Era un nuevo día lo que significaba que era hora para que el plan de Ranpo comenzara. . . .
─Hola Dazai─ saludo intentando acercarse al castaño.
─Oh, hola Ranpo─ contesto el castaño con una linda sonrisa en su rostro.
─¿Tienes planes para hoy después de salir del trabajo? ─.
─Nop, ¿por qué?, ¿ocupa que lo ayude en algo? ─ pregunto curioso el castaño.
─Oh no, no, sólo que, quiero invitarte a comer algo en alguna cafetería de por aquí ─ dijo con una sonrisa en su rostro.
─Eh?, si, está bien, conozco un lugar cerca de aquí podríamos ir ahí─ dijo algo confundido el castaño
─Bien!, entonces nos vemos después ─ se despidió y fue a su lugar. . . .
El día había pasado volando, ya era la hora de ir a sus casas y dejar el trabajo para el día siguiente. Dazai se encontraba acomodando algunos papeles que había resuelto mientras que Ranpo esperaba por él. Después de unos minutos el castaño término y fue donde Ranpo.
─¿Nos vamos ya Ranpo? ─
─Sip, vamos─ dijo mientras tomaba la mano del omega cosa que lo sorprendió un poco.
Siguieron caminando hasta que entraron a una pequeña cafetería, era realmente cómodo ese lugar. El joven detective sólo seguía al castaño el cual buscaba una mesa.
─Bienvenidos, tomaré su orden─ dijo la mesera.
─Claro!, yo quiero un flan y un café por favor ─ ordenó el castaño.
─Yo un pastel de chocolate y una malteada de fresa por favor ─ ordenó Ranpo.
─Okey, en un rato les traigo su orden─ dijo y se retiró.
─Mm, Ranpo ¿para qué me invitó a comer?─ dijo con curiosidad.
─Oh, bueno, tengo que decirte algo pero primero comamos─ dijo al ver cómo la mesera se acercaba con sus órdenes.
Mientras comían platicaban sobre cosas del trabajo y una que otra cosa sobre sus vidas personales. Al terminar fueron a un parque cerca de la cafetería para platicar sobre lo que Ranpo tenía que decir.
Dazai se encontraba algo distraído alimentando a algunas aves que llegaban ahí.
─Oye Dazai─Dijo el chico algo apenado.
─¿Si?─ Dijo con algo de duda el castaño.
─ He usado mi ultra deducción y me he percatado de que eres mi pareja destinada.─ Dijo muy nervioso esperando la reacción de aquel omega castaño.
─ Pfff, claro ─ Dijo el castaño divertido pensando que su superior bromeaba pero al ver la mirada seria del joven alfa se quedó callado por unos segundos. ─¿E-es enserio?─ dudo un poco.
─ Así es ─ Dijo tranquilo mientras le sonreía.
El castaño escapo del lugar al ver que era verdad, realmente nunca se lo había esperado . . .
Dazai llegó a su departamento algo cansado, le faltaba el aire, el joven detective lo había tomado desprevenido estaba muy sorprendido pero también extremadamente feliz, después de todo ¿quién no se pondría feliz si el chico que te gusta te dijera que eres su pareja destinada?. Dazai sólo se tumbo en su cama mientras daba algunas pataditas y ponía una almohada sobre su cara, se sentía en un sueño, eso hasta que se dio cuenta de lo que había hecho.
─Demonios! ─ decía Dazai mientras se golpeaba la frente al recordar que había escapado sin decir nada.
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