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Jungkook asintió despacio luego de leer lo que había anotado en su teléfono

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Jungkook asintió despacio luego de leer lo que había anotado en su teléfono.

—¿Tampoco puedo dormir en el sofá y dejarte la cama? —Jimin negó e insistió palmeando a su costado en la cama.

—Bien.

Se acostó correctamente en un lado y tomó el control para apagar las luces del techo dejando solo algunas lámparas prendidas.

Jimin gateó para meterse bajo las sábanas luego de haber cerrado las cortinas del gran ventanal y se hundió en la almohada abrazándola. Finalmente podía apoyar su cabeza en algo blando y descansar de ese largo día.

Jungkook lo miró. Estaba en la misma cama que Jimin y se sentía como el ser más afortunado del mundo.

Justo en ese lado, habían estado echadas tantas personas de las que ni siquiera sabía su nombre. Personas que sólo querían sexo y su dinero, pero Jimin estaba ahí sin querer ninguna de las dos. Jimin estaba ahí sin esperar nada a cambio.

El rubio se hizo un ovillo y abrazó la almohada que le correspondía a Jungkook. Se la estaba robando. Mientras Jeon miró el techo y se cubrió con la manta hasta las caderas.

—Buenas noches Jimin.

Park asintió pestañeando pesado. Bostezó y subió su mano a su propia oreja para masajear la piel de esta y relajarse hasta que finalmente cayó en los brazos del dios de los sueños.

 Bostezó y subió su mano a su propia oreja para masajear la piel de esta y relajarse hasta que finalmente cayó en los brazos del dios de los sueños

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Jungkook fue el primero en abrir los ojos a la mañana siguiente. Tenía un dolor de cabeza horrible, que parecía ir en aumento.

Iba a levantarse pero se vio detenido cuando una melena rubia y un pequeño cuerpo estaba contra su pecho.
Recordaba todo lo que había ocurrido anoche, con más lujo detalle del que querría.

Su brazo había quedado extendido bajo el cuerpo de Jimin hasta su espalda como si en medio de la noche también hubiera estado abrazándolo hacia él.

Apoyó la mano en su hombro sin saber muy bien qué hacer con ella.

Jimin estaba babeando un poco. Se removió a rascar su nariz y devolvió el brazo a abrazarse a su pecho restregando más su mejilla.

Hacía frío y lo que sea que estuviera a su lado era como un radiador.

His Voice 𑁤 KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora