•- 𝗠𝗶 𝗟𝗶𝗻𝗱𝗼 𝗧𝗶𝘁𝗲𝗿𝗲 -•𝐋𝐮𝐳𝐛𝐮𝐫

•-Capítulo 2-• Negociación

_Casa de vegetta 10 a.m_

Wilbur estaba agotado, El amante del morado se ocupo y no abría la puerta, el primero solo quería llegar a su casa, dormir y amanecer fresco como lechuga. Sin embargo, realmente necesitaba la chaorita. 

Había dormido solo 2 horas, el resto del tiempo lo utilizo teniendo la charla más aburrida que ha tenido con Sapo Peta, después hablo un poco con Philza, escuchando como Techno y Tommy volvieron a tener un pleito. Posteriormente, volvió al papeleo. 

Esto de ser alcalde no le estaba gustando.  

Finalmente, vegetta hizo su aparición abriendo la puerta. 

-¡Hola Wilbur!, tío, mi alcade preferido. - Palabrerías, de nuevo, asi era el de ojos color amatista. - Pasa, pasa, tenemos tiempo para hablar. 

-Gracias Vege, vengo medio muerto. - Respondió el de ojos almendrados, entrando a la casa del contrario irradiando flojera y ganas de morir. - En fin, ¿tienes tiempo?, venía a NEGOCIAR. 

(Pausa para explicación) 

la charoita es uno de los cristales más extraños del mundo y sólo se encuentra en el rio Chara en Siberia, Rusia. Por su difícil obtención y su belleza es una de las piedras más valoradas. También se le ha conocido como piedra lila y jade Charoita.

Entre las propiedades de la charoita una de las más destacables es la eliminación de las cualidades negativas y favoreciendo así la tolerancia con otras personas. También se cree que aporta calma mental y a promover bienestar emocional. De esta forma se suele recomendar esta piedra para relajar el cuerpo y dormir. 

Volvemos con la historia 

- Con que negociar, ¡me lo hubieses dicho antes tio! - Wilbur rodó un poco los ojos, no le gustaba que el peli negro fuese tan confianzudo, en sus propias palabras. - Venga, ¿y qué quieres negociar? 

- Si, veras, me preguntaba si tenías charoita. 

En cuanto termino la oración, la radiante sonrisa de su compañero se borró, el británico se vio confundido ante esa reacción. 

- Digo, claramente te dare algo a cambio y tal, si tengo pensado pagarte pero... ¿Qué sucede? 

- ¿Por qué buscas charoita? - Respondió con otro cuestionamiento el peli negro. - No es común que se sepa de su existencia a menos de ser un hechicero... ¿Para que la quieres? - Cuestionó el oji violeta de manera seria, dejando al contrario pensando en una buena excusa para salir de ese repentino interrogatorio.

Wilbur definitivamente no esperaba esa reacción. - Si, emmm, veras, mi padre me ha pedido esa piedra, no se para que, tiene un nuevo novio calavera o algo así y la necesita. - El semblante de su contrario cambio de inmediato. Sin embargo, el castaño oscuro aun debía decir más, solo para aclarar. - Llevo toda la noche y madrugada buscándolo, y pensé que tu podrías tener. Pagaré lo que sea.

-Oh, debiste empezar con eso, ¿novio calavera? Eso suena genial, tio! - Menciono Vegetta, haciendo un ademan con la mano para que el británico lo siguiera, cosa que hizo de inmediato. - Pues estas de suerte colega, aca esta en alguno de mis cofres, es la última que me queda. Directamente extraída de... 

Wilbur dejo de prestar atención a la aventura de vegetta por un buen rato, solo le interesaba la idea de que pronto tendría a Luzu a sus pies de nuevo. ¿De dónde salió esa obsesión por Luzu? Ni el lo sabía, solo le constaba que lo quería solo para el. 

- Muchas gracias Vegetta, ¿qué te doy a cambio? - Dijo Wilbur sacando algunos diamantes de su inventario, 37 exactamente. 

- Veamos... Es la última que me queda y me tomo muchísimo tiempo conseguirla, mmmmm, un puesto de trabajo en el jurado. Si, el puesto de juez. 

El de mechón albino guardó sus diamantes. - ¿El puesto de Juez? Okey, okey, arreglaré todo con el juez actual y... Emmm, podrás empezar el martes que viene. 

-Muy bien, entonces toma Wilbur, ¡quiero que me presentes a tu padre y su novio! 

-Claro, claro... Bien, iré a dormir, estaré ocupado en la noche. 

Gracias por leer.

673 palabras. 

Miguel les quiere.