Para: El Novio De Papá. | HIATUS

"59"

Especial: ¡Feliz Navidad!

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Pandy se levantó especialmente temprano ese día ¿como no lo iba a hacer si ya era navidad? Era una fecha demasiado especial como para dormir hasta tarde.

Se levantó de la cama y se vistió lo más rápido que pudo porque ese día hacía mucho frío. Incluso estaba nevando...¡ESTABA NEVANDO!

Pandy dio brinquitos por todo su cuarto, luego de eso salió de su cuarto y corrió al cuarto de sus papás.

Se subió a la cama y empezó a dar brincos para despertar a sus papás.

—¡Ya es navidad, ya es navidad!—Poley se tapó la cara con la almohada y Doggy solo se sentó en la cama y se quedo mirando a Pandy; mientras el se medio despertaba.

—Levantenseeee— Sacudió a su papá Poley hasta que lo voy quitarse la almohada de la cara y tallarse los ojos para despertar.

Se sentó cerca de Doggy y este la acomodó pegada a él, abrazandola, almenos en lo que Poley se levantaba.

—Ya pues, ya estoy despierto. —Se sentó en la cama mientras Pandy sonreía.

—Los espero para desayunar. —Doggy soltó a Pandy para que ella se bajará de la cama y se fuera a donde ella quisiera.

—Papá Doggy, no dejes que se duerma otra vez. —El castaño asintió y le sonrió a su pareja.

Pandy salió del cuarto y bajó las escaleras yendo a la puerta que daba al patio. Estaba tapada completamente con ropa caliente para salir al exterior sin congelarse gracias a la nieve.

Se quedó en el patio jugando con la nieve que podía hacer bolitas y jugó todo el tiempo que pudo hasta que Poley llegó y la hizo entrar a desayunar. Adentro Doggy terminaba de hacer de desayunar.

Pandy se sentó en la mesa mientras ambos mayores servían la comida.

—¿Puedo invitar a Dessa y Filip a venir?— Preguntó, viendo como Doggy le servía su plato de comida.

Ambos adultos se miraron.

—Bueno. —Respondió el castaño y Poley levantó el pulgar aceptando.

—¡Yeiii!— Así que para tener más tiempo Pandy se apresuró a desayunar para poder hacer lo que quería.

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Luego del desayuno y con ayuda de Poley, Pandy le marcó a sus dos amigos y quedaron de verse para pasar un rato de la navidad juntos.

Rato después llegaron.

Igualmente tapados con ropa cálida para no morirse de frío.

—Holaaa—Dessa saludó a lo lejos mientras Filip estaba tirado en el piso porque se había atorado en la nieve.

—Hola Desi, Hola Filip—El castaño se levantó y caminó hasta el umbral de la puerta. Agarró la mano de ambos y se los llevó. —Vamos a jugar.