Sección en la que se subirán algunas historias que ocurrieron en la línea de tiempo del FanFic, pero que sucedieron en segundo plano. Esta sección es para agregar información extra al FanFic, pero sin mostrar tanta información crucial para la histor...
Buenas, en esta ocasión les traigo el segundo tomo de estas historias cortas. Recuerden que estas son completamente canónicas y sirven para agregar cierta información a la historia principal. Después vendrán tres historias más para completar este segundo tomo, y sus nombres serán:
2 - Cría cuervos, y te sacarán los ojos.
3 - Confesiones de una chica temerosa.
4 - Problemas de felinos.
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La Academia Kuoh transcurría un día común. Los estudiantes participaban en sus clases con normalidad, mientras el personal docente impartía lecciones. Sin embargo, dentro de la estructura administrativa de la institución, se destacaba una mujer de cabello negro, quien había ocupado recientemente el cargo de enfermera en la academia. Un día que parecía tranquilo experimentaría un cambio repentino para la mujer de cabello oscuro.
Espera un momento, ¿me estás pidiendo ayuda a mí? - cuestionó Amaterasu, con incredulidad en su voz, mientras se tocaba el pecho con las yemas de los dedos.
Por favor, Ama-san - suplicó Serafall con tono persuasivo, manteniendo sus manos en una posición de súplica.
La maou vestía su atuendo informal, habitual en ella. Lucía una falda negra hasta las rodillas, acompañada por botas del mismo color. Completando su atuendo, llevaba una blusa verde oscuro y un pequeño pañuelo adornando su pecho.
No estoy segura, estoy un poco ocupada en este momento. Además, si me marcho así sin más, estoy segura de que Sasuke se molestará conmigo - replicó Amaterasu con indecisión, mientras dejaba una tabla con clip que sostenía algunos papeles.
Vamos, te lo pido como un favor especial. Si lo haces por mí, te prometo que hablaré personalmente con Sasuke para evitar cualquier inconveniente - insistió Serafall, casi arrodillándose frente a la diosa, quien mostraba un rostro dubitativo mientras se mordía nerviosamente el dedo índice.
La mujer de cabello oscuro reflexionó durante varios segundos antes de soltar un suspiro de resignación. Está bien, pero espero que terminemos lo antes posible - expresó Amaterasu resignadamente.
Sin terminar su frase, Serafall agarró inmediatamente la muñeca de la diosa. Bien, entonces, no perdamos más tiempo - exclamó, y ambas mujeres salieron de la enfermería a gran velocidad, con Amaterasu siendo arrastrada por la maou.
[...]
Entiendo, así que esta es la casa que les regaló mi padre - expresó Serafall con asombro, mientras tocaba su labio inferior con el dedo índice.
Es encantadora, ¿no te parece? - inquirió Amaterasu, dirigiéndose hacia la puerta para abrirla.
Creo que este lugar sería perfecto para que Sasu-chan pueda reunir a toda su nobleza - respondió la maou con una sonrisa, aplaudiendo un par de veces.
