"Punto Ciego" - Martin Ku |CANCELADA|

|SEMANA 1|

**Lunes**

La mañana empezó temprano para ella, fue la primera en despertar.

Después de lavarse la cara, vestirse con algo comodo y recorrer la casa en búsqueda de algún punto ciego  - porque, qué divertido un lugar donde el afuera no se entere lo que está haciendo - la chica se quedó pensando en voz alta, riendo sola y sabiendo que si alguien miraba la transmisión, seguramente pensarían que está mal de la cabeza.

Con la panza vacía y un antojo de café, la chica se chocó con la heladera abierta. "Buen día", saludó en un tono neutral, y ahí asomó Martín. "Buen día", respondió él, todo recién levantado, despeinado y con voz ronca.

Después de prepararse un café y unas tostadas, se sentó sola en la mesa. Martín ya estaba afuera, tomando mates solo, probablemente es de esos a los que mejor no molestar a la mañana.
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**Miércoles**

Los dos últimos días fueron una mezcla entre charlas y presentaciones. Sabrina fue la que más pegó onda con la chica, así que se empezaron a juntar más.

En medio de una discusión por quién iba a lavar los platos, se encendió la pantalla y apareció Santi. ¡Comenzaba el show! Llegó la hora de las nominaciones y el drama estaba servido.

La chica fue llamada al confesionario. Sentada ahí, la realidad le dio un correctivo. Se le había olvidado que esto era un juego y todos querían lo mismo: ganar. Entonces, necesitaba alguna estrategia para llegar hasta el final.

"¡Hola, Olivia!" saludó Big. "Hola, Big, ¿cómo va todo?" "Muy bien, gracias. Hoy es noche de nominación, decime a quiénes y por qué." Y así, la chica reveló sus votos, tratando de mantener un equilibrio entre jugar y no hacer drama. Después de eso, se retiró con el deber cumplido y una nueva perspectiva sobre el juego.

Más tarde, en la reunión del living, se anunciaron los nominados. Martín quedó en placa y un sentimiento de culpa se apoderó de la chica.

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**Viernes**

"¿Cómo me queda esto?", preguntó la chica mostrando la ropa que le dieron. La aprobación fue unánime, así que terminó de maquillarse rápido y se preparó para la fiesta.

La noche de copas, música y diversión terminó. Olivia e sacó los zapatos y se fue a relajar a los sillones del patio. Encontró uno en un rincón que, si se sentaba bien atrás, pasaba desapercibido para las cámaras. Su punto ciego.

Después de estar un rato sola mirando al cielo, Martín se sentó a su lado. "¿Queres un mate?" "¡Claro!" El mate estaba dulcísimo, pero no quiso hacer un drama y se lo devolvió. "¿Te das cuenta de todo, eh?" "¿De qué hablas?" "te lo endulcé a propósito para verte reaccionar". Se rieron. "¡Es que no quería que te enojes jaja!" Siguieron hablando, se estaba llevando re bién, pensaba ella, sus personalidades congeniaban.

De mate en mate, se acabó el agua. "Voy a calentar más, ¿sí?" "¡Dale!" Ella le sonrió y él se fue. "Soy una tarada, ¿qué hice?" pensó con culpa. Martín era re copado y por resentida, lo mandó directo a la placa. BOLUDA