[ 𝗣𝗢𝗦𝗦𝗜𝗕𝗟𝗬 𝗜𝗡 𝗙𝗢𝗥𝗞𝗦 ⚝ ] -Janice Miller termina desaparecida en Forks sin rastro de ella.
-"¿Cómo es que siempre encuentro a los hombres más extraños para salir?
Ahora solo los raros me siguen. ¿Me estás siguiendo, verdad?" -
Pasaron horas en el camión ilegal que las pasaba a Estados Unidos, un clima frío adornaba el lugar y auras azules se posaban en el viento, nada parecido a Tijuana o cualquier lugar de América Latina que la madre haya visto antes.
Sudor en la frente era lo que tenía la adolescente, ojos llorosos y un grito ahogado hizo que la mujer se pusiera alerta, su hija tenía pesadillas de nuevo, como todas las noche que lograba descansar y dormir profundamente.
Las pesadillas atormentaban a su pequeña, los asesinatos pasaban por la mente de la adolescente cada vez que dormía, aunque Janice no lo admita, su estrés postraumático la comía por dentro.
—Ya pasó, amor —acariciaba el cabello de su hija dándole consuelo —¿Por qué no miras el paisaje?
—Esto es hermoso —dijo Janice asomándose por el cristal del camión, siendo hipnotizada rápidamente por los paisajes del pueblo y los cantos de aves en el bosque.
—Sabía que te iba a gustar —rió la madre mirando a su hija —. Es mucho más tranquilo que cualquier lugar donde hemos estado, ¿No?
Las pequeñas y hogareñas tiendas se podían ver por las calles, poca gente en las calles con ropa abrigada, hasta Janice lo admitía, hacía demasiado frío.
La piel de las dos mujeres siempre ha sido sensible ante el frío, ya que, en América Latina, los lugares son calurosos la mayoría del año, pero en diciembre siempre sufren.
Su camino hasta la casa fue extenso, ya que estaba alejada del pueblo, en un bello bosque virgen con miles de especies viviendo en él. Uno de los pasatiempos favoritos de Janice, es observar todos los tipos de hongos que encuentre. Esta adoración empezó cuando, viviendo en Tepoztlán, la vegetación del lugar y los grandes cerros la llamaron, viendo la gran cantidad de hongos y flores exóticas.
Una hogareña casa modelaba junto al extenso campo de margaritas y pasto largo, una linda cabaña de madera alejada del pueblo, donde no se podrían escuchar los gritos, a no ser que un oído supersónico exista aquí.
—Ya saben, todo su papeleo y actas están dentro en la mesa —dijo el varón abriendo la puerta del camión y ayudándoles a bajar —si necesitan otra cosa, recuerden pedir un filtro de polvo para una aspiradora Hoover Max Extract® 60 Pressure Pro™ y son otros 15,000 dólares.
—No se preocupe, estoy segura de que no lo necesitaremos más —garantizó la mujer, otra vez.
—Señora, todas las veces que las he llevado terminan diciendo lo mismo.