El comediante más popular

Capítulo 121: Recibir a un 'bebé'

Cuando Rong Yuheng descendió de la montaña, estaba casi demasiado cansado para permanecer despierto.

Aturdido, se preguntó por qué esta melodía le sonaba tan familiar mientras levantaba ligeramente la cabeza.

Mientras la conciencia se desvanecía en el último momento antes de dormir, Rong Yuheng sintió una mano grande acariciando suavemente su rostro, frotándolo dos veces, y luego un tierno beso aterrizó en su frente.

...

Al día siguiente se despertó y el sol ya brillaba intensamente.

Rong Yuheng se movió un poco e instantáneamente respiró frío, sus ojos mostraban sorpresa:... ¡Hiss! ¿Podría ser que Wen Zecheng lo hubiera convertido en un inválido de primer grado?

"¿Estás despierto?" La puerta de repente se abrió un poco, revelando el rostro emocionado pero culpable de Wen Zecheng.

Rong Yuheng, al verlo, inmediatamente se sintió irritado. "¡Hmph!"

Ayer habían acordado que podía saltar del coche en cualquier momento, ¡pero ahora las puertas del coche estaban soldadas! Wen Zecheng incluso se atrevió a sacar a relucir las cuentas antiguas a mitad de camino: ¡era realmente un dueño interesante!

Wen Zecheng se apretó, abrazó la bola de hámster de la manta y susurró: "¿Qué quieres comer? Lo haré por ti. ¿Hay alguna molestia? Te daré medicina..."

Rong Yuheng, al escuchar "medicina", se apartó del abrazo de Wen Zecheng, todo su cuerpo irradiaba resistencia. "No no no..."

Wen Zecheng lo arrastró hacia atrás y continuó abrazándolo, luciendo satisfecho. "No seas tímido. Te cuidaré bien".

¡Maldita sea, cuida su trasero! Rong Yuheng evitó la "persecución del amor" de Wen Zecheng con una mirada enojada de condena por su desagradable comportamiento.

Wen Zecheng, sin embargo, no prestó atención, volviéndose incluso más cariñoso y gradualmente usando un tono seductor. "¿Qué tal si te hacemos pasta? Ayer los pequeños se saciaron, hoy te toca a ti".

Rong Yuheng instantáneamente olvidó sus quejas y su boca se movió más rápido que su cerebro. "No está mal, un cuervo que devuelve la bondad, un cordero arrodillado para mamar, no sufrí en vano".

Wen Zecheng: "..."

Pues si su Zai-zai quería aprovecharse, que lo dejara. Después de todo, las ventajas obtenidas verbalmente acabarían siendo reclamadas.

***

Cerca de las once de la mañana, Rong Yuheng finalmente, lentamente, salió gateando del dormitorio, sosteniendo sus nalgas. Toda la sala estaba vacía, y solo Wen Zecheng estaba ocupado en la cocina.

"¿Dónde está el tío?"

"Salió a comprar alimentos y volverá en un rato".

"Oh." A mitad de su 'Oh', Rong Yuheng de repente recordó algo y toda la bola de hámster se erizó. "Espera, ¿tu casa está insonorizada?"

Ayer hizo un gran alboroto y ¡no sabía cuán insonorizado estaba el lugar!

La mano de Wen Zecheng, asando salchichas, se detuvo sutilmente. La risa de ganso del pasado, similar a una sirena de ataque aéreo, brilló en su mente, penetrando nubes y partiendo piedras...

¡Maldición! De repente se horrorizó. ¡No podía dejar que su pequeño hámster en casa lo supiera en absoluto!

Aunque Wen Zecheng estaba entrando en pánico por dentro, mantuvo la calma en la superficie. "Muy insonorizado."