14] Los Hermanos Shinobi

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Naruto y Sasuke entraron en la sala de estar de la casa de la manada mientras Hinata todavía estaba lavando los platos en la cocina

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Naruto y Sasuke entraron en la sala de estar de la casa de la manada mientras Hinata todavía estaba lavando los platos en la cocina. Sasuke rápidamente les dijo a los hombres allí reunidos que se comportaran lo mejor posible, y todos asintieron sin quejarse. Algunos de ellos parecían bastante emocionados. Sasuke lanzó una mirada de advertencia alrededor de la habitación.

—No te acerques a las mujeres con ellos. Lo digo en serio. Por lo que me han dicho, la mayoría de ellas tienen miedo de los hombres. A menos que quieras salir conmigo para una pelea de dominación, guárdalo en tus pantalones.

—Nos comportaremos. Esto es tan genial—, dijo Gama emocionado. —Uno de nosotros podría encontrar pareja.

—No se adelanten—. Naruto hizo un pequeño destello por su cuenta.—Trata a estas mujeres con respeto... como si fueran tus hermanas.

—Seré un caballero—. Yagura sonrió. —Lo juro.

Sasuke entrecerró los ojos hacia él. 

—Nada de payasadas, Yagura. Eres el mayor ligón que tenemos. Compórtate. Lo digo en serio. Sin estos nuevos lobos, nos espera una pelea infernal con la manada Akatsuki. Ten eso en mente.

—Lo tengo—, maldijo Yagura, poniéndose solemne. —No me importa una pelea, pero no quiero perder a nadie que me importe.

—Ninguno de nosotros lo hace—, asintió Naruto, y ladeó la cabeza hacia la puerta. —Escucho vehículos.

Sasuke y Naruto salieron al exterior. Observaron cómo un Bronco negro y viejo entraba en el camino de entrada circular. Detrás de él había una autocaravana y, a continuación, un todoterreno rojo. Los vehículos se detuvieron frente a la casa de la manada y dos hombres grandes salieron primero del Bronco.

Naruto estudió a los hombres y pudo decir claramente que eran grandes bastardos. Los dos eran casi idénticos en tamaño corporal. Medían dos metros y medio, probablemente pesaban alrededor de doscientos cincuenta kilos, luciendo hombros anchos y brazos  musculosos. 

Iban vestidos de manera informal con jeans azules y camisetas sin mangas. Uno de ellos con cabello largo y negro atado a una cola de caballo en punta, el otro tenia el pelo negro, pero corto, ambos con penetrantes ojos negros que estaban entrecerrados, como si intentaran resumir a Naruto y Sasuke mientras ellos subían los escalones del porche.

—Soy Shikamaru. Este es Sai. Nuestros otros hermanos, Toneri y Shino, están con las mujeres—. La mirada de Shikamaru se dirigió a Sasuke. —Agradecemos la invitación. Es un infierno no tener una casa y vivir siempre en movimiento.

—Me imagino que lo sería—. Sasuke sonrió. —Nos alegra que estés aquí. Soy Sasuke y este es mi mejor amigo, Naruto. También es el futuro compañero de Hinata.

Naruto asintió con la cabeza hacia ellos. 

—Bienvenidos.

—Sí, nos dimos cuenta de eso—. Sai inhaló, y luego una sonrisa tiró de sus labios. —La ducha que tomaste no cubrió lo que estabas haciendo antes de que llegáramos aquí. Nunca pensé que vería el día en que nuestra chica se engancharía con un cambia formas. Ese fue un giro de la trama, que ninguno de nosotros esperaba.

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