Capitulo 29

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— ¿Que dices? — le pregunto "__"

— Solo respóndeme, ¡por favor! — le dijo Bill casi suplicando — ¡¿me amabas?! — le grito

"__" no pudo evitar ponerse a llorar

— ¡Claro que te amaba! — le grito

— ¡¿Porque te casaste entonces?! ¿Sabes donde estaba yo el día de tu boda?! — le grito

Se escuchó un trueno y el cielo se iluminó con la luz del rayo mientras el agua seguía cayendo sobre ellos.

— ¡Claro que lo sabía! ¡Por eso me casé! ¡Si no lo hacía te iban a encerrar por siempre ¡No podía dejar que eso sucediera — le grito entre lágrimas.

Bill se quedo estupefacto ante aquellas palabras.

— ¡Mi madre me amenazo! Si yo no me casaba con Amadeo, te encerraría de por vida ahí...era tu libertad o la mía — dijo con la voz quebrada — mi vida nunca me perteneció pero la tuya a ti si y no iba a dejar que te la arrebataran — le dijo

— ¿Y alguna vez dejaste de amarme? — le preguntó Bill

La pregunta la tomó por sorpresa, ella solo seguía llorando. Bill la tomó por los brazos de manera brusca

— ¡¿Dejaste de amarme?! Si al final te enamoraste de Amadeo ¡está bien! Pero si no es así ¡necesito saber! — le grito

— ¡¿Que cambiaría si te dijera que si?! ¡¿Eh?! ¡¿Que pasaría si te digo que he pensado en ti días y noches desde el día en que me obligaron a abandonarte?! ¡¿Si te dijera que he pintado tus ojos a diario y que escuchado tu música siempre?! — le grito de vuelta

— ¡Yo nunca deje de amarte! ¡No he sido capaz de dejar de pensar en ti ni un maldito segundo desde que te vi salir de esa maldita iglesia! ¡¿Sabes el infierno que he vivido sin saber si me amabas o no?! ¡Sin saber si me habías abandonado así nada más! — le dijo

— ¡La canción! ¡La canción de 'Sacred'! ¡¿La escribiste por mi?! — preguntó "__"

— ¡¿Y para quien más?! ¡¿No lo entiendes?! ¡Para mi ese corto tiempo juntos fue sagrado! - hizo una pausa — ¡Fue cuando supe que fuiste, ERES y serás siempre el amor de mi vida! —

Bill la tomó del rostro y le plantó un beso apasionado. Apenas sintió el tacto de sus labios. Todos aquellos recuerdos de un amor joven llegaron a su mente, el sentimiento de estar viva, de rebeldía, de amor verdadero.

"__" se apartó del rostro el cabello mojado y acarició el rostro de Bill.

— Jamás deje de amarte — le dijo y acto seguido lo beso nuevamente.

— Está vez no tengo chaqueta o sombrilla para cubrirte de la lluvia — dijo el entre lágrimas de felicidad y risas.

— Te tengo a ti — le dijo "__" sonriéndole.

Bill tomó su mano y ambos corrieron bajo la lluvia buscando un lugar para refugiarse. Vida, eso se sentía, vida. Un amor joven que renacía de las cenizas con una llama más fuerte que la anterior.

Terminaron entrando a hurtadillas al cuarto de hotel de Bill. Al cerrar la puerta se fundieron en un apasionado beso para después sonreírse el uno al otro, como si el tiempo nunca hubiera pasado entre ellos.

Bill saco un par de toallas de baño y con gentileza comenzó a secarle el cabello a "__" mientras ella reía. Ella tomó su mano con gentileza mientras su sonrisa se desvanecía de a poco.

— ¿Que sucede? — le preguntó Bill

— Amadeo...se ha comportado tan..lindo..los últimos dos meses...Bill, yo te amo pero...Dios...no se que hacer — dijo ella

La sonrisa de Bill también se desvaneció, la tomó del rostro con delicadeza y la miro a los ojos.

— "__"...deja de pensar en los demás, no pienses en Amadeo, ni siquiera en mi...piensa en ti ¿Que quieres? ¿Que sientes? Respetaré lo que tú decidas hacer... — le dijo con cierto dolor en sus ojos, acababa de recuperarla pero la decisión era de ella al final.

Mala sangre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora