Mi nombre es Lía Jones, soy estudiante en el colegio de magia y hechicería de Hogwarts, soy de familia mágica de sangre pura, toda mi vida he estado y conozco de la magia, no podría decir que soy excelente, pero soy buena. Nunca he tenido muchos ami...
Querido diario... Estuvimos en la sala de los menesteres hablando y riendo, los demás alumnos hacían lo mismo, todos ya se habían curado los ungüentos que le di, por ende, se veían bastante bien; Dejé dos en mi mochila por si acaso pasaba algo o tenemos alguna herida puesto que en estos tiempos nunca se sabe pero no podía mentirme dentro de mi albergar la esperanza de encontrarme a Ron y como siempre estaba herido o algo tenía guardé uno para él. ---¿Entonces a dónde iremos?---Preguntó Mathieu sacándome de mis pensamientos de golpe. ---No lo sé---Musitó Mía dudosa, ella proponía quedarnos ahí puesto que en la casa de los menesteres nadie podía entrar pero Mathieu y yo no estábamos convencidos con esta opción. ---Quizá si debamos volver al refugio---Propuse. ---Si, pienso que es la mejor opción---Coincidió Mathieu positivo ya que andar por ahí sin protección no era nada alentador. ---Bien---Repuso Mia levantándose pero antes que pudiera decir algo comenzamos a escuchar murmullos por todas partes y los alumnos se comenzaban a poner nerviosos. ---¿Qué sucede?---Le pregunté a un alumno de Hufflepuff que estaba cerca. ---No sabemos, llamaron a Neville... y se fue porque supuestamente venia alguien pero... no teníamos previsto que alguien viniera aquí... hoy ---Explicó temblando un poco con la varita en la mano. Yo voltee asustada hacía mis amigos pero no fue necesario que les dijera algo porque ya tenían la varita apuntando hacia la entrada, así que hice lo mismo. Todos esperábamos nerviosos mientras murmuraban hasta que finalmente apareció Neville, el corazón me palpitaba fuerte estaba asustada pero decidida a atacar. Cuando pude ver bien al chico mí sorpresa fue que tenía una sonrisa de oreja a oreja ---Miren quién llegó---Dijo radiante de alegría y de la puerta salió el trío de oro, todos los alumnos se exaltaron y comenzaron a aplaudirles tan contentos que algunos saltaban.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mientras que Mathieu y yo contemplamos la escena congelados con el corazón a mil ¿Era él? ¿Realmente era Ron? Estaba a pocos metros de mí siendo abrazo por todos, yo sentía que no podía creerlo... que estaba alucinando...
Lo veía a los lejos, estaba bien, estaba vivo... estaba frente a mí.... luego de pensar esto reaccioné y corrí a toda prisa hacia él, las lágrimas comenzaron a caer sobre mis mejillas creo que nunca en mi vida había estado tan contenta como hoy... había pensando que iban a pasar meses o años para poder volver a verle.... pero no, aquí está, esta aquí.
Cuando estuve cerca que él me vio puso una cara de sorpresa y así mismo como si su cuerpo reaccionará solo extendió los brazos para recibime e incluso flexionó un poco las rodillas, siempre hacia eso cuando iba a levantarme muy alto cosa que hizo acelerar mi corazón como nunca en esos pocos segundos me di cuenta de el tiempo que tenía sin correr a sus brazos y que él me levantara radiante de alegría pero ni todas las veces en celebración que lo hemos hechos se compara con hoy.
Finalmente llegué a sus brazos y de un salto, me monté en él rodeando su cuello con mis brazos y su espalda con mis piernas. ---No puedo creer que estas aquí---Dije llorando. ---Lia, estoy---Su voz se escuchaba muy agitada como si no tuviera casi aire e imagino que es tanto por el susto de verme como la emoción---Estoy... tan contento. Escuchaba a Harry hablar con los demás pero estaba tan concentrada en el largo y fuerte abrazo que estaba teniendo con Ron que sentía que estaban en otra habitación. ---Ron---Dije aun con voz llorosa separándome de él para contemplarlo---Realmente estás aquí---Añadí con una sonrisa de oreja a oreja y colocando mis manos en sus mejillas que estaban verdaderamente frías ---¿Por qué siempre te estas congelado?---Pregunté riendo mientras mis lágrimas caían. ---¿Por qué más sería?---Contestó riendo un poco y añadió---Pues para que tú me las calientes ---Ron---Dije antes de nuevamente abrazarlo fuerte, sus chistes, su sonrisa, todo de él, todo lo extraba demasiado---Te extrañé. ---Yo también te extrañé demasiado---Repuso dándome besos en las mejillas---Y estas cada vez más linda. Yo le di un pequeño beso en la boca puesto que los demás estaban a un lado de nosotros y siempre nos daba vergüenza tener mucho contacto o ser muy cariñosos frente a los demás. ---Oye, oye ¿A eso llamas beso?--Se quejó riendo un poco. Yo solté una pequeña risa con mis brazos rodeando su cuello, puesto que aún me tenía cargada y añadí a su oído---Luego te doy una recompensa. El pelirojo subió las cejas un poco sorprendido pero después se dibujó una coqueta sonrisa y dijo---No puedo esperar. ---Oigan---Nos interrumpió Harry con voz cansina, cosa que nos hizo volver a él sorprendidos como si hubiésemos olvidado que había más gente ahí y al instante me di cuenta que no solo nos lo dijo a nosotros ya que Hermione y Mathieu estaban abrazados tan fuerte que parecían uno y cuando Harry les habló se separaron más rojos que el chamuscado cabello de Ron que por cierto ¿Qué les había ocurrido? Tenía heridas recién curadas en las manos, cara e imagino que los brazos pero no pude verlas por que estaban bien abrigados---Estamos apurados---Recalcó Harry. ---Ah... si... perdona Harry---Se disculpó Ron tímidamente bajándome. ---S-Si, lo siento---Se unió Hermione con la cara como un tomate viendo a los demás alumnos parecían que al igual que nosotros se habían olvidado que había más gente ahí.