𝐈𝐓'𝐒 𝐄𝐍𝐎𝐔𝐆𝐇 𝐓𝐎 𝐌𝐀𝐊𝐄 𝐀 𝐁𝐎𝐘 𝐁𝐋𝐔𝐒𝐇 ━━━ 𝗞𝗢𝗢𝗞𝗠𝗜𝗡

Capitulo Diez

Jungkook iba de regreso a su trabajo, había salido de contratiempo, ya que su hermana le llamó diciéndole que ella y su madre lo estaban esperando en el aeropuerto, y Jungkook tuvo que salir casi corriendo, pues a su madre no le gustaba mucho esperar, menos en un lugar tan poblado como lo era el aeropuerto.

Había llevado a ambas alfas a su casa y después de decirles que volvería más tarde salió de su casa y se dirigió al edificio de su padre.

Pero en le camino algo llamó su atención, mejor dicho, alguien.

Observó una figurita reconocida caminando por la acera, desde luego que la conocía.

Era Jimin.

Iba caminando con una mochila azul cielo colgando en sus hombros y contorneaba sus caderas a cada paso que daba.

Jungkook definitivamente no babeo al notar ese movimiento.

Se detuvo al lado del omega y este miró el auto con cierta extrañeza hasta que el alfa bajo la ventana oscura, dejando ver su rostro con unos hoyuelos a cada lado de su sonrisa.

— Hola, Jimin.— saludó el alfa tratando de no lucir muy ansioso de ver al omega de nuevo.

Es nuestra oportunidad, no lo arruines, humano tonto, exclamó su alfa, igualmente ansioso.

— Hola, señor Jeon.— sonrió el omega sacudiendo levemente su manita.

Jungkook había extrañado su voz.

— ¿Para dónde va?— preguntó llevando sus lentes de sol a su cabeza, deteniendo sus rizos con ellos.

— A mi casa, acabo de salir del instituto.

— Te llevo, súbete.— ofreció.

— No quiero ser una molestia, señor Jeon.— dijo el omega frunciendo sus labios.

— Claro que no es una molestia, Jimin, sube.— sonrió para que el omega se sintiera más en confianza.

Jimin sonrió dejando ver sus dientecitos y subió al auto un poco tímido y sonrojado.

Jungkook siguió conduciendo tratando de pensar en un buen tema de conversación, al parecer el omega estaba algo tímido y Jungkook querías que se sintiera cómodo con él.

— ¿Y qué tal va la escuela? ¿Dijiste que vas en secundaria no?— preguntó dándole una corta mirada.

— Mm, si voy en último año, y llevo muy buenas calificaciones.— explicó con una sonrisa de orgullo que a Jungkook le encantó.

— ¿En serio? Casi no recuerdo la secundaria, pero si recuerdo mis promedios de siete y ochos, odiaba Historia y Ciencias, aunque Geometría se me daba bien.— rió y vió como el omega ocultaba una risita con su mano.

— Llevo buenas calificaciones, aunque Matemáticas y Geometría son un poco confusas.

— Yo era el rey de las matemáticas, eso te lo aseguro, puedo ayudarte cuando gustes.— notó como el omega se sonrojo con su mirada.

— Gracias, señor Jeon.

— Por favor, dime Jungkook.— le guiñó un ojo.—Me haces sentir un poco viejo.

Ahora le estaba coqueteando, esperaba no incomodarlo.

— Lo siento.— dijo.— ¿Qué edad tiene?

— No te disculpes, pequeño, tengo veintiséis años.— respondió esperando que el omega no lo vea muy mayor. Se llevaban 8 años.

Jungkook en serio se sentía como un pedofilo.

— Wow...— se limitó a decir. Jungkook no sabía si era bueno o malo.

— ¿Qué, tan acabado me veo?— pretendió sonar ofendido con un toque de gracia.

— No, se ve muy bien.— dijo el omega y bajo la mirada sonrojado. Y al parecer Jungkook también se sonrojo.

Había mucho tráfico.

— Pues, gracias, hace mucho que no escuchaba un halago, lo necesitaba.

— ¿So-Hee no se lo dice siempre?— preguntó algo curioso el omega.

— Hm...— fingió recordar, claro que se lo decían a menudo, pero fue diferente cuando la criaturita a su lado se lo dijo.— Supongo que no.

— ¿Cómo se conocieron?

— Bueno, mi padre la contrato y la asignó como mi secretaria cuando me subió de puesto.— le explicó al omega, que parecía interesado en la historia.

— ¿Y cuándo comenzaron a salir?

No estaba seguro de querer responder esa pregunta, tenía esperanzas de que el omega estuviera interesado en él, y no quería hablar de la "relación" con su hermana.

— Hm, hace unas semanas, fue la primera vez que estuve en tu casa.

— ¿Cree que ella es bonita?

¿So-Hee era bonita? Claro que tenía su belleza como cualquier otra mujer, pero no es algo en lo que Jungkook se haya fijado demasiado.

— Hm, tiene lo suyo.— respondió simplemente.

— ¿Cree que yo soy bonito?

A Jungkook le sorprendió esa pregunta y parecía que Jimin estaba arrepentido de hacerla.

¿Qué si Jimin era bonito? Por supuesto, era lo más bonito que habían visto sus ojos, pero, ¿cómo decircelo sin asustarlo?

¡Dile que es muy hermoso! Invitemoslo a salir, y terminemos con la loca, gruñó su alfa animado.

— Creo, que... Eres muy bonito.— dijo evitando decir lo que su alfa.

— ¿En serio cree eso?— preguntó ilusionado y con las mejillas pintadas de carmín.

— Claro, cualquiera lo creería

— Hm, los alfas y omegas del instituto no piensan eso.

— Pues son unos idiotas si no lo ven.— lo miró, el omega también lo miraba y se perdieron en la mirada del otro.

Hasta que el sonido del claxon del auto de atrás, los sacó de su ensoñación.

El camino hasta la casa de Jimin, continuó con el omega hablando sobre cosas que le gustaban hacer, y no pudo evitar ponerse celoso cuando el omega mencionó a un tal Eunwoo.

A Jungkook le gustaba mucho escucharlo, y a Jimin parecía gustarle hablar.

Y al parecer el omega ya tenia un poco más de confianza en él.

Pero ese momento terminó cuando paró frente la casa del omega.

— Gracias por traerme, señor Jeon.— se despidió mientras bajaba del auto.

— No es nada, precioso.— dijo sin darse cuenta del apodo.— Nos vemos luego.— guiñó un ojo y el omega solo asintió sonrojado para después correr hacia su casa.

Cuando el alfa se aseguró de que el omega había entrado siguió su camino hacia la empresa con una sonrisa en el rostro.

Había disfrutado ese tiempo con Jimin, al omega le gustaba hablar y se veía muy feliz cuando hablaba de lo que le gustaba.

¿Por qué en la cenas nunca hablaba?

Pensó, pero otro pensamiento atacó su mente.

Y esque en el auto no habían rastros del aroma del omega, ni siquiera cuando estaba a su lado pudo percibir algún aroma.

¿Será que es beta?

Pero parece omega.

No importa eso, es mío. respondió su alfa.

IT'S ENOUGH TO MAKE A BOY BLUSH