🩸｡⁠*ﾟ⁠+☆I Bleed For You☆+ﾟ*｡🩸 ༼MinJoong༽

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•Doce años atrás.

La amistad de Mingi y HongJoong era algo envidiable, ya que ellos siempre estaban para al uno y al otro.

Y aún así seguían juntos aunque sus madres no estuvieran de acuerdo con esa amistad.

Ya que para ellas le causaba una mala vibra, cómo de que si algo fuera a pasar.

Pero aún así ellos eran muy unidos, hasta se habían prometido estar juntos pasará lo que pasará.

Y todo había empezado con un día normal en la escuela.

HongJoong siempre había sido un niño muy débil y inofensivo.

Lo cuál atraía a muchos niños que lo molestaban con lo mismo de que él era un niño débil y pacífico.

Tan así que llegó un día que lo estaban golpeando en la salida de la escuela.

Y para todos ya era normal que lo molestaran o golpearán.

Pero para aquel niño llamado Mingi no iba a ser así.

-Q-que es el problema que tienen conmigo?- les decía el pequeño HongJoong mientras caían algunas lágrimas por su mejilla.

-en serio eres tan tonto que no te das cuenta por qué hacemos esto? Es por que eres un inútil, duh- decía el bully con tono burlesco mientras los otros niños se reían.

Y así siguieron maltratando al pobre HongJoong hasta que un niño que salía un poco tarde de la escuela (ya que tenía que hacer clases extra), fue corriendo hacía donde los bullys estaban maltratando a HongJoong.

-¡Oigan, ustedes que creen que hacen! ¿No les basta con ya dejarlo temblando en el suelo? Recuerden que soy capaz de decirle al director eh?- decía aquel niño, ya molesto de que siempre fuera esa misma situación con ese niño desconocido.

-Ash, siempre arruinando nuestro buen rato, Song. Mejor nos vamos-
Decían los bullys ya fastidiados de que interfieran en su "espectáculo".

Ya después de que los bullys se fueran alejando de dónde Mingi y HongJoong estaban fue que Mingi se le acerco más a HongJoong.

-Oye, ¿Quieres que te lleve a mi casa para poder sanar tus heridas?- le decía el pequeño Mingi al chico que estaba aún tirado en el suelo.

-N-no hace falta, puedo solucionarlo solo- les respondía y ya mirándolo a los ojos, mostrando sus ojos hinchados de tanto llorar y su labio lastimado.

-andale, mi casa queda cerca de acá, después te irás a tu casa ¿Te parece?- le decía intentando convencer al menor mientras le daba una mano para que se levantará.

Un poco indeciso si hacerle caso al mayor o no, asintió mientras tomaba la mano de aunque niño para poder levantarse.

Ya caminando hacía la casa del mayor, tuvo una duda, que obviamente se la pregunto al mayor.

-Eh, esté, ¿P-por qué me ayudaste?- decía algo nervioso ya que le daba miedo lo que le fuera decir el mayor.

-La verdad es que ya estaba cansado de que siempre viera que te molestaran ¿Por qué no le decías al director o a tus padres?- Preguntó curioso, no entendía por qué el menor  nunca le dijo a alguien que lo molestaban y golpeaban.

El pequeño castaño estaba indeciso de si decirle o no al niño que tenía a su lado y el cuál tampoco sabía su nombre.

-Simplemente me daba miedo decirle a alguien más- con una sonrisa débil, le mintió.

Obviamente no le iba a decir a un niño que ni siquiera su nombre sabía que en realidad nadie lo escuchaba, ya que una vez le contó a su madre que lo molestaban en la escuela, pero aún así a su madre no le importo.

Simplemente no le podía decir eso.

El mayor no complacido con esa respuesta del castaño, asintió, no quería obligar al pequeño niño que le dijera la verdad.

Ya dentro de la casa del mayor fue por las cosas que nesecitaba para sanar las heridas del menor, siendo perseguido por el último mencionado.

-O-oye, otra cosa ¿Cómo te llamas?-
Le preguntó el castaño ya después de un rato, obviamente nesecitaba saber el nombre del contrario.

-Ja, pensé que no me preguntarias nunca, Soy Song Mingi ¿y tú?- Le respondió ya mirándolo de frente con una leve sonrisa, y ya teniendo los elementos para poder sanar las heridas del menor.

-Y-yo soy Kim HongJoong- le respondió también con una sonrisa, y para después voltear se ya para que el mayor pudiera curar sus heridas y ya poder irse a casa.

Ya después de un buen rato ya Mingi había curado sus heridas.

Y también pudo conocer a la madre del mismo, pero el sintió cómo la madre no lo miraba de buena manera, pero decidió ignorarlo.

Después tuvo que irse, antes que todo, Mingi le había dicho que para cualquier cosa que necesitara, ahí estaba Mingi.

Y ahora, para HongJoong ya podía considerar cómo un amigo a Mingi, solo esperaba que también Mingi lo empezará a verlo también cómo uno.

✧✧✧✧

Ya en la casa de HongJoong tuvo que aguantar unos cuantos regaños de su madre por haber llegado tarde, y también tuvo que presenciar a su madre algo confusa por ver qué tenía algunas curitas por algunas partes de su cuerpo.
Era la primera vez que alguien sanaba las heridas de HongJoong.