Jung Hoseok ha tenido suficiente. Ha perdido un sinnúmero de relaciones porque parece que no puede dar ese último paso hacia la intimidad. Nunca más. Él va a deshacerse de su virginidad. Es un plan bastante simple. Ir a un club para escoger un chico...
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Fue muy fácil para Hoseok distraerse con el espécimen perfecto del hombre que está desnudo en su dormitorio. Fue aún más fácil excitarse, y, de hecho, en cuanto vio la polla larga y gruesa, su libido se despertó, ignorando por completo el hecho de que su relación con Taehyung necesitaba tanto trabajo que no era gracioso. En ese momento, él sólo quería llegar a Taehyung y tomar el pene de otro hombre en la boca, o tal vez en su culo.
Y luego, se hizo evidente que Taehyung no se había quitado la ropa con el fin de seducirlo. Bajo la mirada atónita de Hoseok, la forma de su amante había cambiado de un hombre caliente a un enorme lobo negro.
Hasta ese momento, no había procesado intelectualmente lo que su médico le había dicho, incluso si hubiera visto algunas cosas inusuales sobre Taehyung, él no se había dado cuenta exactamente hasta que medida lo era. Pero cuando el lobo lo miró con los ojos grises que cambiaban a un dorado profundo, Hoseok ya no podía esconderse de ello.
—Mierda, —murmuró. —Eres... Eres un hombre lobo.
El lobo caminó lentamente más cerca de la cama y puso su enorme pata sobre el colchón. Hoseok tentativamente puso la palma de su mano sobre ella, mirando más cerca de la cara de... de la criatura. —¿Taehyung?
En respuesta, el lobo se quejó levemente y lamió la mano. Hoseok no pudo evitarlo. Él rio. —Oh, mi Dios, yo debería haberlo sabido cuando mencionó la luna. Un hombre lobo... Esto es un poco loco.
El lobo negro saltó sobre la cama, comenzó a olfatear a Hoseok y a lamerlo por todas partes. Hoseok terminó enterrando sus dedos en la piel sorprendentemente sedosa del lobo. Todavía no acababa de entender cómo diablos había pasado de un regular, aunque algo raro, consejero guía, a un hombre embarazado con un hombre lobo en su habitación, pero parecía que era su vida ahora. Y curiosamente, se sintió mucho más seguro y más feliz que nunca. Sí, Taehyung tenía colmillos y garras, pero de alguna manera, sabía que el otro hombre nunca le haría daño.
Después de unos minutos, Taehyung cambió de nuevo a su forma humana. Pasó los dedos por encima de los labios de Hoseok y habló en voz baja, —En serio, no sé qué hice para merecerte. Estaba muy preocupado que estarías asustado, y tu... me asombras más y más con cada segundo que pasa.
—No te apresures a felicitarme por aceptar tu naturaleza así de fácil, —respondió Hoseok, ahora probando la sensación del pelo de Taehyung y mentalmente comparándolo con el de su pelaje. —Creo que todavía estoy en estado de shock.
Taehyung no tomó el comentario de Hoseok de la manera desenfadada que esperaba. —¿Quieres que vaya a traerte un poco de agua? ¿Tal vez necesitas tomar aire fresco?
Hoseok nunca había pensado que un tipo magnífico como Taehyung pudiera ser descrito como mono, pero allí estaba. La repentina agitación de Taehyung era la cosa más linda que alguna vez vio. A pesar de la rareza del momento, Hoseok se encontró pensando en lo cómodo que se sentía estar con Taehyung otra vez, más que en las implicaciones de las últimas revelaciones.
