Jung Hoseok ha tenido suficiente. Ha perdido un sinnúmero de relaciones porque parece que no puede dar ese último paso hacia la intimidad. Nunca más. Él va a deshacerse de su virginidad. Es un plan bastante simple. Ir a un club para escoger un chico...
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Taehyung vivía en uno de esos rascacielos diseñados para señalar la riqueza de la gente que lo habita. Siempre le había parecido muy frío y ostentoso a Hoseok, y estar aquí con Taehyung no cambiaba su opinión.
Sin embargo, había una ventaja en particular que Hoseok no había esperado sobre poseer un piso en un rascacielos de lujo, que descubrió tan pronto como Taehyung estacionó y guio a Hoseok hacia el ascensor. En el momento en que las puertas del ascensor sonaron con fuerza, Taehyung lo abrazó y aplastó sus bocas juntas.
Hoseok envolvió sus brazos alrededor del cuello de Taehyung y devolvió el besó, porque él simplemente no podía no hacerlo. Desde que había visto por primera vez a Taehyung, lo había deseado más de lo que nunca había querido a cualquiera de sus novios anteriores. Pero Taehyung no era como cualquiera de ellos. Al besarlo, pura seducción se desprendió de sus labios, metió su lengua en la boca de Hoseok, devorándolo. Fue clavado contra el frío metal de la pared del ascensor, moliéndose contra él con su polla dura empujando la cadera de Hoseok, prácticamente exigiendo atención.
Gimió en el beso de Taehyung, odiando la ropa que los mantenía separados, desesperados por sentir la piel del otro. Él clavó sus manos en el pelo de Taehyung, a la vez que respondía con su propio roce y molienda.
Y luego, por encima del hombro de Taehyung, vio a una cámara. Se obligó a romper el beso y apuntando al dispositivo. —No podemos, —dijo sin aliento.
—Está bien, —dijo Taehyung, llegando a él de nuevo. —Nadie va a decir nada. Ellos saben que no quieren meterse conmigo.
Tal vez fue una locura que Hoseok confiara en la palabra de Taehyung. Sólo Dios sabía que lo último que quería era tener una cinta de él teniendo relaciones sexuales que circulara en Internet.
Y tal vez debería haberse alarmado por la contundencia con que Taehyung se expresaba, tanto ahora como antes. Pero estar aquí con él le hizo sentir seguro y temerario. Tiró toda la precaución al viento y alcanzó la cremallera de Taehyung. Mientras se deslizaba por el cuerpo del hombre, se dejó caer de rodillas, listo para adorar la belleza que era el pene de Taehyung.
Porque por Dios, Taehyung tenía una polla increíble. Mejor aún, no había estado usando ropa interior, debería haberlo esperado dada la rapidez con que los pantalones de cuero dejaron caer la cremallera, y la polla de Taehyung se liberó, gruesa y larga, la cabeza de color púrpura ya tenía fugas de grandes cantidades de líquido pre seminal. La lujuria se mezclaba con la incertidumbre dentro de Hoseok. Él había intentado dar mamadas a Richard antes, pero siempre se detuvo justo antes de que pudiera hacerlo.
¿Y si se ahogaba mientras lo hacía?
Hoseok vaciló durante demasiado tiempo. Las puertas del ascensor se abrieron y perdió su oportunidad. En realidad, gimoteó cuando Taehyung lo puso de pie y metió su pene de nuevo en sus pantalones.
