¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Madison;
me dejo caer en la cama y comienzo a llorar desconsolada
-yo solo quiero estar contigo- escucho a Tom por detrás de la puerta
soltando todo mi dolor hasta quedarme dormida aun con la ropa de la cena y aun con el maquillaje en el rostro
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tom;
el corazón se me parte al escucharla llorar, no soporto ver sufrir a mi pequeña por lo que después de pensar como hacer para entrar a su recamara me dirijo al lobby y voy a la recepción
-¿en que puedo ayudarlo, caballero?-me pregunta el hombre de la recepción
-necesito que me de otra llave de una de las recamaras que solicite- digo
-¿seria la suya?- pregunta mientras teclea en su computadora
-no, seria la de la recamara de la señorita Madison Alexander Luna- digo el hombre me mira
-olvido su llave dentro de la recamara y la pobre se quedo dormida en el sillón de mi recamara- miento- y creo que estaría mas cómoda en su recamara
no se como lo logre pero al par de minutos me da la llave y llegue lo mas rápido que pude a la puerta de la recamara y abrí la puerta para después entrar y ver a mi pequeña dormida en la cama con todo su maquillaje ya corrido debido a que lloro
voy hacia el baño y veo que hay desmaquillante y también las toallas para hacerlo
me acerco a su rostro y con todo el cuidado del mundo y comienzo a desmaquillarla, observando cada uno de sus hermosos rasgos
después de unos minutos termino de desmaquillarla y cuando lo hago beso su frente y acomodo su cabello lo mejor que puedo
me encargo de quitar sus tacones y también con mucho cuidado quito su vestido para después ir al vestidor y tomar una pijama y colocársela; la arropo y me voy a mi recamara para colocarme una pijama yo también y vuelvo a la recamara de mi pequeña para después yo también recostarme, beso su hombro cubierto por la blusa de su pijama y cierro mis ojos arrullándome con el olor de su cabello me dejo vencer por el sueño