Capitulo 6

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Intentó luchar contra la fuerte necesidad de llorar toda la noche, había buscado consuelo en los libros al darse cuenta de que ninguno le brindaba la sensación de paz que tanto añoraba decidió simplemente cerrar los ojos.

Imaginaba a Alex, disculpándose por haber dicho eso, confesando que le gustaba, desde siempre, que tenían un futuro juntos, hasta que se dio cuenta. No iba a pasar, ella debía dar el primer paso.

Lo haría cuando fuera el momento.

El sábado, sus padres salían antes del trabajo pero tenía tiempo de realizar su plan maestro. Despertó temprano pero con los ojos hinchados, buscando una alternativa, no confesar sus sentimientos aún, aplanar el terreno, conocer a Jackie, sus sentimientos, acercarse a ella con la pura intención de observar. No dañarla

Le envio un mensaje

Becky: ¿Quieres aprender a montar?

Hace un buen día

Jackie: Claro, salí a correr

Te veo en 30 minutos

Becky: Genial, yo iré.

Lo tenía todo calculado, se vengaría de Cole y Isaac por la broma de una manera inofensiva, asegurándose de que Jackie la viera, luego le enseñaría a montar, generando así el vínculo de amigas. Debo dejar de leer ese tipo de libros, pienso como un monstruo. Se repetía en su cabeza para después decir que era inofensivo.

Una vez preparada la venganza se cambió a unos jeans y una playera de manga larga, se puso bloqueador y se calzó las botas, salió de la enorme casa con dirección a los establos, su perro Loki la siguió, llegó a los establos donde Bruce relinchó, pero no, no confiaría a su más grande tesoro a una desconocida, llevaría a Júpiter el de su madre, un caballo grande y hermoso pero completamente dócil.

- ¿y de este también hay película?- escucho una Jackie animada desde lejos.

Alex y Jackie voltearon a ver a Rebecca que venía en el lomo de Júpiter.

-¿que paso con Bruce?-Su amigo sonrió y acarició al animal- ¿lo agotó la carrera?

-en tus sueños solamente- respondió seria- hoy inician las clases de Jackie

La mencionada sonrió nerviosa

-entonces, tendré que dejarlas solas- dijo Alex dirigiéndose a la casa

-creí que eras buen jinete- habló tomando su mano, lo cual incomodó a Becky

-déjalo, esto es para chicas- sonrió la rubia y su amigo se alejó.

-bien, empecemos antes de que me arrepienta- expresó Jackie

La chica bajó del caballo com una charola de brownies.

-toma el de la derecha- sonrió notando las miradas de Cole y Isaac a lo lejos- ahora sigueme.

Camino con paso firme hacia los chicos que las observaban

-hola ¿quieren uno? Los hice en la mañana- saludó sonriente

-están deliciosos- aseguró Jackie aunque ambos la ignoran descaradamente

-Hola, por supuesto que sí Becky- sonrió Isaac encantado de verla.

-no me negaría nunca a tus postres- dijo Cole mirándola, también con una sonrisa

Una vez ambos tuvieron un brownie en la mano, lo mordieron al mismo tiempo y sonrieron ante el exquisito chocolate.

Fue casi imposible contener la risa para las mujeres que los miraban, ambos se miraron el uno al otro confundidos.

-¡tus dientes son verdes!- exclamaron al mismo tiempo.

-seguro que Katherine y George ya les dijeron pero, no se metam con Jackie- amenazó la rubia divertida. Mientras giraba para empezar las lecciones de su nueva amiga.

-¿Cómo es que Alex no se da cuenta de la persona maravillosa que ha estado esperándolo? - preguntó Isaac en un susurro que solo Cole escuchó

- ¿Becky?- dijo el rubio sorprendido - Dios Santo, Isaac. ¿Desde cuándo?

-no lo se- murmuro su primo

-segun me cuentas, sabes lo básico, como subir, bajar y controlarlo, muéstrame entonces- le dijo Becky a Jackie

La neoyorkina asintió pero al cabo de un minuto Rebecca notó que algo andaba mal.

-no tengas miedo. El caballo siente tu miedo.-acarició al animal- y lo contagias, desde el momento que te subes, te vuelves una con él y le transmites tu miedo.

- pense que mi antigua instructora lo decía como un mito o algo así- solto con los ojos biem abiertos

-no lo dicen los científicos pero es cierto. Te ayudare a eliminar tu miedo.- le dijo Rebecca mirandola

-¿quién te enseñó a cabalgar?-indago Jackie

-mi padre

Al cabo de una intensa hora de trabajo, Rebecca se dirigía a su casa tarareando una canción

-todo va saliendo de acuerdo al plan que diseñe- cantó sin poder evitar sentirse malvada como Úrsula en la película

Pero había salido exactamente como lo planeado.











Feliz navidad a todos los que estan leyendo esto, y a los que no también, estaré fuera de mi casa estos días pero intentaré publicar. Los quiero 💗

You Belong With MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora