Capítulo 5

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Ya habiamos bajado del avión, ahora alexander estaba manejando hacía la casa.

--Que te pasa? Estas callada--Dijo sin quitar la vista del camino

--No me pasa nada--Respondí de brazos cruzados

Mentira, no podía mirarlo a la cara luego de lo de anoche.

--Estas así por lo sucedido anoche?--Dijo sonriendo

--N-no por qué lo estaría?--Respondí

El se echó a reir.

--Claramente estas así por lo de anoche, a mi me gustó, a ti te gustó? Eso es lo importante--Preguntó divertido

Yo ni siquiera lo miré.

--Alexander ya deja de decir estupideces--Dije mirando por la ventanilla

--No son estupideces, solo fue sexo, nada más, no hay nada de malo! No sé porque estas así--Dijo molesto

--No queiro hablar--Dije ignorandolo

Luego de un rato llegamos a la mansión de alexander, me había olvidado lo hermosa que era.

Luego de un rato llegamos a la mansión de alexander, me había olvidado lo hermosa que era

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Cuando entramos a la casa nos recibió gina, la mujer que trabajaba en la casa.

--Bienvenidos--Dijo la mujer

--Gracias--Dijimos ambos

--Avisales a las sirvientes que las maletas estan en el auto--Dijo alexander

--Si señor, con permiso--Dijo gina yendo hacía la cocina

Yo me quedé ahi parada y le empezó a sonar el celular a alexander.

--!Marcos! Como estas?--Dijo hablando por llamada

Acaso estaba hablando con mi papá?

Mi padre hace más de una semana que no me habla ni se comunica conmigo ni siquiera para saber como estoy! Luego del casamiento no me volvió a mandar ni siquiera un mensaje.

Subí a la habitación y le marqué a veronica.

--Hola ambar que sucede?--Preguntó

--H-hola veronica, quería llamar para saber como están? Samira como esta?--Pregunté

--Samira esta bien, te extraña mucho pero tiene que entender que su hermana es mayor y ya es una mujer casada--Dijo seria

Cuando dijo eso no pude evitar soltar varias lágrimas, la extrañaba mucho a mi pequeña hermana, extrañaba mi vida de antes... ahora tenía una vida completamente diferente, ahora tenía un matrimonio con un hombre al cual no conozco y tampoco amo.

--Le m-mandas saludos de mi parte por favor?--Dije con la voz quebrada

--Si, lo haré ambar--Dijo seria

EL CONTRATODonde viven las historias. Descúbrelo ahora