miedo al mirarme atentamente.

—Ryuck? Lo siento, no fue mi intención tropezarme contigo. Por favor, acepta mis disculpas, no volverá a pasar.
Ella pareció estar nerviosa y se fue rápidamente sin dar una sola palabra más.

¿De verdad Tarak les había dado mala apariencia?

Continué caminando hasta el muelle donde se encontraban mis amigos.

—¡RYUCK!
Gritó una chica acercándose a mí, rodeándome con sus brazos y dándome un fuerte abrazo.

—Lili...
Acepté su abrazo con una sonrisa.

—¿Cómo te fue?
Preguntó Tarak acercándose a mí.

—Pues... digamos que ella tiene un gusto por los amargados.
Akita y Jaziel empezaron a reír, y Tarak solo me dio un leve golpe en el hombro.
—Soy adorable.