𝙿𝚛𝚘𝚕𝚘𝚐𝚘

165 21 27
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

7:00am

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

7:00am...








7:15am...







7:30am.








Al marcar la hora adecuada, el despertador se activa, la muchacha se despierta de un brinco, cayendo al frío suelo.

—Ugh —suspira cansada, con un mal presentimiento, su mirada se dirige hacia la pequeña mesita,el reloj marca las 7:30 AM—. Oh, no puede ser...


Rápidamente se levanta del "cómodo" huello y se dirige al baño. Temblando, se lava su cara y cepillando sus dientes, se limpia el cabello y lo peina sin importarle lo brusca que es. Luego, comienza a maquillar las supuestas imperfecciones, de forma suave y sutil, dando énfasis a sus ojos y con cuidado de no exagerar.

—¡Dios, mío! Casi se me olvida —maldice en un susurro, corre hacía las escaleras que conectan al primer piso—. hoy tengo que estar a las 8:30am en la funeraria... Mierda-

Sin previo aviso, pierde el equilibrio y se cae de las gradas. Ella se golpea la cabeza y empieza a sentir un dolor agudo. Con un fuerte dolor en la espalda se levanta de la escalera con cuidado y se sujeta la testera por el dolor...

—¡Agh! ¡Estúpida! —gruñe para si misma, se levanta de manera tambaleante y trata de seguir adelante.

Mientras sigue regañandose así misma, procede a acercarse a la cocina, agarra su bolso, y también se acerca hacia su nevera y toma una manzana para no quedarse sin hambre.

(Your name) sale de su casa, lleva su bolso en la mano izquierda, vacilante, se apresura a toda velocidad hacia un bus que está parado en la parada de autobús cerca de su casa. El autobús está por irse, y ella corre y salta dentro del autobús en movimiento. Se sienta en uno de los asientos y se pone de manera correcta en el asiento, con su bolso en las piernas.

Las miradas de la gente no tardaron en llegar, murmurando palabras que la mujer logro escuchar:

“Creo que esta mal vestida...", “ese bolso no combina con su ropa..." , “¡Mira allá, una mujer sin estilo!", “mira su cara, parece estar muy enojada y preocupada por algo".

El rostro de la (hair color) se teñía de un suave rubor mientras observaba distraídamente el paisaje que se deslizaba aprisa afuera de la ventanilla. Sus ojos se desviaban ocasionalmente hacia las personas que subían y bajaban del autobús, pero rápidamente volvían a fijarse en su bolso.

«La puta que me parió...» condenó en sus adentros. «Estoy en pijama. ¿Cómo no me di cuenta antes?»

A medida que el autobús se detenía en cada parada, (your name) esperaba ansiosamente que llegara su turno para bajar. Finalmente, el momento llegó y con un suspiro de alivio, se levantó y se dirigió hacia la puerta de salida.


***

Al llegar, (your name) fue recibida con sonrisas y burlas por parte del personal del lugar. Ella suda como puerco, corriendo se dirigió hacia la sala de preparación dónde se encuentra el cuerpo de un difunto. Al ver el cadáver, rápidamente su rostro cambia a una mezcla de seriedad y compasión, consciente de la delicadeza y el respeto que requería su trabajo.

Camina hacia un casillero, agarrando un gorro quirúrgico, una mascarilla y un par de guantes de látex.
Mientras se preparaba, la tanatopractora se acercó al cuerpo del fallecido, que yacía en una camilla cubierta por una sábana blanca, lo destapa, él tiene el cuerpo enflaquecido, y su rostro está descolorido. Los ojos estan cerrados, y sus facciones parecen congeladas del frío...

Antes de comenzar su tarea, revisó el expediente médico que había sido colocado cuidadosamente junto a él.

—Veamos... Nombre, Wilbelm Anller —afirmo, ella parpadeo dos veces y volteo a verlo—. Oh, con que eras mi profe de mate...

»fecha de nacimiento: 5 de octubre de 1972, edad 51 años. Uhmm... Causa de fallecimiento: diabetes.

Una vez que se familiarizó con la información del expediente, (your name) comenzó su trabajo. Cada movimiento era ejecutado con precisión y delicadeza, siguiendo los protocolos profesionales establecidos para garantizar la preservación y presentación adecuada del difunto.

Aplicando técnicas y procedimientos precisos para preparar el cuerpo del finado. Cada movimiento era realizado con delicadeza, con sumo cuidado comenzó por arreglar el cuerpo del difunto, ajustó la posición de las extremidades y del rostro, buscando transmitir una sensación de paz y tranquilidad.

Luego, (your name) procedió a aplicar el maquillaje especial para muertos. Utilizando tonos suaves y naturales, resaltó la belleza y las características únicas del difunto. Cuidadosamente, aplicó base para igualar el tono de la piel y corrigió pequeñas imperfecciones, siempre manteniendo la apariencia natural.

Con destreza se dedicó a peinar el cabello del difunto. Ella se esforzó por replicar con precisión un tupé rockero, ya que en el documento, específica el tipo de peinado que requiere el muerto. Dando toda su paciencia y atención a los detalles, la tanatopractora peinó cada mechón de cabello, asegurándose de que luciera ordenado y presentable.

Mientras avanzaba su labor, se daba pequeños momentos para evaluar su trabajo, finalmente, cuando estuvo satisfecha con el resultado, (your name) se tomó un momento para pensar.

—Ay, ya me quiero ir a casa —murmura cansada—... Uff... ¡No! ¡Tú puedes, (your name)! Solo unos 4 más...














































—Sí... Solo unos 4 más y me voy a casa.

 Solo unos 4 más y me voy a casa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lo sé, T/N aún sigue en pijama. Por favor, no se olvide de votar que no cuesta nada 😭


Y adelante, comenta ¡Me gustaría saber su opinión sobre este prólogo patético que hice! ;)

𝕍𝕀𝕍𝕀𝔸ℕℕ𝔼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora