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Después de un tiempo de correr y correr bajo los rayos del sol, ambos jóvenes se cansaron y se pararon bajo un árbol. Cassius paso su mano entre sus cabellos y resoplo, después de estar tantos años encerrado en aquel palacio había perdido la costumbre. Pero no podemos decir lo mismo de Rose.
Por su parte, Rose estaba que no aguantaba; "Si hubiera sabido que saldría del reino junto a Cassius, no me hubiera puesto estos lindos tacones", pensó ella con un puchero dejándose caer al suelo demasiado cansada. El más alto la observo y se rio.
— Debe ser mucho para ti, princesa -diría el moreno en forma de burla, Rose alzo sus cejas y abrió su boca mostrando su indignación.
— ¡Oye! ¿Crees que es fácil correr con estos tacones? -señalo sus pies mostrándole sus tacones.
El solo rio más, ella se cruzó de brazos con un puchero en sus rosados labios mientras desviaba su mirada, una bonita e infantil imagen de ella hizo sonreír al moreno que la veía con atención. Debía admitir que ella era muy tierna.
En ese momento, Cassius dejo de sonreír al recordar lo que hace varios minutos atrás ocurrió, el acababa de librarse del enorme tormento que había vivido durante años encerrado en el palacio desde que era simplemente un niño.
El recuerdo de lo que le paso en ese entonces era vago y borroso...
Recordaba a una mujer de hermoso cabello negro y largo, unos ojos amarillos tan característicos lo miraban con temor mientras lloraba. Ella lo cargaba en sus brazos mientras todo a su alrededor era un completo caos, hombres de puntiagudas orejas peleando con espadas en mano, sangre por doquier, y gente llorándole a los tantos cuerpos que habían regados por el suelo. Aun siente la horrible sensación de miedo que sentía mientras la mujer corría queriendo escapar de todo aquello....
— ¿Cassius estas bien? -la voz dulce de Rose lo saco de sus pensamientos mientras veía su pequeña mano enfrente de su rostro moviéndose de un lado a otro intentando captar su atención- ¿en qué tanto piensas eh?
El parpadeo tres veces y desvió su mirada un momento, ¿cómo se le ocurría estar pensando en eso? —En nada... -suspiro- ¿está segura de que quiere seguir caminando hasta llegar a un lugar que no conoce? ¿no es eso peligroso?
Cambio el tema de repente para que ella no insistiera ni sospechara nada, lo cual el logro ya que Rose se paralizo un segundo. Él tenía razón después de todo, Rose realmente no sabía nada de los demás reinos, solo sabia sobre la guerra, pero no como eran actualmente.
Pero una cosa era segura para ella, tenía mucha fe en que no sería peligroso, debía seguir adelante y cumplir lo que le dijo a su madre cuando era niña. Y junto a él, tenía la oportunidad de unirlos de nuevo ya que, Cassius siendo un dragón y ella una humana serian la prueba de la alianza de paz. Esta era su oportunidad y estaba determinada.
— Eso no importa porque te tengo a ti Cassius -le sonrió cálidamente dejando al mencionado sorprendido y ligeramente ruborizado- Se que contigo estaré a salvo, siempre y cuando quieras seguir avanzando en esta locura conmigo -ella rio.
Cassius estaba perplejo, era la primera vez que alguien le decía eso y se sentía bien. Trago saliva cuando reacciono y asintió.
— Por supuesto que te seguiré, después de todo, tú me liberaste. Te lo debo, princesa -le devolvió la sonrisa y le extendió la mano a ella, quien aún seguía en el suelo- si queremos llegar lo más rápido posible debemos seguir caminando.
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THE ANDALLACIA KINGDOM
FantasyEsta historia podrá ser confusa tal vez, pero es algo propio que amare escribir. Reinos, magia, criaturas, guerra y amor es lo que Rose, la princesa del reino humano de Andallacia, nuestra protagonista y su nuevo amigo, Cassius el dragón dorado, des...