Las complicaciones del amor

Experiencias Vividas

El restaurante a donde habíamos llegado era muy elegante tenía candelabros que de seguro valen miles de pesos. Cuando nos dirigieron a la mesa que estaba en el centro de todo el restaurante, toda la gente se me quedaba viendo; no se si era por mi o por el sexy hombre que tenía a mi lado. Llevaba puesto un blazer color azul cielo, un pantalón de vestir casual color café muy clarito y una camisa de vestir blanca; tenía que admitirlo se veía muy bien.
También note como unos hombres de una mesa cercana no me quitaban los ojos de encima, al principio me sentía bien pero después de un tiempo se volvió incómodo por suerte Dimitri se dio cuenta de eso y trató de distraerme.

- ¿Qué te gustaría pedir Rose?-

- Lo que sea muero de hambre, pide tu por mi- dije sonriendole

- Esta bien, pero no te quejes de lo que valla a pedir-

- No lo haré, pero dime como conseguiste reservaciones para este lugar es muy bonito-

- Tengo mis contactos ¿Quieres vino?-

- Si gracias-

Hubo un momento incómodo por el silencio, no sabía de que hablar con el por qué me costaba todavía trabajo de saber quién era. Lo viniese el fue el quien rompió ese momento.

- Me alegro de que te encuentres bien Rose ya sabes después del accidente, enserio ¿ No has podido recordar más cosas? - dijo un poco curioso

- Si, pero no mucho-

- ¿Como que?- dijo con emoción

- Como... que Sidney y Adrián tienen un hijo, cuando Lissa y yo nos fugamos de la Academia, oh sí y casi me olvidó de cuando mi mamá me dejó el ojo morado- En eso último me había tocado en donde me había pegado mi mamá

- Y de mi no te has acordado- dijo un poco triste

- No, lo siento pero porque no me pláticas del día en que nos conocimos-

- Tu eras una estudiante de la Academia y yo era...- no pudo terminar por que en ese momento llegó alguien.

- Miren a quien tenemos aquí, nada mas y nada menos que a mi querido primo y a la pequeña Dhampir- dijo Adrián con una sonrisa burlona.

- Hola Adrián- dijimos Dimitri y yo al mismo tiempo un poco sorprendidos de que estuviera por aquí -

-¿Que hacen aquí no se supone que deberían de estar cuidando a Lissa?

- Si, pero nos dio el día libre y traje a Rose a cenar aqui por que me gano en una pelea-

- Pensé que eras invencible pero ya veo que no, hablando de invencibles ¿No han visto a Sidney?- dijo preocupado

- No pero si la vemos le diremos que la estas buscando-

- ¡Adrian! Deja de molestar a Rose y Dimitri- dijo Sidney que se encontraba a unos metros

- Creo que ya la encontré- dijo voz baja sólo para que pudiéramos escucharlo Dimitri y yo- ¡Amor! Que bueno que estas aquí ¿En donde estabas?-

- Te dije que iba al baño, pero veo que no me hiciste caso- dijo enojada

- Lo siento pero me distraje con eso- señaló una barra que estaba detras de nosotros donde había varios hombres tomando- pero en mi camino hacia haya me encontré con ellos- nos señaló

- Hola- dijo Sidney cambiando de ánimo- hace tiempo que no los veo ¿Como te sientes Rose? ¿Has podido recordar algo con la pulsera que te di?-

- ¡Así que es por eso que me la diste!- dije acercándome para darle un abrazo y sorprendida por lo que me había dicho.

- Si y también por ¡AYYY!...- dijo dando un fuerte grito y amparándose rápidamente de mi.

- ¿Qué pasó?- dijimos Dimitri y yo. Adrián se había quedado sorprendido y callado.

- Viste eso- le dijo Sidney a Adrián

- Si pero que fue -

- ¿Qué vieron?- dijo con la cara que siempre pone cuando hay un peligro cerca

- Sidney vio y sintió el día del accidente sintió todo lo que le pasó a Rose en ese momento- dijo Adrián con cara sería

- Rose ese día no fue por un carro, si no que fueron brujas como yo pero más poderosas-

- ¿Como lo sabes? -

- Pues porque cuando te toque sentí la magia de alguien más en ti-

- Y sabes por qué o que clase de magia hay dentro de mi-

- No pero se quien si sabría-