EL DESEO DE AMAR PARA SIEMPRE // YOSOYPLEX

Capítulo 27.

NARRA EMMA.

Me levanté de un salto cuándo Plex me despertó llamó y me pasó el teléfono. Era mí madre.

- ¿Mamá? -pregunto asustada-
- Cariño
- ¿Qué ha pasado?
- Vuelve a casa
- Mamá, ¿Qué narices ha pasado? -pregunto histérica-
- La abuela... Ha sufrido un infarto
- ¡¿Qué?!
- Está en el hospital muy grave
- No no no
- Tienes que volver
- Ahora te llamo

La colgué y miré a Plex, estaba en shock y no me salían las palabras, hasta que no pude aguantar más y empecé a llorar. Él me abrazó.

- Cogeremos el primer vuelo para estar allí lo antes posible -dice serio-
- Pero tú no puedes irte, estás haciendo contenido para tú canal
- ¿Tú crees que lo que me importa ahora mismo es el canal?

Me quedé en silencio ya que no sabía que responder, terminó de hablar él.

- Ahora mismo el canal no me importa nada, me importas tú, y si hay que aplazar ésto unos días se hará, voy a reservar el vuelo -dice y va directo al ordenador-

Más tarde, Jopa y Adri llegaron de la discoteca, borrachos, obviamente y Plex les dijo que teníamos que volver a España.

- Chicos hacer las maletas, nos volvemos a España
- ¿Porqué? -pregunta Jopa-
- Mí abuela está ingresada en el hospital -consigo decir-
- Joder... Lo siento Emma -dicen Jopa y Adri al unísono-
- Tenemos el vuelo dentro de 2 horas, así que daros prisa

Nunca había visto a Plex tan serio y nervioso a la vez, hice las maletas con las únicas fuerzas que me quedaban y después de 1 hora abandonamos el hotel para irnos al aeropuerto.

- Todo va a estar bien -Plex me da un beso en la frente-
- Gracias por estar -me apoyo en su hombro-
- Ni se te ocurra darme las gracias por eso, siempre voy a estar -me abraza- duerme un poco, aún nos quedan 20 minutos de camino

Le hice caso y me quedé dormida con la cabeza apoyada en su hombro. Cómo siempre al salir del taxi, tuvimos que ir corriendo para no perder el vuelo y por poco lo perdemos pero al final lo cogimos sin problema.
Lu no sabía que yo volvía a España, no me había dado tiempo a llamarla y contarle lo que estaba pasando.
El vuelo duró unas cuantas horas, en las que pude dormir un poco ya que no había dormido en toda la noche. Llegamos a España y mi madre y mi hermano me estaban esperando a la salida del aeropuerto.
Corrí hacia ellos y los abracé.

- ¡Mamá! -grité-
- Cariño -me abrazó llorando-
- Hola enano -dije secándome las lágrimas-
- Hola
- Hola chicos -saludó mí madre-

Todos estaban muy serios y tenían un semblante bastante triste, sobretodo Plex, él me acompañó al hospital a ver a mí abuela. Cuándo llegamos, la recepcionista del hospital nos indicó cuál era la habitación.
Llegué y la vi, mí abuela estaba tumbada en esa cama de hospital, llena de tubos y dormida, había sufrido de un infarto y luchaba por su vida. Ver a mí abuela así me rompió el corazón y sentí mucha impotencia no poder nada, lo único que podía hacer era llorar, y eso hice.
Después de un rato me voy preparada para dar un paso más y entrar a la habitación.

- No tardo nada -dije-
- Tómate el tiempo que necesites, estaré justo aquí -me dijo Plex-
- Gracias -sonreí- Voy a entrar -resoplé-
- Tranquila pequeña, todo saldrá bien -me toca el hombro-

Dejé a Plex en la sala de espera y yo entré en la habitación dónde estaba mí abuela, en cuanto la vi rompí a llorar, no aguantaba más y me dolía verla así.

- Hola abuela -suspiré y la cogí de la mano-

Me senté en uno de los sillones que había en la habitación y al cogerla de la mano, me estremecí, tenía la mano muy fría.

- Saldrás de ésta abuela, lo sé. He tenido que volver de un viaje con unos amigos y...con mí novio -hice un parón- Te caerá muy bien, es un chico estupendo, nunca me había imaginado todo lo que me está pasando. Sé que llevaba tiempo sin ir a verte a la residencia y ahora que te veo así me arrepiento de no haberlo hecho -empiezo a llorar- Te quiero abuela

Me levanté del sillón y me acerqué a darla un beso en la frente. Cogí mis cosas dispuesta a irme de la habitación cuándo de repente una de las máquinas empezó a pitar muy rápido, era la máquina de las pulsaciones. De un momento a otro y en segundos habían cinco médicos en la habitación, me echaron de allí inmediatamente. Intenté ver qué hacían a mí abuela, Plex me dijo que al parecer la estaban reanimando. Mí madre apareció preocupada y uno de los médicos salió de la habitación cerrando la puerta tras él.

- Vayan a la sala de espera por favor, en cuánto sepa algo les daré noticias, no sé preocupen

Y eso hicimos, fuimos de vuelta a la sala de espera, estaba histérica, nerviosa y triste y me esperaba lo peor.
Después de unas cuántas horas y que a mí me pareció un día entero, apareció un médico en la sala.

- ¿Familia de María Teresa González?
- ¡Sí! -dijo mí madre y sé levantó de un salto-

Yo me levanté y fui tras ella, tenía mucho miedo de saber que había pasado y no estaba preparada. El médico no tenía muy buena cara así que me intuí lo que había pasado.

- Verá... María Teresa ha sufrido dos infartos en un día y desgraciadamente es muy complicado, más con su edad -baja la cabeza- Desgraciadamente no ha podido aguantar, ha fallecido. Mí más sentido pésame.

Mí madre no dijo nada, se echó a llorar cómo nunca antes la había visto hacerlo y yo hice lo mismo, me senté en la silla porque sentía que iba a desmayarme, Plex me abrazó con fuerza, y luego abrazó a mi madre.
No podía creer lo que acababa de pasar, había perdido a mí abuela, mí segunda madre y el día de mí cumpleaños, se vuelve a repetir el trauma de mí infancia y no supe que hacer, el mundo se me vino encima.

- Ven -me dijo Plex-

Hundí mí cara en su pecho, manchandole con mis lágrimas la camiseta y salimos del hospital
Plex me llevó a su casa, con los demás, mí madre se había quedado allí hablando con los médicos y para hacer el funeral. Mí hermano se quedó en casa de un amigo de su clase.
Llegamos a la Epic y me conté todo a Lucía, ella se echó a llorar en cuanto se lo dije, mí abuela y ella estaban muy unidas, la trataba cómo una nieta más hasta que cayó enferma.
Los chicos me dieron el pésame pero yo sólo quería desaparecer y dormir hasta el día siguiente. Plex me acompañó a su habitación y después de un rato largo conseguí quedarme dormida, con él abrazándome, me sentía segura y apoyada a su lado.

FIN DEL CAPÍTULO.

[ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO ÉSTE CAPITULO. HE ESTADO DESAPARECIDA POR CULPA DE LOS EXÁMENES DE LA UNIVERSIDAD, PERO YA ESTOY DE VUELTA. ESPERO QUE ESTÉIS PASANDO UNAS BUENAS NAVIDADES CON VUESTRAS FAMILIAS, BESITOS<3]