El viento fuerte que indicaba el inicio del invierno se hizo presente en Tailandia.
El movimiento de los autos y la gente que caminaba sin preocupaciones de nada era lo que una chica castaña lograba ver desde la ventanilla del auto que la llevaba.
Veía como los edificios pasaban y como todo se miraba tan diferente a hace 5 años que se fue.
Vaya... 5 años.
Rebecca sonrió con nostalgia al recordar su vida en ese tiempo.
Tenía 18, casi 19 años, iba a segundo año de su carrera en la Universidad, y tenía una novia.
Ahora todo cambió.
Tiene 24 años, dió por finalizados sus últimos dos años de carrera y sus tres años de formación, y... tiene novio.
¿Enserió cuando se fue tenía 19 años? Ahora 5 años después ya tiene 24, no podía creerlo, pero es verdad.
El auto se estacionó frente a su vieja casa, el chico que la acompañaba se bajó para abrir su puerta.
"Hemos llegado" ___le informó, Rebecca solo asintió y se bajó.
Dieron un par de pasos más y antes de tocar el timbre, la puerta se abrió, dejando ver a la señora Armstrong.
Sra.Armstrong: Hijos, que bueno tenerlos aquí ___ dijo para abrazar al chico que acompañaba a su hija.___ Chris, estás tan apuesto como siempre.
Chris: muchas gracias, suegrita, usted está igual de preciosa___ le hace saber.
Sra.Armstrong: que dices, ya estoy anciana ___ dice bromeando.
Becky: también estoy aquí, madre ___ le hace saber Rebecca, pues parece que era invisible ya que su mamá no la vió para saludarla.
Sra.Armstrong: oh, si, tu padre está adentro, quizás le de gusto que vayas a saludarlo ___ responde ésta sin tanta importancia.
La jóven castaña pasó al lado de su madre, entró a su casa y un sin fin de recuerdos la abordaron. Todos sobre ella y otra chica.
Sintió su cuerpo erizarse, y rápidamente negó con su cabeza, han pasado tantos años y ni un solo día pudo olvidarla, ¿Estaba mal? Ya tenía novio, posiblemente ella tenía novia.
A pasos lentos fue hasta su habitación, no sentía el deseo de hablar con su padre, menos con su hermano, así había sido en todos éstos años, anantes respondía los mensajes, siempre rechazaba sus llamadas.
Al estar dentro de esas cuatro paredes con recuerdos muy vivos en su mente, Sintió como un par de lágrimas se le escapaban, pero rápido las limpió.
Se lo merecía, merecía sentirse así, estar triste y sin ánimos todo el tiempo era su castigo por romperle el corazón a una chica que solo quería hacerla feliz.
Freen, ¿Qué será de ella hoy? Se preguntaba, sentía curiosidad, ¿habría terminado su carrera? ¿Acaso cumplió sus sueños?
Fue hasta su cama y se sentó, suavemente pasó una de sus manos por el colchón de ésta, era tan suave... y se sentía tan bien, pero se sentía mejor cuando estaba abrazada con ella, la quería aquí. Pero ya era demasiado tarde, ella ya debe ser feliz con alguien más.
Alguien que no tenga miedo en decir quién es en realidad, alguien que no tenga miedo de amarla frente a todo el mundo, alguien que no ponga excusas para no estar con ella.
Tomó una de las almohadas, estaban limpias, talvez su madre, un día antes las había puesto.
"Becky, baja un momento, hija" ___se escuchó la voz de su madre.
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Eres tú a quién amo || Freenbecky || Parte 2
FanfictionFreen: te casaras con el?- preguntó con temor a lo que ésta diría Becky: no me casaré con el, eres tú a quién amo Freen: entonces por qué no lo rechazaste? Becky: no puedo hacerlo y lo sabes. Freen: entonces no me amas- dijo con lágrimas en los ojo...