Capitulo 1

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Chu Wanning era el hijo adoptivo de el marqués Huai Zui, pero tras la muerte del marqués Chu Wanning paso a estar bajo el cuidado de su tío, que le quitó toda su herencia y aparte lo humillaba y maltrataba. Lo que nadie esperaba era que el nuevo marqués mandara a  Chu Wanning para que sirva de concubina a el nuevo emperador, en lugar de mandar a su hija como se había ordenado.
Chu Wanning se sentía muy vacío y humillado, antes era el hijo prodigio del marqués Huai Zui y ahora estaba en camino a ser conocido como una de las tantas concubinas del emperador. Sentía que estar dentro de ese carruaje lo sofocaba y no le permitía respirar, ver aquellos paisajes de bosques y personas del pueblo paseando felices por la noche iluminada por aquella hermosa luna y linternas, hacia que sintiese una opresión en el pecho al pensar en que no podría volver a verlos.
Chu Wanning podía escapar en cualquier momento, pero si desparecia toda su gente sufriría las consecuencias. Se sumió tanto en sus pensamientos que no se dio cuenta de el momento que llegó al palacio.
— Mi señor, ya llegamos —
La persona que hablo fue luo Xian Xian, la pequeña sirvienta que lo sigue desde hace unos años.
— Esta bien —
Chu Wanning respondió sin ganas, pues no le emocionaba esto como al resto. Bajó del carruaje y fue guiado por un eunuco, posiblemente Chu Wanning no se dio cuenta al estar pensando mucho, pero Luo Xian Xian si. Su señor, Chu Wanning, estaba vestido con una simple túnica de boda roja  y unos pocos adornos en su peinado, pero aun así el no dejaba de llevarse las miradas de las personas.
— Llegamos —
Después de decir eso, el eunuco se retiro dejando a Chu Wanning en un pequeño cuarto. Luo Xian Xian entró primero para verificar el cuarto y después entro Chu Wanning junto a sus dos maletas, una pequeña y la otra más grande.
— Yo acomodare todo esto, descansa —
Luo Xian Xian trato de quitarle las malestas a Chu Wanning, pero este la esquivo.
— No te preocupes, yo me encargo —
Chu Wanning se estaba dirigiendo a los estantes y cajones, Luo Xian Xian sabia que no podría quietarle esa idea de la cabeza.
— Al menos tu tío no nos molestará más —
Chu Wanning paró un rato lo que hacía, pero luego continuo ya que se dio cuenta de que ahora no tendría que soportar las humillaciones  ni a su tío.
— Tienes razón —
Luo Xian xian se sintió feliz al escuchar a Chu Wanning más relajado, pues hace mucho tiempo no lo veía de esa manera.
— Terminé, Xian'er descansaré un rato —
— Esta bien —
— No salgas y si pasa algo me avisas —
— Entendido —
Luo Xian Xian estuvo despierta un tiempo viendo todo el cuarto, hasta que le vino el sueño y se quedo dormida en aquel sillón.
Chu Wanning se despertó después de escuchar que tocaban la puerta, se levantó y al ver que Luo Xian Xian se quedó dormida fue y abrió la puerta.
— Buenas noches concubina Chu —
Un eunuco viejo lo saludo desde el otro lado dela puerta, gracias a ese saludo  Chu Wanning volvió a recordar su situación.
— Me presento, yo soy el eunuco Li y vengo de parte de la emperatriz a entregarle este libro —
Chu Wanning observó y recibió aquel libro, lo empezó a revisar.
— En este libro esta todo sobre lo que tiene que hacer como concubina y de como puede ascender, esto lo tiene que leer su dama de compañía —
— Entiendo —
— Entonces me despido concubina Chu —
El eunuco Liu dio una reverencia y Chu Wanning también hizo una reverencia, pero con solo su cabeza. Volvió a cerrar la puerta y fue a colocar el libro encima del escritorio a su lado, luego agarro una manta de la cama y tapo a Luo Xian Xian con ella. Se sentó en la silla del escritorio y empezó a leer el libro que le entregó el eunuco Liu.

Solo yo soy tu emperatriz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora