Prisión

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Se despertó esa mañana convencido que sería uno de los mejores días de su vida, uno que siempre sería recordado, pues darían por concluida la serie, y antes que las cámaras se apagarán le volvería a pedir matrimonio a Derek, ya lo tenía visualizado, Derek llorando dándole el sí, el cargándolo de felicidad escuchando un felicidades de los participantes….si, ese día sería recordado, pero no por ese motivo 

-Les aseguro que no queríamos llegar a tanto ¡por favor no somos malos! ¡por favor podemos arreglar esto de otra manera! oficial por favor ¡solo queríamos llevar a cabo un sueño señor oficial! ¡¡no puedo creer que esto termine de esta manera!!- su desesperación era tanta que ni siquiera pensaba las palabras que salían de su boca 

Trevor se sentía destrozado ante la situación, nunca en toda su vida creyó que sus sueños lo llevarían a estar en una patrulla esposado, al ver qué no le harían caso se recargo en el asiento comenzando a llorar de impotencia por no poder hacer nada, sintió como Derek se acercaba más

-Derek- susurro pues no podía ni hablar con las lágrimas que caían de sus ojos 

-Trevor te prometo que todo está bien- trataba de verse tranquilo, más su voz reflejaba lo asustado que se encontraba 

-Cómo dices eso, no tenemos el dinero suficiente para librarnos de esto, Derek por favor - por primera vez sabía que no valia nada pensar en positivo, debía asumir su realidad 

Derek se acercó lo más que pudo para darle una especie de abrazo, aún con las esposas colocadas se las arregló para hacerlo, antes de separarse lo beso para mirarlo a los ojos

-Te prometo que todo saldrá bien… te lo prometo - no sabía si esas palabras eran para tranquilizarse o convencerse a él mismo 

-Estamos juntos en esto, y lo seguiremos estando - tenerlo ahí era lo único positivo de todo

-Si, te lo prometo Trevor - no quería pensar más, se comenzó a decir que eso era solo una pesadilla 

Se acercó más para colocar su mano entre la ropa de Trevor, no quería soltarlo, no quiso separarse de su lado hasta que los bajaron, el trato ahí lo sobrepasó, sentía miedo, después de todo el venía de un ambiente diferente, sentía miedo que por vez primera esas personas no se sentían intimidados por su mirada

-Caminen, tienen una sesión fotográfica, aparte de darnos unos cuantos autógrafos muy personales, rápido no tenemos su tiempo-

Los empujaron, ambos salieron con caras largas en aquellas fotografías, fueron colocados en celdas diferentes, cada uno tenía diferentes pensamientos

“¿A quien llamo? no tengo a quien llamar…si tengo”

-¡guardia! ¡Quiero mi llamada! ¡tengo derecho a una maldita llamada!- gritaba lo más que podía, no sabía donde se encontraba Trevor, ahorita era el momento de solucionar las cosas 

Su respiración era muy elevada, desde que ingresó a esa celda no dejaba de mirar a la pared

“ Mis padres no pueden enterarse que estoy aquí, mis pobres padres…todo terminó, mi vida termino, por mi sueño…por mi sueño lo perdí todo”

Le permitieron aquella llamada, volteo molesto a ese guardia

-Hazlo rápido que tienes poco tiempo, aquí tu no pones las reglas niño -

Rápido marco, se decía que estuviera disponible, que respondiera el teléfono, tardó, pero se alegraba de escuchar su voz

-¡Hermano! mira no tengo tiempo, tuve unos problemas con la producción del programa, necesito que te mantengas al tanto por favor - se aferraba a ese teléfono, sentía como comenzaba a temblar 

Tu, Yo... Nosotros Donde viven las historias. Descúbrelo ahora