Bite Me V

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🩸 Bite Me 🩸

Naruto se desabrochó los puños de su camisa mientras respondía suavemente las preguntas de la policía. Podía sentir los ojos de Hinata sobre él, lo cierto que estaba evitando mirarla porque sabía que no podría ocultar sus ansias de llegar a ella. Se había sacado su saco cuando empezó a ayudar a Kiba a mover las mesas y sillas mientras él llamaba a la policía.

A Naruto no le importaba hablar con la ley, como vampiro de muchos muchos años, sabía cómo se manejan. Varias décadas atrás había sido uno de ellos.. la verdad es que había estado en todas las carreras, siendo político, policía, juez.. del único lugar que se mantuvo lejos fue de la iglesia.

Lo cierto es que Hime le había abierto los ojos como ella había prometido. Viendo las atrocidades que hacían los católicos en nombre de Dios. Si bien hubo cosas buenas, ellas no llegaban a tapar las malas y llenas de prejuicios.

Naruto se mantuvo bajo el mando de Jiraiya, el hombre lo tomó como hijo, a pesar que el había matado a una de las chicas que consideraba una hija también. Él lo entrenó y le enseñó muchísimas cosas, también supo mucho más de Hime. Aún se arrepentía por estar ciego por la iglesia cuando la había matado, ella siempre había sido una flor delicada. Jiraiya le había contado como le había encontrado en un campo de arroz en Japón. Ella estaba por morir y él la convirtió. Hime no era su verdadero nombre, era el nombre que le había dado Jiraiya ya que ella no había tenido uno. Y considerando que era japonesa y era regia como una princesa, le había dado ese nombre.

En su billetera, aún tenía un pequeño retrato de ella..

Desde que se había despertado en las mazmorras de Sakura, Naruto siempre se había sentido vacío. Y Jiraiya le explicó el por qué.

Estaba conectado a Hime, ella lo había convertido y por eso necesitaba llenar ese vacío. Desde que se enteró el porqué, comenzó a buscar su reencarnación. Jiraiya le dijo que sólo se sentiría completo cuando la volviera a encontrar y considerando que los humanos reencarnaban, podría encontrarla.. el asunto es que él no había creído que tardaría tanto...

Los recuerdos de su cuerpo desnudo lo perseguían cada noche, sus ojos, el roce de sus labios en su cuello.. su cara se alzó en sólo sentir que su perfume se acercaba a él.

— ¿Entonces, eso fue todo?— preguntó la policía.

Naruto no le pasó desapercibido como ella agitó sus pestañas a él, podía ver la sangre acumulándose en sus mejillas mientras él la miraba fijamente. Hinata llegó justo a su lado, él se tensó cuando sus colmillos empezaron a doler.

— Si, él estaba siendo muy desagradable con la señorita Hinata —, él giró su cabeza para verla. Sus ojos tomaron nota de su rostro lleno de sangre mientras parpadeaba hacia él. Sonrió, sin poder evitarlo—. Hola—, murmuró bajo, su voz volviéndose ronca.

— Hola—, respondió ella sin aliento.

— Muchas gracias por su tiempo, señor Uzumaki — dijo algo molesta la policía cuando ya no volvió su atención a ella.

Naruto asintió, dandole un rápida mirada y luego girando su cuerpo para tener toda la atención hacia Hinata. Ella aún lo miraba fijamente, no le importó como parecía comerlo con los ojos. Tenía unos muy expresivos, en un parpadeo le pareció ver a Hime, pero agitó ese pensamiento.

Las reencarnaciones eran muy parecidas a sus vidas pasadas, pero el carácter podía variar, dependiendo de lo que había vivido la persona. Pero Hinata olía igual que Hime, su piel seguía siendo blanca y esos hermosos y profundos ojos lo miraban con algo más que curiosidad. Él bajó la mirada por su cuerpo, al fin podía verla sin ese molesto delantal. Y fue como un golpe directo a la boca de su estómago. Tuvo que obligarse a dar un paso hacia atrás.

Ella era mucho más tentadora que Hime.

Pasó saliva, intentando que ella no notará su reacción, y cuando subió la mirada, Hinata había bajado la mirada y jugaba con sus dedos. Su sentido del olfato no era tan bueno como los perros, él era excelente con su oído, así que pudo escuchar el cambio de latidos. Se hizo un experto al pasar de los años, y supo que ella estaba avergonzada y, tal vez algo desanimada. Probablemente ella había interpretado mal su reacción..

—¿Estás bien?

Naruto parpadeó mirando la coronilla oscura, jamás había sido un hombre con palabras tan simples, más cuando estaba de caza. Pero ver a la mujer.. no, ver a la reencarnación de la mujer que podría haber sido su ama, le daba emociones que no había tenido en muchísimos años. Se agitó interiormente y dió dos pasos para quedar mucho más cerca de ella.

Hinata levantó sus ojos grises hacia él, su corazón golpeando como tambor, fuerte, duro, avisando a su cuerpo que venía una pelea. Una pelea que él estaba seguro que ambos ganarían.

— Estoy muy sorprendida—, dijo ella, abriendo los ojos de par en par, demostrando eso exactamente —. La forma en que manejó a mí ex..

—¿Tu ex?— Naruto se crispo, giró su cabeza para ver al hombre corpulento e idiota sentado en la parte trasera del auto policial. Él los miraba con la mirada entrecerrada.

— Si, digamos que no era mí mejor momento —. Volvió sus ojos a Hinata cuando ella habló, también miraba a su ex con los ojos entrecerrandos—. Pero no tarde mucho en darme cuenta que es un imbécil come mierda. Estaba llena de dopamina mientras hacia ejercicio en el gimnasio y me parecía muy atractivo. Hasta que salimos del gimnasio —. Hinata hablaba rápido, parecía no poder parar y él sonrió —. Está totalmente lleno de él mismo, y me sorprende que pueda hablar correctamente. La sangre no debe llegar a su cerebro por..

Ella se detuvo de golpe, cuando miró hacia su rostro. Sus ojos se abrieron asombrados cuando notó su sonrisa, sus mejillas volviéndose más calientes con la acumulación de sangre.

— Lo siento — dijo apresuradamente —. No puedo evitar balbucear cuando estoy al frente de un hombre. Más cuando me dan toda la atención como tu. Además era tan guapo y galante. La manera..

Hinata cerró los ojos con fuerza, mientras apretaba sus labios.

— Lo siento —, volvió a decir, para luego apretar una mano en su boca para evitar hablar.

Naruto no pudo evitarlo, el sonido salió algo ronco por la falta de uso. Pero se rió.

 Pero se rió

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