Silverpine Village

22 de diciembre, 2023.

-¿Cómo te sientes?

Hablé riendo mientras Niall tomaba de su taza de té aun en la cama del hotel, no es que regresar aquí hubiera sido difícil, pero definitivamente no hubiera sido posible sin la ayuda del taxista que mamá pidió. El mayor me mira con una ligera mueca, sabía que en realidad no estaba tan crudo, pero que apreciaría quedarnos un rato en cama, y tomando en cuenta que por la ventana se podían ver pequeños copos de nieve cayendo una vez más, no parecía mala idea.

Ver una película para pasar un pequeño rato parecía la mejor manera, pero a veces hay películas navideñas que simplemente... no deberían existir.

-¿Me estas diciendo que recorrió el aeropuerto completo en menos de dos minutos? ¿incluyendo seguridad?

Su mirada se junta con la mía, haciéndome reír sin dejarme nada que decir. No había forma de defender esta historia.

-Y.... Y.. ¿El avión está esperando a que él se despida de ella? No. Esas cosas se van, no les importa.

-¿No estas siendo un poco duro con la película de bajo presupuesto?

-No es bajo presupuesto... es solo una pésima película

Murmura lo último riendo, se estira en la cama incluso empujándome suavemente para luego sentarse. La mala elección de que ver había servido de algo, Niall se veía mejor y con más ánimos de seguir nuestra pequeña aventura navideña.

Así que una hora después, éramos la tierna y al mismo tiempo ridícula pareja con suéteres de navidad iguales, caminando por el centro del pueblo con un café en la mano. Desde que habíamos llegado, la presencia de Niall en Silverpine había pasado desapercibido ya que ni siquiera habíamos salido tanto pero dar un par de fotos no era algo que le molestara a él y realmente yo no era alguien a quien le molestara este tipo de cosas, si fuera así ni si quiera creo que nos podríamos haber casado. Había veces que incluso lo agradecía, justo como en este momento.

Habíamos decidido entrar a patinar a la pista de hielo, dónde en menos de cinco minutos, Niall ya estaba con el trasero mojado por haber caído.

-Ya ya, muy divertido

Murmura levantándose con mucha mas agilidad de lo que yo podría hacerlo, pero aun así no podía dejar de reír, al igual que las otras tres chicas que veían desde afuera y que estaba completamente segura de que lo tenían en video. No podía esperar por verlo en toda mi pagina de TikTok. A pesar de que intenta parecer molesto de que mi risa no se detuviera, no logra ocultar la suya por mucho tiempo.

Ya que patinar había sido mi idea, y según Niall, ese video lo estaría atormentando por un largo rato, esta vez el eligió la segunda actividad del día y a mi sorpresa estaba mas que emocionado por entrar a la competencia de casitas de jengibre. No podía ser tan complicado, prácticamente competíamos contra niños pequeños.

Pero vaya que nuestra casita parecía hecha por niños de tres años a comparación de las de ellos.

-Eso no es justo, me niego a pensar que ellos lo hicieron solos.

-¿De qué hablas?

-Estoy seguro de que sus papás los ayudaron.... No es que nuestras habilidades sean tan malas

-Oh, definitivamente no es eso, Nialler

Murmuro divertida pensando en cómo nuestra pared de atrás tenía más betún que misma galleta de jengibre porque no lográbamos que se quedara de pie.

-Quiero una revancha

-¡Niall! Tiene como diez años....

-¿Eso que tiene que ver con la casita de jengibre?