bugambilia ;; musan

03

  !¡ uso de drogas, alcohol, intento de suicidio, relaciones tóxicas !¡ no te gusta, no lo leas.

↳˳⸙;; ❝ bugambilia ᵕ̈ ೫˚∗:

" el mundo es eso, un montón de gente, un mar de fueguitos, no hay, no hay dos fuegos iguales. "

↳˳⸙;; ❝ bugambilia ᵕ̈ ೫˚∗:

— no es necesario que te vayas. — gruñó yasuhiro, sanzu lo ignoró olímpicamente guardando en una pequeña mochila dos blusas y un pantalón. — yo me iré.

  — es tu casa, no me quedaré aquí, si te quieres ir; vete, pero yo no me quedo. — murmuró, molesto, pero tratando de mantener la calma, aún si su interior gritaba en desesperación, rasgaba su cerebro y quería parecer matarlo.

  — ¿y a dónde irás? ¿a moteles baratos o albergues otra vez? no seas terco. — mutō sonó pacífico, pero completamente enojado, lo tomó por los brazos, dispuesto a detenerlo. — te daré dinero mensualmente, pero no te vayas. — nuevamente, estaba tratándolo como un vagabundo, sanzu ya estaba hasta su puta madre de que yasuhiro se mostrara preocupado por él, cuando hipócritamente parecía harto de su presencia.

— ¡no eres nadie para mantenerme, suéltame! — sanzu soltó manotazos al cuerpo del mayor, sintiéndose incapaz de soltarle un golpe de verdad... por el momento, pero sanzu era impulsivo, y estaba seguro de que aquella situación no iba a terminar bien. — ¡suéltame, yasuhiro! — mutō ya cansado, lo aventó a la cama, inmovilizándolo, completamente molesto por la actitud terca de su novio... ex novio. ya estaba harto de la situación, de sus berrinches, y por momentos; de él.

  — ¡hazme caso por una vez en tu miserable vida, akashi! — inmediatamente un puñetazo de sanzu llegó a su rostro, separándolo, dejándolo por unos segundos en shock, nunca le había gritado a sanzu, jamás, siempre se mostró tranquilo y si bien, a veces frustrado, nunca le había levantado la voz, ni mucho menos tomarlo con la fuerza con la que lo tomó momentos antes.

  — ¡bien, tú ganas, vete, vete, no quiero tu puta mierda! — un jarrón chocó contra la pared, rompiéndolo, luego de haber logrado esquivarlo. — ¡te odio, lárgate, si tanto te harté, lárgate, y si te vuelvo a ver, juro que te voy a matar, puto mentiroso!

¿así se sentía perder a quien amaste durante seis años enteros?

↳˳⸙;; ❝ bugambilia ᵕ̈ ೫˚∗:

habían pasado años luego de aquel suceso, ese día, yasuhiro se ahogó en alcohol en casa de los haitani como nunca lo había hecho, deshecho por la ruptura amorosa que recién había pasado con sanzu, y por otro lado, ese día haruchiyo había terminado en el hospital por una sobredosis de ansiolíticos, siendo mikey el que había acudido en su brote psicótico, pues luego de que yasuhiro se fuera, él comenzó a batallar en respirar, y sin sus piernas ser capaces de escapar, le mandó un mensaje rápido a mikey, pidiéndole que por favor fuera por él, cuando manjiro llegó, vió a sanzu de la peor manera, gritaba y tenía delirios, pasando unos minutos cayó desmayado, no sabía si por la clara crisis, o por algo más, pues en el momento que él estaba pidiendo algo para cenar a draken a través de una llamada, escuchó el golpe en seco viniendo del baño, lo confirmó cuando el bote de ansiolíticos de la casa de yasuhiro estaba completamente vacío (aquellos ansiolíticos que el mismo yasuhiro monitoreaba), aunque claro, yasuhiro nunca supo de aquella noticia.

¿en qué clase de personas tan rotas se habían convertido? mutō siempre le mentía, él siempre fue inmaduro, quizás desde ahí pudo haberse dado cuenta... o quizás desde que no eran más que adolescentes con un pasado tan catastrófico, ellos decidieron caer en un desastre por sí solos, dos personas enfermas no podían vivir en paz nunca, pero todo tenía un límite, aquel día lo fue, haruchiyo nunca había visto su vida pasar frente a él de forma dramática, tal y cómo en las películas, él no estaba consciente de donde estaba, pero sí de sus pensamientos, aquella noche del veintitrés de diciembre, haruchiyo se halló al borde de la muerte, entre la vida y el fallecimiento, recordaba que al ver los momentos que pasó con el mayor en aquel lapso de momentos antes de su posible muerte, aún si no podía estar completamente consciente, sintió una lágrima resbalar por su piel.