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Sus amigos lo animaron alzando sus pulgares a metros lejos de él, con Itadori regresando les el gesto acompañado de una fuerte mirada que demostraba su determinación, determinación que había crecido gracias a las severas conversaciones que casi siempre terminaban en golpes hacía él por no entender.

Analizó a la joven Azabache desde la lejanía, completamente aislada de todo tipo de edificación o personal, centrada únicamente en amaestrar su don con las armas malditas, entre sus manos su Favorita; una katana.

Su víctima no era nadie más que la inexistencia de un oponente, lanzando fuertes ataques contra la nada mientras jadeaba con cansancio, después de todo había perdido la nocion del tiempo después de despertar y posicionarse en el campo de entrenamiento. Se podía decir que ella como cada mañana; despertaba viendo el cielo aún oscuro y permanecía sola hasta que el sol proclamaba su estadía.

Dió un fuerte suspiro antes de dejar de hacer su práctica, permaneciendo quieta y relajada, miró detras suyo de reojo; como si ya se hubiese enterado de la presencia intrusa.

-- ¡Buenos Días, T/A-senpai! -- saludó el sonriente chico, alzando su mano al compás de sus palabras.
No recibió respuesta, solo un leve asentimiento por parte de la nombrada. -- ¿Puedo entrenar Contigo?.

Su cabeza dolió un poco por la petición,molesta ante la idea de tener que sobre esforzarse nuevamente incluso podía jurar que sentía su cuerpo completamente dormido y sus piernas temblar como si de gelatina se trataran. -- ¿Quieres hacerlo?¿Por qué? -- preguntó, permaneciendo frente a él.-- Hablando de eso, Nunca te he visto practicando en el tiempo que estuviste aquí ¿Por qué ahora?.

-- ¿Por qué no? -- Itadori se alzó de hombros, aún sonriendo.-- Además, soy nuevo en esto. No estoy enterado en ciertos temas.

La Azabache entrecerró sus ojos, buscando credibilidad en sus palabras que lo demostraban por la forma en como había borrado su sonrisa para hacer una mueca.
Le dió un punto de razón. -- Está bien, vamos.

-- ¡Prometo no contenerme! -- por un pequeño detalle ella solo bufó divertida, curvando ligeramente las comisuras de sus labios; sin Itadori poder presenciarlo al entrar en su papel como oponente.

-- A propósito Senpai, me dijeron que los chicos de tercer año no estaban presentes ¿Por qué usted si?.

T/N se mantuvo firme, posicionando se antes de atacar con su ahora arma de madera; dejando de lado la verdadera al suelo.

Suspiró al relajar su cuerpo y responder.-- Porque yo llegué primero, las misiones que nos otorgaron son diferentes de acuerdo al potencial. -- Mencionó. -- ¿Esperas ver a tres chicos de grado alto peleando contra una sola Maldición mientras otras perturban y dañan a otros ? Es como ver a tres depredadores rodeados de presas donde ellos solo se centran en uno solo.

Itadori soltó una pequeña carcajada confuso antes de darle la razón y comenzar a pelear, comenzando con pequeños golpes y esquives que T/n fácilmente daba con ayuda de la réplica. De vez en cuando sorprendiendose por las habilidades y ataques sorpresa del menor.

-- Por cierto Senpai -- La chica por un instante lo miró; bajando la guardia. ¿En que momento había roto la distancia? Se suponía que su puño estaba siendo detenido por el arma. -- Me gustas, ¿Lo sabías?.

-- ¿Qu-...

El impacto del golpe solo hizo que ella saliera impulsada a varios metros; mostrándose sorprendida y estupefacta por lo dicho y hecho del menor.

Su trasero golpeó fuertemente contra el polvoso suelo, incluso levantando un poco de éste. La mirada determinada y victoriosa que Itadori traía consigo rápidamente se borró; regresando " en sí ".

-- ¡T/N! -- Ahora no solo era Itadori, sino también Nobara y megumi los primeros en llegar hasta ella y auxiliar su bienestar.

-- ¡Itadori, Idiota!.

La Azabache, se encontraba únicamente sentada; con la mirada a la nada mientras sus brazos y piernas abrazaban la réplica de katana ; completamente sorprendida. Pero al parecer no por la confesión.

-- ¿Segura que estas bien, T/N ?.

La nombrada chasqueó molesta, era la tercera vez que le preguntaban lo mismo mientras intentaban apoyarla moviendo sus brazos cada que ella parecía tambalearse. -- Carajo... Estoy bien, no fue nada. -- Gruñó intentando aumentar la velocidad de sus pasos y quitarse de encima a los menores.

-- ¡Lo siento mucho T/N, de verdad! -- Itadori se disculpó ahora; alzando y uniendo las palmas de sus manos expresando su culpa. -- No medí mi fuerza.

-- ¡Ja! No, claro que no.

Parpadeó lentamente, cansada a más no poder. Finalmente fue abandonada por los chicos al aparentemente estos creer que estaba molesta, pues con forme la acompañaban a la puerta de su habitación solían comentarle o preguntarle cosas sobre su bienestar y no solia responderles; mirando únicamente al frente con su entrecejo fruncido , solo intentando mantenerse consciente.

Al sentir la calidez y comodidad de su habitación; sin más remedio se dejó caer sobre la gran alfombra que la recibía. Suspirando cansada y dándose ánimos para poder continuar de pie en ese día; después de todo apenas iniciaba y ella tenía que marcharse a una nueva misión otorgada. A palabras de los peces gordos " Era injusto que solo uno de los estudiantes se diera el lujo de estar cómodo ".

En cuanto no pudo más , permaneció cerrando sus ojos sintiendo como su adormecido cuerpo lentamente liberaba su tensión; algo satisfactorio a su punto de vista que lentamente le hacía conciliar el sueño, si, incluso el firme y frío suelo de madera le parecía apto y cómodo para dormir; cumpliendo lo último.

Suspiró cerrando la puerta detrás suyo, de forma lenta y tranquila. Con una mirada cansada y agobiada que demostraba cuánto le apestaba la idea de tener que salir.

" T/N-senpai, procura no sobre esforzarte demasiado. Te quiero. ".
Aquella nota que yacía sobre el suelo al frente de su puerta, acompañada de una pequeña bebida solo le hizo suspirar; cansada.
Arrugó la pequeña nota para lanzarla dentro de su habitación, llevándose consigo la bebida no sin antes soltar un -- Gracias.-- Vacio.

Salió de las instalaciones dándose cuenta de la oscuridad que invadía todo el terreno del instituto, con la únicas iluminaciones de la estructura asegurando su camino. Dónde a paso tranquilo y algo inestable continuó su andar hasta la salida del instituto, sin emitir algún sonido para los nuevos. No quería volver a escucharlos ni tenerlos cerca de ella por el momento. No estaba de un buen humor, no quería hablar con nadie ni siquiera mirar a los ojos ni a quien se le cruzara de por medio.

-- T/N -- la voz canturreando su nombre alargó su mal rostro, necesitando recargarse de la pared más cercana y así poder soportar estar de pie. -- Cielos, cada día estás más terrible --.

-- Habla Ya, -- gruñó -- No tengo mucho tiempo, Gojo.

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先輩 [ ITADORI YUUJI X LECTORA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora