La Antigua Orden: Profecia

Capítulo 2: Un inicio no muy amigable.

Severus estaba leyendo un libro de pociones, era la única cosa que su madre le había dejado antes de morir y cada vez que lo leía sentía algo extraño, cada vez que lo abría el ambiente se llenaba de un Aura muy pacifica, por ello a el pequeño Snape le gustaba leerlo, lo hacía sentir seguro en el infierno que tenía como casa.

El ojinegro sintió como alguien muy fuerte me tapó la boca con un líquido extraño, forcejeo contra su agresor tratando de liberarse, pero era inútil, no podía contra un alfa, porque si Snape se dio cuenta que su agresor era un alfa. Severus entró en pánico y todo su ser se alteró al sentir la presencia de otro alfa y luego de un omega, a su mente llegó el recuerdo de como fue "El ataque".

•.•.•.•.•__ Flashback __•.•.•.•.•

Severus se encontraba leyendo un libro en su cuarto cuando escuchó cómo abrieron la puerta por la fuerza, no se preocupó porque su padre siempre que llegaba de beber hacía eso. Siguió leyendo el capítulo de su libro de transformaciones cuando recordó que su padre estaba en un viaje de negocios y no regresaba hasta en tres días, palideció cuando recordó la información.

Snape sintió como como alguien le tapó la boca con un trapo, por las feromonas de su agresor pudo saber que era un alfa. Entro en pánico, pero su visión poco a poco se nublaba más y más, logró ver como otro alfa se le acercaba por enfrente. Trató de gritar, pero no pudo, sentía sus párpados pesados, todo le daba vueltas y casi no veía nada. Lo último que vio fue a una omega agarrando unas cuerdas...

•.•.•.•.•__ Fin del Flashback __•.•.•.•.•

Severus forcejeo mientras empezaba a perder la conciencia, como último recurso lo invocó a "El". El pequeño Snape pudo ver como una "Masa negra" empezaba a salir de su cuerpo adoptando la textura del viento. Sus párpados pesaban, pero "El" ya estaba saliendo por lo que ya no estaba tan preocupado.

Severus pudo ver como un alfa alto de pelo castaño se puso enfrente de "El", siguió forcejeando y entonces vio el rostro de quien menos esperaba. Frente a Snape estaba James Potter quien le puso una extraña pulsera a el ojinegro. Severus sintió como como su magia era bloqueada, vio como "El" desaparecido en segundos, sus ojos se llenaron de lágrimas de frustración y terror... ¿Que le harían? ¿No le hicieron ya suficiente daño? ¿Por que James antes de ponerla la pulsera sonrió? ¿Le haría daño? ¿Terminarían lo que los vampiros no? ¿Por que siempre era a el? Fueron las últimas cosas que pudo pensar antes de caer inconsciente.

.•.•.•.•.•.•._ En el auto de Lily_•.•.•.•.•.•.

Severus se sentía cansado, todo su cuerpo dolía y podía sentir punzadas de dolor en ciertas partes de su cuerpo, algunas en sus partes privadas que fue donde Tobías lo golpeaba por pura diversión, pero normalmente no dolía gracias a "Él". Gimió de dolor al sentir una fuerte punzada de dolor cuando se movió. Lentamente empezó a abrir los ojos y lo primero que vio fue cinco pares de ojos viéndolo. Su corazón dio un vuelco al reconocer los ojos de Sirius Black, James Potter, Remus Lupin, Peter Pettigrew y Lily.

Casi al instante el pequeño Snape se alejó por puro instinto de supervivencia, aveces cuando hacía eso Tobías chasqueaba la lengua y lo dejaba tranquilo o aveces lo golpeaba tres veces peor, siempre dependía de que tan misericordioso fuera Dios contra un demonio. Severus suspiró temblorosamente y vio un sofá a su lado, se apoyó en este para levantarse ante la atenta mirada de los merodeadores.

— ¿Donde... estoy? — Pregunto él Omega lo mas calmado que pudo mientras sentía el dolor pegarle como latigazo a cada segundo que permanecía de pie.