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Cómo cada mañana Jimin se levantaba, se estiraba un poco en la cama y luego se quejaba de la luz que entraba por la ventana.

Cómo cada mañana...

Se levantó, se ducho y se alisto para un nuevo día en la academia de danza contemporánea.

Jimin amaba la danza, amaba sentirse libre y expresarse a través de la misma, amaba la atención de los demás en el, sobre todo demostrar que sus comentarios eran totalmente ciertos.

Siempre escuchaba:

"Eres el mejor"

"Eres tan delicado y flexible"

"Jimin Oppa algún día quiero bailar como tú"

Simplemente el mejor.

Hace una semana había creado su cuenta en OnlyFans, pero no sé atrevía a subir ningún contenido aún ¿Razones?

Era demasiado tímido en ese aspecto.

Y sus experiencias sexuales eran demasiado limitadas, de hecho se reducían a una sola persona.

Su ex novio

Sin embargo Jimin había investigado un poco el aproximado de cuánto podía ganar mensualmente por el contenido que subía a dicha página.

El resultado fue increíble.

Por solo mostrar un poco de erotismo y excitar a hombres con mentalidades un poco cochinas.

Taehyung le dijo:

"Debes jugar con ellos, piensa que la cámara es una persona a la que quieres enloquecer, juega con tu cuerpo, tócate, excitate tu mismo y tendrás muchos suscriptores pagando por tu contenido"

Parecia fácil ¿No? Pero en realidad Jimin tenía miedo, miedo porque su padre era un empresario importante en Busan y temía decepcionarlo siendo su único hijo y más grande adoración, miedo porque su madre se esforzaba por darle lo mejor todos los días dedicándose muchísimo a su trabajo, miedo porque algún despiadado filtrara algún vídeo suyo y su reputación de excelente bailarín se viniera abajo.

En realidad hacer ese tipo de contenido tenía sus pros y sus contras.

Las personas que hacían ese tipo de contenido simplemente renunciaban a tener una vida decente, los demás sabrían que hace y ellos tendrían que aceptar la realidad.

Se están prostituyendo virtualmente.

Pero... Había un asunto, Jimin era demasiado caprichoso, le gustaba gastar, no queria trabajar, le encantaban los lujos y las comodidades.

Y ya su madre no estaba dispuesta a pagar por ciertas modalidades de vida; Jimin estaba muy, pero muy seguro que eso se debía al hombre que ahora vivía con ella.

Ese que lo miraba siempre de manera desaprobatoria, como si fuese su padre o algo así, no tenía ningún derecho a opinar sobre su vida o su relación con su madre.

"Solo se follaba a su madre, eso no le daba ningún derecho sobre el"

Con ese pensamiento, salió de su habitación después de colocarse su caro perfume con olor dulce.

Bajó la escalera y como siempre, escuchó la risa de su madre en el comedor, también se oía la gruesa y varonil voz del novio de su madre, un completo bochorno sus "escenitas románticas matutinas"

Así eran siempre, melosos y molestos.

— Buen día mami— Se acercó dejando un beso en la mejilla de su madre, la misma que sonrió ante aquello y le dió toda su atención momentáneamente.

— Buen día mi cielo, hueles muy bien.

Jimin rio y se acercó a la mesa para tomar una manzana.

— Ya me voy, hoy tengo la última práctica antes del evento de apertura.

— No te esfuerces demasiado.

— No lo haré.—mordió su manzana— Papá también vendrá a verme así que todo tiene que ser perfecto.

Su madre asintió, el ambiente se volvió tenso, era claro que su madre y su padre no tenían la mejor relación de todas, además de que su madre no apoyará del todo su carrera, era complicada su posición.

— Bien, ya me voy mami, adiós te amo

Jimin salió del comedor para irse por fin a la academia, sabía que había incomodado a su madre al mencionar a su padre en presencia del otro chico, sinceramente ese era su cometido.

A Jimin no le agradaba el novio de su madre.

— Adiós cielo.

Mientras Jungkook se había quedado perplejo por la vista que le había dado Jimin con esas mallas negras ajustadas a sus largas y perfectamente voluminosas piernas.

Incluso se veían más lindas y esbeltas que las de su madre.

¿Espera, que?

Eso no estaba bien, no debía comparar a su novia con su hijo, nadie se igualaba a ella.

A él le gustaba ella y ya.

— ¿Amor? ¡Amor! — Jungkook sacudió su cabeza deshaciéndose de aquellos pensamientos, para prestarle atención a su novia— ¿En qué estabas pensando?

En las piernas de tu hijo

— En las nuevas máquinas del gimnasio que llegan hoy, tendré mucho trabajo— se recompuso en la silla mientras bebía un sorbo de su café, aquellos pensamientos invasores habían empezado desde hace algún tiempo y cada vez eran más fuertes.

— Oh eso quiere decir que vendrás muy tarde hoy...

— Bueno, si quizás.

— Y yo que quería que tuviéramos una noche especial hoy...

Jungkook la miro con gracia.

— Justo hoy, cuando estaré ocupado, cuando yo quiero tu nunca quieres ¿No crees que eres un poco injusta cariño? — La mujer bajo su cara con vergüenza.

— Lo siento amor, enserio lo siento, es solo que...siempre estoy muy cansada y...

— No te preocupes cariño, está bien, supongo que solo es cuestión de adaptarse¿No?, estoy seguro que tendremos oportunidad de estar juntos.— Se acercó dejando un casto beso en los labios de su novia, antes de levantarse recogiendo los platos para lavarlos.

Jungkook anteriormente era activo sexualmente, al principio cuando empezó a salir con su novia, ella era muy coqueta y un poco caliente, no fue eso lo que lo cautivo, pero sin duda era algo que le había agradado de aquella mujer.

Sin embargo la realidad de vivir juntos era diferente, casi no se veían en todo el día y cuando por fin iban a dormir casi nunca tenían relaciones, el tenía que rogarle para que al menos menos le permitiera poder meterlo.

No había nada más.

No habían juegos, no había sexo caliente y duro.

Era bastante vainilla, sin contar que tenía que llenarla de mimos para que no se quejara de como la tocaba, o por como se sentía dentro de ella.

Y esa vida, ya no le estaba gustando...