capitulo 8: Reencuentros

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–Mabs... Daccy…Ella–

–¿Qué ocurrió?–

–ella murió...–dije con fingida tristeza–

_________

Habían pasado pocas semanas desde que dí inicio a mi relación con Bill, para mí suerte Ximena entendió que soy YO la pareja de Bill… O bueno, creó que lo entendió. Bill a estado mucho tiempo en mi cuerpo, cosa que de X Y manera le sirve en expandir su locura a más partes del mundo.

El ambiente era normal para un fin de semana post- apocaliptico, o bueno, normal para mí, estaba en mi estudio, hasta que aparezco en mi cuerpo de golpe, Bill acababa de entrar al Mide Scape no era la primera vez que ocurría por lo que no me molestaba, estaba cerca de lo que creí era el resultado de la Barrera  (-18.0507 va siendo) por lo que me dispuse a volver a mi estudio hasta que siento un disparo en mi estómago, mi cuerpo callo al suelo de rodillas "tapando" la herida con mis manos, acompañada de un fino camino de sangre brotar de mi boca. Los demonios presentes se dividieron en dos grupos, uno para atacar y otro para llevar mi cuerpo a otro lado, era un 90-10. 10% de probabilidad de que no me pase algo, y la otra, pues morir. Bill en cuanto sintió el disparo fue a por su forma humana, yo por mi lado me quedé en mi cuerpo, si salía de este y Bill también, no posee ría alma, sería una cáscara.

Antes de quedar inconsciente pude oír una série voces

"–¡Dipper!–" sono al unisonido la voz de Stan, Wendy, Soos–

"–¡Suéltalo Bill!–" ¿Ford?–

"–¡Les dije que si… lastimaban a… lasti… Dipper…!–" ¿Fue…Mabel?–

"–¡Pino!…–"

"–Deje lo descansar–"

"–Pino…–"

"–Señor, en serio, necesita descansar, retire se–"

Pasaron cerca de unas 2-3 semanas, creo, el punto, una que otra vez escuchaba cosas que pasaban en el exterior

Me desperté de noche, en una habitación oscura. En una cama, tenía máquinas conectadas a mi por lo que se me complicó moverme, lo primero que llegó a mi mente fueron los meses en el que me volví rata de laboratorio, me escondí en las sábanas que me cubrían sintiendo un inmenso dolor en mi estómago, lo ignoro y mezclo con un dolor al asar, cierro mis ojos con fuerza soltando algunas lágrimas y una suave respiración temblorosa

–dijiste que estarías junto a mi hasta que despierte –dije sueve entre unas lágrimas traicioneras–

No tardó mucho para que una "manta" azul oscura me cubriera de pies a cabeza a excepción de los ojos, quienes eran blancos, luego de eso perdí nuevamente el conocimiento temporalmente.

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