ALWAYS | Un Slytherin y una Gryffindor

1.- El secreto de Remus Lupin.

L. E

Veinte minutos en pociones dobles con Slughorn eran extrañamente aburridos para Lily. Por lo general, las pociones la excitaban, pero el profesor había decidido que la clase debería rehacer otra poción que Lily ya dominaba.

Desafortunadamente, eso significaba que tendría que recrearlo aunque ya tenía tres viales de la bebida curativa en su dormitorio. Lily suspiró y reunió los ingredientes mientras intentaba ignorar las incesantes súplicas de ayuda del chico a su lado.

"Lily, ¿podemos tomar prestadas tus notas?" James preguntó por tercera vez.

Lily lo fulminó con la mirada. "Tal vez si no estuvieras siempre bromeando durante las conferencias no tendrías que tomar prestadas mis notas. Esta es la tercera vez que tenemos que crear esta poción", espetó.

James la despidió y se giró para consultar con Sirius sobre su poción. Las últimas semanas han sido sorprendentemente tranquilas y agradables. En unos pocos días, el enojo de Sirius con James se había desvanecido y ambos chicos habían dejado de molestar a Lily sobre su amistad con Severus. Al menos en su mayor parte. Un par de veces por semana le preguntaban por qué era amiga de la bola de baba, pero aparte de eso las cosas estaban tranquilas, y James Potter ya no la molestaba por Snape, casi nadie de Gryffindor lo hacía. Al principio fue extraño, pero Lily se acostumbró rápidamente. Ella y Severus se dirigían hacia las cocinas o la Sala de los Menesteres cada pocas noches para estudiar y estar juntos. Su amistad no era completamente pública, pero podían caminar juntos por los pasillos sin ser maldecidos, mirados o insultados.

"Lily", dijo inesperadamente el profesor Slughorn desde su lado. "Tú y otros tres dominaron esta poción las otras dos veces que lo hicimos, así que tú y Snape trabajarán juntos en una poción multijugos", explicó.

Lily asintió y recogió sus cosas, ligeramente emocionada por el hecho de que ella y Snape podían conversar durante toda la clase durante dos horas. Y podrían hacerlo sin ser escuchados a escondidas. Las últimas semanas Snape se había abierto a ella más de lo que jamás había esperado y descubrió que Snape era mucho más hábil e inteligente en el arte de las pociones de lo que originalmente había percibido. Incluso creó algunos de sus propios hechizos, uno de ellos un Muffliato, que permitía una conversación privada en público.

Lily dejó caer sus notas en el somnífero en el escritorio de James y Sirius con una mirada mordaz que esperaba que el acto de estudiar y prestar atención en las clases era importante, pero como James solo pronunció la palabra bola de baba y se tapó la nariz, dudaba que así fuera. solo eso. Snape tenía la sonrisa que ella disfrutaba admirar plasmada en su rostro cuando se sentó y se alegró de que ya no dudara en hablar con ella en público. Excepto por una o dos miradas ocasionales de una de las dos casas, se les dejaba hacer sus propias cosas. Incluso el profesor los dejó en paz.

"¿Supongo que como me diste un frasco de Veritaserum también puedes crear una poción multijugos sin ningún problema?" preguntó Snape. Ella sintió que su rostro se sonrojaba pero le sonrió en respuesta. Resultó que a Snape le encantaba ese regalo más de lo que ella había pensado y constantemente lo mencionaba en la mayoría de las conversaciones.

"De hecho, tengo un frasco en mi baúl", dijo.

Snape alzó las cejas sorprendido ante la mención de que estaba en su baúl, pero rápidamente se puso a trabajar y durante la siguiente hora trabajaron en silencio uno al lado del otro. Mientras terminaban su poción y empacaban para irse, Snape deslizó un trozo de papel hacia Lily y ella lo tomó sin dudar. Así comunicaron dónde querían encontrarse esa noche. Podían hablar fácilmente, pero era más fácil si lo escribían y de esa manera nadie podía escucharlos. Lily le sonrió antes de escapar de regreso al lado de Gryffindor de la habitación y atrapar a Macmillian y Doris cuando salían de la habitación.