- cariño- escucho por lo bajo- Madison... -mmm...- abro mis ojos lentamente - llegamos - avisa mi papá
bajo adormilada del avión y nos encaminamos a la camioneta negra que ya nos esperaba
-señor Luna es una alegría que este aquí en Nueva York- habla el hombre vestido con traje negro, quien se apresuro a subir nuestras maletas al coche negro -el placer es mío, todo por el trabajo- responde mi papá con una sonrisa acomodando su saco
Subimos al coche siendo la primer en entrar mi madrastra, Marina quien no me quiere por nada de mundo y debo decir que es recíproco
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Durante el camino mi "querida" madrastra no paraba de decirle a mi papá que esperaba que la casa en la que viviríamos fuera grande y sobretodo costosa
Luego de un par de minutos de escuchar las superficialidad de mi madrastra el coche paro frente a un gran edificio, un gran bufete de abogados el cual tenía el gran nombre de " Milton & Abogados"
- el coche las llevara a la casa yo me quedare aquí para presentarme ante el señor Downey quien es dueño y creador del bufete- nos explica para luego acercarse a nosotras - nos vemos amor- mi papá besa a Marina cortamente para luego besar mi mejilla- adiós cariño- yo también beso su mejilla
Cierra la puerta de la camioneta y se despide con su mano de nosotras, y lo vemos entrar al edificio
Llegamos a la casa que mi papá había comprado para nosotros tres, la cual era muy bella Al llegar ya nos esperaban las personas que se encargarían de ayudarnos con las labores de la casa - bienvenidas señora y señorita- nos habla una mujer alta- soy Olivia y soy la jefa al mando del servicio para ustedes
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-hola soy Madison - me presento con una sonrisa y ella me la corresponde
- una mujer a cargo- se burla mi madrastra- quiero alguien mas me muestre la casa-pide
Olivia amablemente pide a uno de los hombres de servicio que le mostrara la casa a parte
-¿usted quiere conocer la casa o prefiere conocer directamente su recamara?- me pregunta
-prefiero conocer mi recamara - contesto- y háblame de tu, no de usted me hace sentir mas grande- digo y Olivia sonríe y juntas subimos el segundo piso
llegamos frente a una puerta de madera color café, Olivia abre la puerta dejándome ver mi recamara la cual era bastante amplia
-tu padre dijo que te gustaba observar los paisajes desde tu recamara así que hicimos que tu recamara fuera la que tuviera las ventanas mas amplias- me explica mientras me muestra cada rincón de la recamara
-es bellísima, muchas gracias- agradezco
-no es nada- sonríe- ahora, ¿quieres que mande llamar a alguien que te ayude o quieres hacerlo sola?
-lo hare sola, de cualquier manera gracias- digo y Olivia se despide de mi para luego salir de la recamara
comienzo a desempacar mi maletas que previamente ya las habia subido el chofer a mi recamara, comienzo con mi ropa acomodándola el gran closet que por lo que veo necesito mas ropa para poder llenarlo, con mi ropa ni siquiera llega a la mitad
deje la ropa por el momento despues de estar acomodándola al igual que los zapatos; y comienzo con mis accesorios y fotografías, observo cada una de ellas extrañando mas mi querido México y eso que solo lo habia dejado hace unas pocas horas, pero todo sea por el trabajo de papá ya que es un gran abogado y es por eso que le ofrecieron trabajo aquí en nueva York
luego de unas horas de estar poniendo en orden mi recamara me doy cuenta que el sol se habia ocultado dejándome a la vista gracias a la enormes ventanas, la cuidad como empezaba a iluminarse gracias a las luces de los edificios
escucho como la puerta se abre dejándome ver a mi papá con un bote de helado- he llegado cariño- me muestra el bote y dos cucharas
nos sentamos en el piso y comenzamos a devorar el helado- ¿y como te fue en el trabajo?- digo terminado de saborear la cuchara de helado
-bien, ya firme mi contrato y ahora soy parte oficial de ese bufete- me dice emocionado
-me alegro por ti, papá - digo sincera
-gracias, hija- besa mi mejilla
la puerta se abre dejándonos ver a Marina- no deberías traerle helado y dejarla comer tanta comida rápida es por eso que esta subida de peso- habla y mis ojos se cristalizan
-déjala marina- habla mi papá mientras me abraza
-¿que?- se defiende- solo digo la verdad, véela esta pasada de peso y la verdad no entiendo como es que quieres ser bailarina y actriz con ese cuerpo y esa estatura, que créeme que no llegaras a ningún lado
salgo de mi recamara y me dirijo hacia la cocina donde esta Olivia y al verme corre a abrazarme y acariciar mi cabello
-tranquila, cariño....- arrulla Olivia
aquí esta el primer capitulo de esta nueva historia, espero que les haya gustado
aquí el papá es Diego Luna ya que estaba viendo Narcos: México y mi imaginación surgió jajaj
